A José el anestesista le salen bastante caras las contradicciones en las que aparentemente incurre: una cosa es lo que cuenta sobre la lipoescultura que le costó la vida a Sara Gómez y otra lo que reflejan los documentos oficiales. El caso es que a este anestesista del Servicio Murciano de Salud, cada vez que es pillado en un fuera de juego: le cae un delito. Primero acabó investigado por homicidio por imprudencia, al igual que el cirujano cardiovascular que operó a Sara. Y ahora le investigan por falsedad, debido a que la mañana que asistió al cirujano supuestamente no podía estar en una clínica privada, sino cumpliendo su jornada laboral en un hospital público del SMS.
Este nuevo delito será instruido en una causa al margen de las diligencias por la muerte de Sara y deja señalado al Servicio Murciano de Salud por no abrir expediente disciplinario hasta que la familia de la difunta ha aportado la documentación a la Fiscalía. Y todo ello ha sido posible por la investigación desarrollada por Rubén: el hermano de Sara. Este guardia civil tiene en la diana al anestesista José G. V., desde diciembre, cuando comenzó a recabar informes sobre la lipoescultura que envió a su hermana a la UCI y detectó que aparecía el nombre de otro anestesista.
Ese mismo mes se produjo el primer fuera de juego de José que le valió ser investigado, por un delito de homicidio por imprudencia, junto al cirujano cardiovascular que intervino a Sara. El 10 de diciembre, la firma de José G. V. viene estampada en un informe de la Cínica Virgen de la Caridad donde expone lo siguiente: "La paciente, doña Sara Gómez Sánchez, fue intervenida el 2 de diciembre de 2021 de una lipoescultura, durante la intervención mantuvo tensiones arteriales aceptables, buena diuresis, y ausencia de complicaciones, siendo la duración de la operación 5 horas, se extubó sin incidencias pasando a reanimación".
[El informe que destapa la contradicción del anestesista de Sara Gómez en su testimonio]
Y el 14 de diciembre, cuatro días más tarde, le contó lo contrario a la Inspección de Sanidad: "A las 13.30 horas, aproximadamente, la paciente sufre episodios de hipotensión que se controlan con bolos de efedrina de 6 miligramos y aumento de la fluidoterapia. Comentándole al cirujano la hipotensión que tiene y le aviso del color hemático del tejido graso que se saca, así como que termine la intervención por las cifras tensionales". El segundo fuera de juego del anestesista y que le ha valido el delito de falsedad, data del 27 de junio, cuando declaró en los juzgados de Cartagena y salió a relucir su trabajo en la sanidad pública y privada.
Por aquellas fechas, Rubén ya contaba con documentación que apuntaba a que el anestesista no debía estar la mañana del 2 de diciembre en un quirófano privado, para asistir al cirujano cardiovascular Javier M. en la lipoescultura de su hermana. Así lo recoge la resolución de compatibilidad firmada por la Dirección General de Recursos Humanos del Servicio Murciano de Salud, donde se expone que el anestesista José G. V. desempeñará su trabajo, de 8 a 15 horas, en el Hospital Los Arcos de San Javier, y solo podrá trabajar de tardes, en la Clínica Virgen de la Caridad de Cartagena, no excediendo las quince horas semanales.
En enero, la familia de Sara ya denunció esa incompatibilidad del anestesista al Servicio Murciano de Salud, pero no hicieron nada a pesar de que le entregaron la documentación. La Consejería de Salud solo expedientó al anestesista cuando los familiares de la difunta ya habían acudido a la Fiscalía tras la declaración que José G. V. prestó en el juzgado el 27 de junio. Prueba de ello es que Salud, un 29 de julio, informó por carta a la familia de la apertura de una investigación a José G. V. por incumplir el régimen de incompatibilidades del SMS.
La mencionada documentación que entregaron a la Consejería de Salud es la que ahora figura en la denuncia a la que ha accedido EL ESPAÑOL y que ha motivado la apertura de otra investigación judicial contra el anestesista por un delito de falsedad: "En el informe clínico de alta de quirófano, recibido del Centro Médico Virgen de la Caridad de Cartagena, referente a dicha intervención, a Doña Sara Gómez, aparece como anestesista firmante, Don Antonio M. F., estando ausente el anestesista que realmente intervino en dicha operación, esto es, el Doctor José G. V.".
"A pesar de que se ha dicho por parte de él, en su declaración del 14 de diciembre de 2021, ante la inspección de la Consejería de Salud, que se debe a un error informático o de formato preestablecido, debido a que el tal Antonio M. realizó el preoperatorio, es bastante presumible que se haya actuado de esa forma para que el doctor José G. V. pudiera intervenir en la operación del día 2 de diciembre, que se llevó a cabo en horario de mañana, sin despertar alarma o sospecha de que pudiera incumplir la resolución sobre la incompatibilidad".
En esos dos párrafos, lo que la familia de Sara viene a exponer a la Fiscalía es que sospechan que los documentos clínicos venían firmados por otro anestesista de la Clínica Virgen de la Caridad de Cartagena, debido a que la resolución de compatibilidad de José G. V. le obligaba a trabajar de mañana, en un hospital público, sin poner un pie en un centro privado. Todo ello, sin olvidar su faceta sindical como delegado de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM).
