Ser el principal productor de neveras de playa en España y Portugal no es algo que se consiga de la noche a la mañana. Y eso es algo que le ha ocurrido a José Luis Fernández (63), que tras empezar su aventura empresarial allá por el año 1984, ha logrado alcanzar un éxito mayúsculo con las neveras Polarbox, que le han llevado desde su fábrica de Lepe a alcanzar el siguiente nivel, hasta el punto de tener una delegación en Miami.
Y es que la compañía no ha hecho más que crecer los últimos años, llegando incluso a confiar en poder terminar siendo una referencia en el sector en toda Europa en un tiempo no muy lejano. Ya llegó hace unos años a países de todo el mundo como Egipto, Dubái, Inglaterra, Italia, Francia, Suiza o Alemania. Y ahora, ha logrado llegar a nuevos destinos sobre todo en el este, como Japón. A pesar de ello, la estrella sigue siendo Estados Unidos, donde este producto tiene mucho tirón, ya que como deslizan desde Polisur, va mucho con la costumbre y mentalidad norteamericana.
La idea de las neveras surgió en la cabeza de José Luis tras darse cuenta que no existían modelos de neveras de playa atractivos. "Me di cuenta de que no había una nevera bonita de playa. Empecé a hacer prototipos, pensé en los modelos y se le fueron dando forma. Buscamos colores, elegimos tonos pasteles y después decidimos hacer los moldes y comprar una máquina para fabricarlas nosotros mismos", explica José Luis, en una entrevista con EL ESPAÑOL.
Neveras PolarBox
Y de dicha idea salió un negocio que a la postre terminaría siendo redondo para el empresario. Las neveras PolarBox se vendieron superando las expectativas los dos primeros años hasta el punto que sobrepasaron el medio millón de unidades vendidas en dicho tiempo. Pero esto no fue más que un pistoletazo de salida para lo que han sido las ventas este año y lo que se espera para los siguientes.
Como comenta en la mencionada entrevista el empresario onubense, este producto ha sido muy del gusto del público. "Las ventas de las Polarbox se han disparado. Han gustado mucho, son bonitas, eficientes, tienen todo el corazón de poliestireno, y económicas, no cuestan más de 24 ó 25 euros. Además, las vendemos en todos los supermercados: Carrefour, Alcampo, Eroski, el Corte Inglés... ". Quizá es por esto que durante este año 2022 las ventas han continuado la tendencia ascendente que se podía esperar.
Y es que, durante este año, tras las 500.000 neveras de los dos años anteriores, son 350.000 unidades PolarBox más las que se han vendido. Y este crecimiento, podría llegar a ser incluso mayor, ya que se puede llegar a la cifra de medio millón, igualando de esta forma lo vendido desde el lanzamiento hasta el año pasado.
Estas ventas le han permitido a Polisur alcanzar con las neveras una facturación de 7-8 millones de euros que también dobla a la del año anterior, pero que según afirman, esperan que en unos años pueda crecer hasta los 20 millones de euros. Estos números ayudan a una expansión que, con el paso del tiempo, se va viendo reflejada en el aumento de la plantilla (actualmente superior a los 250 empleados) y la apuesta por nuevos productos y lanzamientos.
Lanzamientos y expansión
Las expectativas, como dejan ver en Polisur, son muy altas, la ambición es muy grande, y es por ello que no quieren quedarse atrás y también preparan novedades. Concretamente, una nueva nevera para llevar al trabajo, bastante más pequeña que las de playa, con una capacidad de 6 litros y que incluye dos tuppers. Tendrán una forma similar a la de un bolso y también contarán con diseño vintage.
Por otra parte, en abril del año pasado la compañía abrió una delegación en Miami que ha terminado dando muy buenos resultados al ser Estados Unidos un país en el que los productos de Polisur tienen un especial éxito. Esta delegación ha contribuido en gran medida al buen hacer en el país norteamericano donde hace poco entró el pedido más grande encargado a la compañía, que era de 30 contenedores de un mismo comprador. "Normalmente los pedidos grandes suelen ser de 7-8 contenedores", deslizan desde Polisur demostrando así la magnitud de dicho pedido.
Presente y futuro
José Luis afirma que todavía le queda mucha batería y seguirá al pie del cañón en su empresa. "Yo estoy pendiente de que la cultura de la empresa se mantenga. Estoy en la cocina, cocinando productos, viendo si les gustan a los comensales, pendiente de que todos los platos salgan bien y de que todo el mundo haga sus tareas y esté bien en la empresa", comenta el onubense sobre su papel.
Sin embargo, una vez llegado el momento, José Luis afirma que estará preparado para pasarle el testigo a su familia, para que Polisur siga siendo controlada por sus allegados. "Mi familia cogerá el testigo, dos de las plantas ya las gestionan familiares. No obstante, todavía me queda muchísima batería. Me cuido mucho, no fumo, hago mis rutinas de gimnasia y mantengo una actitud joven", afirma el onubense, dejando claro que todavía queda José Luis para rato.