Daniela Giraldo pasaba muchas horas en el bar que ayudó a quemar. Ella y la dueña, Laura O., eran buenas amigas, hasta el punto de que una planeaba darle trabajo a la otra. Daniela pertenecía a una familia de hosteleros e iba a regentar su propio restaurante. “Estaba feliz”, recuerda su hermano Héctor con la voz entrecortada. “Le iba a dar trabajo a Laura”. Porque el bar de Laura no estaba funcionando y lo iba a liquidar. Y así fue.
La Policía Nacional detuvo este jueves a Laura por ser la presunta autora intelectual del incendio que destrozó su propio bar. Los agentes barajan como principal hipótesis que ocasionó el incidente para cobrar la indemnización de su seguro. Las manos ejecutoras fueron Daniela y su amigo Tito. Finalmente, este episodio ha terminado con una mujer muerta, otra detenida y un herido grave ingresado en el hospital de Getafe.
“Ella no era capaz de decir que no, cuando se trataba de ayudar a alguien”, prosigue su hermano. “Siempre dejaba dinero a los suyos. A Laura le dejó dinero muchas veces. Se han aprovechado de ella”. Daniela daba pie a ello, por ser una persona “muy impulsiva”.
Laura O. (en el centro), dueña del bar la Oficina 28.
“Era una persona, hablando mal, con huevos. Por eso recurrieron a ella. Andan diciendo que tenía antecedentes. Los tenía porque era la primera en dar la cara, porque si atacaban a los suyos se enfrentaba”.
Explosión de madrugada
El bar La Oficina 28 empezó a arder en torno a la una de la madrugada de este martes tras una fuerte explosión que se oyó en buena parte de Carabanchel. En seguida se movilizaron los bomberos del Ayuntamiento de Madrid, que comprobaron que continuaba la fuga de gas, que había provocado el incendio posterior. Los bomberos procedieron a controlar la fuga hasta la llegada de los técnicos de la empresa suministradora del gas que cortaron el suministro.
[Detenida Laura O., la dueña del bar que explotó en Carabanchel: lo quemó para cobrar el seguro]
Los servicios sanitarios atendieron a Daniela, que fue trasladada al citado hospital madrileño. Dos horas más tarde fue localizado Tito en su domicilio. El hombre había huído pese a haber resultado herido igualmente con quemaduras en gran parte de su cuerpo. Fue llevado en estado grave al hospital de Getafe. Ella tenía cerca del 95% de su cuerpo con quemaduras; él, el 60. Finalmente, no se teme por la vida de Tito que permanece ingresado en el citado hospital bajo custodia policial.
Los bomberos procedieron a sanear el local, que ha quedado completamente destrozado, mientras que agentes de la Policía Nacional inspeccionaban el lugar para investigar las circunstancias de la explosión, que afectó a varios vehículos.
El negocio era conocido en el barrio por su alto nivel de conflictividad. En torno a ese bar se movían drogas y personas conflictivas, según varios vecinos consultados. El local cambió de manos hace cerca de nueve meses. La noche del lunes, la de la explosión, el local estaba cerrado.
Las primeras sospechas apuntaban a una fuga de gas o a un ajuste de cuentas como ya había ocurrido en el pasado. Sin embargo, según se fueron conociendo detalles del caso, la teoría del seguro empezó a cobrar fuerza.
“La dueña iba a cerrar [el bar]. Estaba programado para cerrar ahora en octubre. ¡Incluso nos habían pedido trabajo a nosotros! Somos hosteleros y vamos a abrir ahora un nuevo local. Mi madre les decía que aguantasen. Y ella llegó a decir que estaba apunto de quemarlo para cobrar el seguro”, explicaba el miércoles Héctor a EL ESPAÑOL.
“Le dieron dinero a los tres chavales, entre ellos mi hermana, para que le prendieran fuego al local y así poder cobrar el seguro. ¿Qué pasó? Que no saben manejar combustible y no saben lo peligroso que puede llegar a ser. La peor parte se la llevó Daniela”. En el momento de sus declaraciones su hermana seguía viva, pero era casi “un milagro”. Así pues, a las pocas horas falleció.
Un coche estrellado
Finalmente, la Policía Nacional detuvo este jueves a Laura como autora intelectual de la explosión. Está acusada de los delitos de homicidio y contra la seguridad colectiva. Los agentes procedieron a su detención tras revisar las conversaciones que mantuvieron Laura, Daniela y otra serie de testigos.
Una vez revisaron los mensajes de sus móviles y cruzaron declaraciones, lograron tener la certeza de que era ella la autora intelectual del incendio de su propio bar. Los mensajes concretamente fueron los que les proporcionaron indicios racionales y suficientes para detenerla, según informan fuentes policiales de la Jefatura Superior de Madrid a este periódico.
Como resultado de la investigación, los agentes han corroborado la hipótesis de que la dueña del establecimiento pidió colaboración a la fallecida para provocar el incendio, con el objeto de cobrar una indemnización por parte de la compañía aseguradora. La teoría de Héctor va camino de confirmarse.
Coche estampado contra la fachada del bar el pasado mes de julio.
Asimismo, los agentes detuvieron a un varón que amenazó y agredió a la abogada de Laura. Concretamente, le había lanzado una piedra o un objeto contundente. El hombre había amenazado en múltiples ocasiones a la dueña. El detenido es un español de 26 años con más de 47 detenciones a sus espaldas.
Este periódico no ha podido corroborar si este varón es el responsable de estrellar un vehículo robado contra la fachada del bar, un episodio que ocurrió el pasado 25 de julio. Afortunadamente no causó heridos ni importantes daños materiales. Es solo un ejemplo de los múltiples altercados ocurridos en torno al bar que ahora es una montaña de ceniza.