Varias familias de la localidad barcelonesa de Vilassar de Mar ya están preparando una demanda contra el Ayuntamiento de ERC (Esquerra Republicana de Cataluña) por organizar una actividad que consistía en una "gincana sexual" de dos horas con diferentes pruebas para personas de entre 12 y 30 años.
La actividad, que fue organizada por el Servei de Joventut, contaba con varias pruebas relacionadas con la temática sexual como colocar un preservativo en un palo o en un plátano, untarlo con miel y nata y lamerlo, emular posturas sexuales o modelar penes y vulvas con plastilina.
Los padres consideran que las pruebas que se tenían que llevar a cabo durante la actividad no eran para nada aptas para menores de 12 años y es por ello que quieren denunciarlo. "Las chicas se tenían que poner en la pared con el culo en pompa y detrás se tenía que poner un chico, con un globo en medio que tenían que reventar con esta postura", comenta una madre sobre otra de las pruebas, según cuenta La Vanguardia.
Los padres también muestran su preocupación sobre la posibilidad de que se difundan imágenes de los menores realizando dichas pruebas. Las familias cuentan que hay niños, como una joven de 11 años, que no tenían la autorización sobre la difusión de imágenes, algo completamente necesario según la ley de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales.
El Ayuntamiento, en un comunicado, ha reconocido que "no se informó de manera detallada de las actividades de la gincana y esto ha generado malestar e incomodidades en algunas familias". Además, ha avisado de que tomará medidas en el futuro para que la información quede más detallada.
Por otro lado, el consistorio ha asegurado que celebró esta gincana porque había detectado que los adolescentes de 11, 12 y 13 años miran contenido pornográfico y se construyen una imagen de la sexualidad. Desde el Espai Jove han intentando "romper esa dinámica mostrándose abiertos a hablar de estos temas".