"Aunque se deba, como él declaró, a un error informático en el formato ya preestablecido, lo que es indudable es que el Doctor José G. V. se encontraba en horario matutino, como el anestesista de la fatídica intervención a Sara, el día 2 de diciembre de 2021, siendo a la vez conocedor de dicha incompatibilidad, pues es el interesado de la misma", tal y como insiste la denuncia que ha motivado la apertura de nuevas diligencias.
En la denuncia, párrafo tras párrafo, la familia expone su perplejidad ante semejante error en el nombre y firma del anestesista que estuvo presente en el quirófano de Virgen de la Caridad, con el cirujano Javier M., en una intervención con un saldo trágico: la vida de Sara Gómez. Además, estas instalaciones privadas contaban con un sistema informático nuevo.
"Es bastante raro e inusual que un cirujano (Doctor Javier M.) que hace uso y trabaja por primera vez en ese centro médico, sea él quien elabore y manipule el informe de alta, como tal, y lo imprima, y más en presencia de un trabajador (José V. G.) que desde hace más de 10 años tiene la compatibilidad aceptada en Centro Médico Virgen de la Caridad. Es igualmente raro e inusual que figure el nombre y apellido del anestesista Antonio M. F. y que el sello y la rubrica de Virgen de la Caridad aparezca justo debajo del nombre, con su número de colegiado, sin que nadie se percate de tal error".
"Aún es más raro e inusual querer justificar que aparece el nombre del tal Antonio Marín en el informe de alta porque realizó él los preoperatorios y preanestésicos, cuando indudablemente ambos formatos son bastante diferentes, cómo se puede comprobar en las imágenes aportadas".
"Según la prensa, desde mayo de 2021, el Centro Médico Virgen de la Caridad de Cartagena cuenta con un nuevo sistema de información hospitalaria, con un software médico de última generación (OMI360), donde se gestionan todas las funcionalidades, siendo bastante improbable que como dice José G. V., se imprimiese por error un documento estándar con todos los datos verídicos de la operación, excepto el nombre del anestesista, que teniendo en cuenta lo anteriormente expuesto, es bastante presumible que se hiciese con total intencionalidad".
La familia presentó la denuncia contra el anestesista apoyando su relato con cuatro documentos oficiales, como la resolución de compatibilidad profesional de José G. V. o el informe clínico de alta en el quirófano de Sara Gómez que aparece firmado por un anestesista que no estuvo presente en esa lipoescultura: Antonio M. F. Tal documento expone que la intervención comenzó a las 8 horas, en la Clínica Virgen de la Caridad, justo cuando José debía estar en teoría en el Hospital Los Arcos para cumplir su jornada de trabajo con la sanidad pública.
La compatibilidad laboral del anestesista José G. V. salió a relucir en el interrogatorio al que fue sometido, el 27 de junio, en el Palacio de Justicia de Cartagena, junto al cirujano cardiovascular Javier M. que le practicó una lipoescultura a Sara sin tener la especialidad de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética. Tanto la magistrada María del Mar Gómez como la fiscal le interpelaron por ello:
- Magistrada: ¿El informe de alta lo rellena usted?
- No, el informe de alta siempre se rellena por parte de Cirugía.
- El informe en el que se indica que la operación había ido bien: ¿Recuerda si lo hizo usted?
- ¿A qué informe se refiere?
- A un informe en el que se indica que se le practicaron tres incisiones, que la paciente presentaba cierta inestabilidad hemodinámica, que se le aplicaron tres concentrados de hematíes y se comenta con el anestesista y la familia y se decide el traslado de la paciente al hospital. Viene con la firma del doctor Antonio M. ¿Le suena si por error lo firmó usted?
- No está firmado por el doctor Antonio M., está puesto el nombre del doctor Antonio M. Ese escrito yo no lo he hecho, ese escrito es el alta del cirujano para el traslado y salía por defecto Antonio M., como se ha explicado en alguna ocasión. Estaba puesto por defecto en el ordenador el nombre del doctor Antonio M. que es otro de los anestesistas que trabajan en la clínica.
- Entonces, ¿no lo hizo usted?
- No, no.
- Fiscal: ¿Qué relación laboral o contractual tiene usted con la Clínica Virgen de la Caridad?
- Yo soy anestesista del Centro Médico Virgen de la Caridad desde hace muchos años, compatibilizo mi actividad pública con la privada.
- ¿Trabaja usted como autónomo?
- Como autónomo.
Y lo cierto es que de forma autónoma, el anestesista se ha metido en otro lío judicial porque durante el interrogatorio, la acusación particular que ejerce la familia de Sara, a través del penalista Evaristo Llanos, se unió a las cuestiones planteadas por la magistrada y la fiscal sobre su situación de pluriempleo y le realizó dos preguntas clave:
- Evaristo Llanos: Usted ha hablado de su compatibilidad con la sanidad pública. ¿Usted es autónomo?
- Sí.
- En la resolución de la Consejería de Salud que obra en los autos, he visto que usted tiene la obligación de estar en la sanidad pública de 8 a 15 horas. ¿Pidió una autorización concreta para asistir a esta operación?
- Sí. Yo estaba ese día saliente de una guardia. Aunque no sé qué tiene que ver eso con el caso.
Ahora, José ya lo ha entendido: el Juzgado de Instrucción número 3 de Cartagena ha emitido un auto solicitando "la incoación de un procedimiento por delito de falsedad", con el objetivo de que se deduzca "testimonio" sobre los documentos que conforman la denuncia presentada por Damián Gómez: el padre de Sara.