El arte, ya sea por ser nuestra huella para el futuro, por ser lo que nos diferencia de otras especies o simplemente algo que nos pueda gustar o disgustar al ojo, es algo valorado por la gran mayoría de personas. Los dibujos de las cuevas de Altamira son un tesoro de nuestro pasado pero, ¿no sería hoy más grave hacer esos grabados en roca que en una pared creada por el hombre? ¿Serían igual de valorados artísticamente si no datasen de milenios atrás? ¿Las pintadas contemporáneas en la vía pública serán valoradas por las generaciones venideras?
El arte siempre ha suscitado preguntas sin respuesta, o mejor dicho, preguntas con opiniones preconcebidas. Donde sí hay respuestas, y concisas, es en las leyes respecto al arte urbano. EL ESPAÑOL ha tenido la oportunidad de entrevistar a Luisao, un madrileño de 25 años que ha encontrado su pasión en pintar murales.
P: ¿Qué hiciste con tu primer bote de spray?
R: Un graffiti no hice, haría alguna manualidad. Mi primer graffiti no lo hice hasta los 16, 17 años. Hasta entonces sólo había hecho bocetos en papel, firmas o alguna pieza. Lo que es el muro impone, suscita cierto respeto. El pasar un diseño a la pared, en unas dimensiones más grandes, le otorga una importancia que en el folio no tiene. Por lo tanto, tiene que quedar algo chulo.
P: ¿Cómo empiezas en el graffiti?
R: Fue en el instituto cuando me junté con gente que estaba más metida en ese rollo que yo cuando me empezó a gustar de verdad y me lancé a hacer mi primera pieza en un muro. Empecé en el tema ilegal en parte porque era lo único que conocía. El poner tu nombre, con letras grandes, en un sitio visible y cuantas más veces mejor. Con el tiempo le he dado importancia a otras cosas, ya sea desarrollar un estilo, sacarle partido al spray, texturas, luces, etc. He ido tirando a lo "legal" porque para hacer lo que quiero, que son piezas más elaboradas, no puedes hacerlo en una pared ilegal, un metro o una carretera por el tiempo del que dispones.
P: ¿De dónde viene esa faceta artística?
R: Siempre la he tenido. Luego ha habido gente que me ha apoyado, me ha motivado para seguir ese camino como mi tio Miguel, que es ilustrador. Luego en la universidad me fui juntando a esos círculos y todo apuntaba a esa dirección.
P: ¿Te ha ayudado personalmente?
R: Yo creo que sí. No deja de ser una vía de escape. Siempre ha sido una forma de canalizar la energía para evadirme y una forma de expresión, que yo creo que todo el mundo necesita expresarse.
P: ¿Consideras ilegal lo que haces?
R: Yo sé que no es del todo legal. Al final pinto en sitios como túneles que estan medio abandonados. No hago daño ni molesto a nadie. Yo voy, pinto, hago la foto y lo dejo todo recogido. Ilegal tampoco lo consideraría, está un poco entre medias.
P: ¿Has tenido problemas con la policía?
R: Normalmente, no. Alguna vez se han parado y te preguntan "¿qué haces?" pero a la que se lo explicas no suelen dar problemas. Donde suelo pintar no me dicen nada. Yo creo que al final, la policía y cualquier persona, lo que quieren ver es que te lo curres. He oído a gente que tiene sus negocios y que les han pintado el cierre decir "si por lo menos hicieran unas letras bonitas". Yo creo que lo que les molesta sobre todo es que lo que haces no sea bonito.
P: A ti te han pagado por hacer murales, ¿lo consideras vender tu arte?
R: Sí es vender tu arte pero no le veo nada de malo. De algo hay que comer y cuando me han pagado por ello más que agradecido de que lo hagan por hacer algo que me gusta. Hay que saber separar entre un graffiti y un legal de un cierre. Lo único que tienen en común es la técnica. A partir de ahí no tienen nada que ver.
P: ¿Te da pena que tu obra no dure?
R: Cuando vuelves al sitio suele estar tapado. Queda la foto y la experiencia de ese día. La gente va a hechar la tarde y pintar sus cosas, por muy chulo que esté lo que hayas hecho. Obviamente me jode cuando has invertido tiempo y ya no está, pero esos sitios están para eso. Mi objetivo sería hacerlo en un sitio que durase, eso es lo bonito. Volver después de un tiempo y decir "madre que guapo". Eso más adelante.
P: ¿Es una afición cara?
R: Es cara, sí. Se puede economizar. Si te buscas la vida encuentras en los contenedores cubos de plástica a medias de obras por ejemplo. Eso lo mezclas con otros tintes y sacas diferentes tonos.
P: ¿Te gustaría ver las ciudades llenas de murales?
R: Me fliparía. Puedes encontrar en ciertos sitios. Le da a la ciudad color y alegría, no ver solo grises y blancos.
P: ¿Se ha vuelto moda el graffiti?
R: Sí. Ya viene de hace tiempo. Te das una vuelta y está todo hasta arriba. Hay gente que se queja de que ahora está muy de moda y ha perdido esa esencia inicial, pero algo bueno tendrá si cada vez más gente lo hace. Como todo, tiene su lado bueno y su lado malo.
P: ¿Qué consejos darías a gente que intenta dedicarse a lo que les apasiona?
R: Ser perseverantes. No dejar nunca de intentarlo. Trabajar duro y tener paciencia, las cosas no salen a la primera. Ser consciente de tus límites porque a veces puedes ser duro contigo mismo y debes tener tus pausas y conocerte a ti mismo. También escuchar la opiniones de la gente cercana.
Las cuentas de instagram de los tres artistas.