Eva María, la amante del carnaval de Cádiz: su pareja la mató de un tiro ante un amigo que huyó
La vida de las víctimas (1): Su agresor también quiso matar al otro hombre, que huyó del domicilio, y que fue detenido horas después del suceso.
9 enero, 2023 02:45Eva María, de 46 años, era amante del Carnaval de Cádiz. Tanto, que solía participar activamente en las fiestas del febrero gaditano. Alegre y creativa, divorciada y madre de dos hijos de 18 y 13 años, en la madrugada del domingo, su actual pareja, Carlos, le descerrajó un tiro en el domicilio que era propiedad de él y que ambos compartían junto a la playa de El Puerto de Santa María (Cádiz). El disparo fue en presencia de un amigo de ella que, al ver la escena, huyó de la vivienda.
La Policía sostiene, según fuentes consultadas de toda solvencia, que el origen del crimen tiene relación con las drogas, algo que se supo tras las pesquisas y los interrogatorios, y lo ha calificado como un caso de violencia de género. Se da la circunstancia de que J.C.D.M, conocido como Carlos, ya había pisado la prisión, condenado por un caso de violencia de género a una pareja anterior.
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Pese a la enormidad del crimen que ya había cometido, Carlos no se amilanó. Quiso continuar con su noche sangrienta y se lanzó a buscar al amigo de Eva que había huido, para matarlo. La investigación, según fuentes policiales, no está cerrada, y no se descarta que existiesen además rencillas entre ambos por causas relacionadas con el narcotráfico.
Por eso, tras disparar a Eva, Carlos (40 años) se encaminó a la avenida del Río San Pedro, a un tiro de piedra de su domicilio. Se dirigió a una vivienda concreta y comenzó a pulsar sin parar al timbre. Lo hizo con una urgencia y con una insistencia impulsiva, agrandada por la misma sustancia que le dilataba las pupilas.
La tardanza en abrir la puerta se debía a dos motivos. El primero, que el domicilio era la casa de un matrimonio de ancianos, más lentos en movimientos que los jóvenes. El segundo es que los timbrazos que cortaban el silencio y la quietud los habían despertado de golpe, en la cama. El escándalo, y el susto, estaba teniendo lugar al filo de las 4 de la madrugada.
Para entonces, Eva María Aza (46) ya estaba muerta. En el piso de los ancianos, Carlos buscaba ahora a quien quería que fuera su segunda víctima: el aterrorizado hijo del aterrorizado matrimonio de personas mayores. ·El amigo de Eva que había emprendido la huida y que había sido testigo de todo lo ocurrido.
Sólo ellos dos, el agresor y su ansiada nueva víctima, sabían a esa hora que el cuerpo de Eva yacía probablemente sin vida en la quinta planta de un bloque de pisos frente a la playa, en una urbanización sin apenas vecinos por tratarse de segundas residencias de verano. Ninguno de los dos alertó ni a la policía ni a los servicios sanitarios para tratar de salvarla, aunque fuese en vano.
La identidad del tercer hombre en el domicilio cuando dispararon a Eva no ha trascendido, pero EL ESPAÑOL ha podido saber que es conocido por dos apodos, 'el Gato' y 'el Gatica' y que era amigo de toda la vida de la fallecida. Fue detenido horas después.
La cadena
Armado con una pistola, la misma con los que le había descerrajado un tiro a su novia, J.C. D.M esperó a que los ancianos abrieran la puerta. Asustados por los gritos, el matrimonio abrió con la protección de la cadena superior, escucharon cómo el hombre preguntaba por su hijo, y les ordenaba que le abrieran del todo. El matrimonio no lo hizo, y por eso Carlos metió la pistola por el hueco y apretó el gatillo, con un ánimo claro de herirlos o matarlos.
La Policía Nacional se personó en el lugar, ya alertados por los vecinos, y acabó reduciendo al hombre, que iba, efectivamente, bajo los efectos del alcohol y las drogas. Opuso una fuerte resistencia, "llegó a encañonar a un agente", cuentan a EL ESPAÑOL fuentes de la Policía Nacional. Incluso llegó a apretar el gatillo, pero ya no tenía balas. Tuvo que ser reducido utilizando las defensas reglamentarias.
Trasladado a las dependencias policiales, la Policía Nacional se quedó de piedra al escuchar la confesión espontánea de Carlos mientras se tapaba la cara con las manos. Indicó textualmente: "He matado a mi amor". Fue entonces cuando, al acudir a su casa, se descubrió la tragedia.
Eva María era natural de Chiclana de la Frontera (Cádiz), aunque tenía fuertes vínculos familiares y profesionales en la capital gaditana. Sus dos hijos ne no se encontraban con ella en el momento de los hechos.
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Trabajaba como sanitaria en el Hospital Santa María de El Puerto de Santa María (Cádiz), y se había mudado a vivir con Carlos a su piso de Valdelagrana, donde le arrebató la vida. Tenía alma de artista, y por eso era una figura muy conocida en el ambiente de las agrupaciones 'ilegales' con el romancero que procuraba sacar cada año. Eran escritos en verso y recitados por ella, dentro de una modalidad que se caracteriza por el humor. Con ellos, además de actuar en la calle, incluso se atrevía a concursar en el Gran Teatro Falla.
Hace poco más de un año había entablado una nueva relación sentimental con Carlos, quien también estaba separado y tenía hijos. No había denuncias previas, aunque algunos vecinos han declarado a La Voz de Cádiz que se escuchaban peleas y discusiones subidas de tono.
El hombre sí tenía antecedentes por violencia de género de su anterior pareja. Había sido condenado a prisión y había cumplido su pena. El caso había estado bajo seguimiento en el sistema Viogén, aunque calificado ya actualmente como inactivo. También tiene antecedentes por tráfico de drogas. No tenía licencia de armas, por lo que se investiga también cómo se hizo con la pistola con la que mató a Eva.
En Valdelagrana, los vecinos no salen de su asombro. Sobre las 7 de la mañana, en la Cafetería Juanito les llamó la atención ver un coche de la Policía Nacional, e inmediatamente llegar otros dos. "Al cabo de un ratito llegó un vehículo particular. imagino que sería la autoridad judicial", cuenta el encargado a EL ESPAÑOL. Dada la enormidad de la urbanización, nadie le pone cara ni a la víctima ni al agresor. "El único que puede saberlo es el portero, pero no trabaja los fines de semana", advierte un hostelero.
El suceso ha tenido lugar, además, en una jornada en la que también ha muerto otra mujer en Ciudad Real. Su marido, el presunto autor, ha sido detenido y, de momento, no se ha confirmado como un caso de violencia machista. También ha muerto una mujer de 44 años en Almería, estrangulada tras mantener relaciones sexuales con un hombre de 30. No mantenían relación sentimental previa.
Eva María Aza (46) es la primera víctima de violencia de género del año 2023. La serie 'La vida de las víctimas' contabilizó 50 mujeres asesinadas en 2017, 53 en 2018, 56 en 2019, 49 en 2020, 49 en 2021 y otras 49 en 2022.