Sevilla

Un hombre denunció este martes a través de un mensaje en Twitter que dos agentes de la Guardia Civil redujeron "brutalmente" a su hijo de 37 años y que este falleció días después por las heridas que le provocaron en la intervención. El hombre, llamado Ángel Bejarano Romero, da su DNI en el mensaje y adjunta el vídeo que él mismo registró en la puerta de su domicilio el día que sucedieron los hechos, el pasado 12 de septiembre. Según explica, su hijo, llamado Carlos, falleció el día 19, siete días después del suceso.

La denunciada intervención ocurrió en el municipio de Mairena del Aljarafe, cerca de Sevilla capital, hacia las ocho y veinte de la tarde. Los agentes acudieron para atender la llamada de auxilio de los propios padres del luego fallecido, que avisaron de que su hijo les había agredido y estaba muy alterado y violento a consecuencia probablemente del consumo de droga, según contaron en la denuncia por la muerte de su hijo que presentaron más tarde en el juzgado de guardia y de la que ha informado Diario de Sevilla

Los agentes llegaron diez minutos después y a ellos se enfrentó Carlos en la puerta de la casa familiar. "Trataron de reducirlo con defensas metálicas plegables, lo tiraron al suelo y le comprimieron el cuello y el tórax de tal manera que, como consecuencia de ello, nuestro hijo tuvo una parada cardiorrespiratoria muy grave, de la que ha fallecido, siendo nosotros testigos de todo lo ocurrido", sostienen los denunciantes.

El padre grabó la reducción policial con su móvil. En el vídeo de 26 segundos que ha publicado por repetido en Twitter se ve a dos guardias civiles que forcejean con el detenido sujetándolo bocabajo en el suelo junto a la acera. Intentan ponerle unas esposas, pero no lo consiguen porque Carlos se zafa con una mano. En el vídeo no se ve que lo golpeen. Un guardia le dice "tranquilo" mientras llegan dos refuerzos, una agente mujer que se une a sus dos compañeros para sujetar al hombre y un cuarto que están de pie junto a ellos. El mismo guardia de antes dice "venga, esposar al tío este". A la madre del detenido se la escucha fuera de cámara diciéndole a su marido que no grabe. 

En estas imágenes se basan para denunciar ahora que la muerte de su hijo se debió al uso de una "fuerza desproporcionada". Señalan que entró en coma desde ese momento y no despertó. Murió una semana después en la UCI del Hospital de San Juan de Dios de Bormujos, en la misma comarca del Aljarafe.

En un mensaje posterior, el padre, Ángel Bejarano, dice: "Aún no he podido conseguir el resultado de la autopsia de mi hijo Carlos. He llamado varias veces al Juzgado de instrucción n° 2 de Sevilla y la última llamada me dicen que no la tienen. Muy raro... ¿Qué ocultan?".