Marta Duque es doctora en Farmacia, facultativa de Bioquímica Clínica, miembro de la Comisión Nacional del Paciente, del EFLM (Patient Focused on Laboratory Medicine) y tutora de residentes en el mayor hospital de España: La Paz (Madrid). Con todo este bagaje, además, también es interina. Lleva años ejerciendo su profesión en fraude de ley. En 19 años ha encadenado la friolera de 28 contratos temporales en la sanidad pública madrileña.
Los médicos especialistas están en huelga desde este lunes en Madrid para protestar por la temporalidad y por unas OPE (ofertas públicas de empleo) que amenazan con desmantelar las unidades especializadas en los hospitales de la comunidad capitalina. De los 12.000 facultativos que trabajan actualmente en hospitales de la región, cerca del 52% tiene contratos temporales. Esta cifra se eleva al 85% en el caso de las Urgencias.
“La última oposición para mi especialidad salió en 2001, pero yo todavía era residente [MIR] y no me podía presentar”, explica Duque en conversación telefónica con este periódico. “Ahora que ya estamos especializados en unas áreas muy concretas nos dicen que nos tenemos que presentar a un examen de conocimiento general. Es un poco absurdo. Eso ya no va en mi perjuicio, sino en que va en detrimento de los pacientes”.
Como ella, miles de facultativos se encuentran ante una situación que roza el “absurdo”, más aún, teniendo presente que el Gobierno aprobó recientemente un decreto que permite a los interinos en fraude de ley optar a un concurso de méritos para obtener una plaza. Y si hay algo que no les falta a estos médicos son méritos. Por eso se han manifestado este lunes en varios puntos de la capital.
La Consejería de Sanidad ha establecido unos servicios mínimos del 50% salvo en determinadas unidades “críticas y urgentes” como Diálisis, Quirófanos, Urgencias, Reanimación, Hospitalización o Cuidados Críticos. Ahí tendrá la obligación de acudir el 100% de la plantilla.
Décadas de fraude de ley
Todos los facultativos consultados para este reportaje llevan más de 10 años ejerciendo sus especialidades sin plaza fija. Alguno, incluso, daba por sentado que se jubilaría siendo interino. Sin embargo, la OPE convocada por la Comunidad el pasado diciembre puede echar por tierra las unidades especializadas donde trabajan.
“Cuando estás especializada en un área tienes que estar al día y seguir estudiando. Si yo tengo una oposición a la vista, voy a centrarme en estudiar la oposición y no voy a estudiar las últimas guías de práctica clínica para atender a mis pacientes, que son a quienes atiendo diariamente”, prosigue Duque.
“Por méritos, por años trabajados, por cursos y estudios publicados, no tengo ningún problema en la profesión. Me parece una tomadura de pelo tener que ponerme a estudiar cosas que posiblemente nunca aplique en mi carrera profesional. Pero, sobre todo, esto desestructura los servicios. La atención a los pacientes no va a ser la misma”.
—¿Qué les diría al consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid y a la ministra de Sanidad si les tuviera delante?
—Que no pueden tratar así a los sanitarios que lo hemos dado todo… Yo fui a Ifema en la pandemia. La calidad asistencial del servicio madrileño de salud es excelente y, en concreto, La Paz se sitúa siempre dentro de los mejores hospitales y tiene renombre internacional. Entonces, ¿qué les diría? Que todo lo bueno que han construido lo están tirando por la borda.
Esa misma opinión la tiene Agustín Remesales, coordinador de la unidad de Reumatología Pediátrica en el mismo hospital. “Tenemos una unidad de referencia en España. El 50% de mis pacientes son de fuera de Madrid”.
“Es una locura esto. Pueden desmembrar totalmente todas las unidades super especializadas que hay en Madrid. Este no es el sistema, ¡y es que tienen la herramienta jurídica! Hoy [lunes] ha salido el consejero diciendo la manida frase de que no tienen la potestad para anular la OPE y eso no es cierto. En Canarias la han anulado, en Andalucía la han anulado, en Castilla la Mancha la han anulado…”.
“Para que te hagas una idea: en los últimos 12 años, en Pediatría, solo han convocado una oposición para consolidar. Fue en 2015, ¡y eran 23 plazas! Solo del hospital de La Paz salen cada año 20 pediatras. No es posible esto”, protesta el doctor.
“El concurso de méritos es la mejor solución para los pacientes que quieren tener a su médico híper especializado durante muchos años. No es el momento de desmantelar. No lo hacemos por dinero, ni porque queramos una plaza sin hacer un examen. Si llevamos haciendo exámenes toda la vida... Solo queremos consolidar el trabajo que llevamos haciendo tantos años. Nosotros la huelga no la queremos hacer. No tengo ningún interés en que mis pacientes se vuelvan a Córdoba sin que les haya atendido”.
“Contrato cada mes”
Guillermina Bejarano lleva desde 2015 atendiendo, de nuevo, en la Paz. Su especialidad son las Urgencias, pese a que en España esa especialidad, técnicamente, no existe. “Somos uno de los pocos países de Europa donde no existe. Yo soy médico de medicina interna. Nosotros nos formamos un poco solos, porque, al no haber una especialidad como tal, nos pagamos cursos más orientados hacia técnicas de urgencias”, relata.
Esta doctora lleva 15 de sus 45 años ejerciendo como interina. Lo ha hecho en Barcelona y en Madrid. Y en este tiempo lleva “por lo menos, 10 contratos”. “Pero vamos, tengo compañeros que están firmando contrato cada mes”.
“Una de las mejores cosas de España es precisamente la sanidad que tenemos. No solo por el aparataje o las infraestructuras, si no por los profesionales, que somos de los mejores de Europa. El consejero [Enrique Ruiz Escudero] es pediatra, no le estoy contando nada nuevo. Entonces, tienen que tratar bien al personal. La pandemia ha sido muy dura, hay compañeros que están con tratamiento psiquiátrico. Desmantelar ahora todos estos servicios con esta OPE creo que es un error garrafal. Y es un error que afecta a los pacientes”.
“Hay que sentarse con la ley europea y la ley española encima de la mesa Hay que dar facilidades a las personas que estaban ocupando estas plazas en fraude de ley. Hay que convocar de forma periódica estas plazas, como deberían haber hecho estos 20 años”.
Los entrevistados coinciden en que esta no es una huelga contra Isabel Díaz Ayuso o, al menos, no solo. Es que en su sector llueve sobre mojado. A las décadas de fraude de ley hay que unirles la pandemia y, como guinda, una convocatoria de oposiciones poco rigurosas.
“Tienen que escuchar las historias personales que hay detrás de todos estos años de no cumplir con lo que ellos mismos imponen con sus leyes autonómicas y estatales. Somos gente muy poco conflictiva, muy poco reivindicativa. Somos trabajadores dóciles y abnegados. Durante años hemos trabajado sabiendo que estábamos en una situación…”. Juan Manuel deja la frase colgando, pero la palabra que busca es precaria o fraudulenta.