La DGT ahora también te multa por abrir la puerta de tu coche sin mirar: cómo evitar la sanción

Son muchos los malos hábitos que toman los conductores al bajar y subirse de sus vehículos, como por ejemplo abrir la puerta sin cerciorarse de que no está suponiendo un riesgo para el resto de personas. La Dirección General de Tráfico (DGT) quiere acabar con estos pequeños accidentes que pueden acabar en catástrofes, y lo hace con una sanción que la mayoría de conductores desconocen: abrir la puerta del coche sin mirar está sancionado con 80 euros de multa. No es una sanción muy conocida, pero es igual de importante que evitar fumar en carretera, conducir sabiendo que tienes una enfermedad que lo imposibilita o ir mal vestido mientras circulas.

Es una acción sancionable económicamente, pero no acarrea la pérdida de puntos. La DGT también asegura que es muy poco habitual o muy difícil de captar en el momento exacto, ya que tendría que ser un agente el que captase el momento exacto en el que el conductor se bajase del vehículo.

Esta sanción viene recogida en el artículo 114 del Reglamento General de Circulación y está considerada infracción leve:

"Se prohíbe llevar abiertas las puertas del vehículo, abrirlas antes de su completa inmovilización y abrirlas o apearse de aquel sin haberse cerciorado previamente de que ello no implica peligro o entorpecimiento para otros usuarios, especialmente cuando se refiere a conductores de bicicletas."

Sanciones

Bajarse del vehículo sin mirar

La multa por bajarse del vehículo sin mirar es de 80 euros, pero si el pago se efectúa antes de lo acordado será únicamente de 40 euros. Esta sanción también se aplica a los conductores que abren la puerta del coche sin estar completamente parado.

Los más afectados con estos malos hábitos son los ciclistas, que se topan muy a menudo con un buen susto al ser sorprendido por la puerta inesperada de un vehículo.

Por ello, los ciclistas son el foco de las próximas medidas de la Nueva Ley de Tráfico que entrarán en vigor el 21 de marzo. Entre ellas se encuentra la obligatoriedad de ocupar el carril contrario para adelantar con el vehículo y la prohibición de parar o estacionar en un carril bici. Ambas sancionadas con 200 euros de multa.

Es un medio de transporte muy vulnerable por el que la DGT está luchando para que puedan circular sin temor a posibles accidentes.

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