“He hecho algo malo. He matado a Paloma”. David, a las tres de la mañana, llamó a su cuñado y le anunció lo que acababa de hacer: había asesinado a su actual pareja, Paloma (43 años), y a la hija de esta, India (ocho años). Bajo los efectos del alcohol, mantuvo una conversación de pocos minutos, anunció el fatal desenlace de su relación y después se intentó suicidar sin suerte.
Su cuñado, tras hablar con David, llamó al 112 para avisar de la conversación que había mantenido con David. Les contó lo que acababa de escuchar, así como que el asesino se encontraba en su casa. No sabía la dirección, eso sí. De ahí que la Policía Nacional fuera primero al domicilio de la víctima y después al del asesino.
Con la puerta atascada, los bomberos fueron los encargados de romper una de las ventanas, subir la persiana y entrar en la vivienda, según cuenta El Norte de Castilla. Dentro, encontraron primero el cuerpo de India, la pequeña de ocho años, en el salón. David le había asestado varias puñaladas por la espalda hasta matarla.
[A sangre fría: así mató David a Paloma y su hija tras una relación de meses]
En la cocina se encontraba Paloma “con heridas de arma blanca incompatibles con la vida”. En la misma estancia estaba el asesino, con heridas autolíticas de arma blanca en el pecho y en las muñecas. Fue trasladado al Hospital Clínico de Valladolid, donde fue intervenido en la mañana del lunes, aunque "no se teme por su vida".
Dentro de la vivienda también encontraron dos cuchillos con sangre, que serán los que determinen la autoría del crimen por parte de David Maroto Lentijo –aunque existan pocas dudas de que él ha sido el asesino–.
David, con ‘antecedentes’
David Maroto Lentijo tenía una denuncia por vejaciones en el 2017, pero su expareja decidió no ratificar la denuncia para no perjudicarle. Con ella había tenido un hijo. Desde entonces, el asesino de Paloma había intentado suicidarse en varias ocasiones. En 2020, por ejemplo, los agentes de la Policía Local de Valladolid tuvieron que acudir a su casa para atender un intento de suicidio autolítico sin consumar.
Después conoció a su actual pareja, con la que llevaba muy poco tiempo de relación. La familia de Paloma era muy conocida en Valladolid por distribuir material de peluquería y estética. De hecho, David trabajaba para la familia de Paloma ahora mismo, aunque antes se había dedicado a otros menesteres.
Antes, David, de 44 años y nacido en Tudela de Duero, sólo había terminado el Bachillerato y tenía la “capacitación de transportista”, había trabajado como carretillero tan solo dos meses, otros cuatro meses en una farmacia y en la construcción durante 15 años.
Con el doble crimen de Valladolid, el número de víctimas por violencia de género en 2023 asciende a seis, que se suman al total de 1.188 mujeres contabilizadas desde 2003. Así lo ha confirmado el ministerio de Igualdad este lunes.
Al caso de Paloma y su hija se ha sumado el de una mujer de Lleida de 38 años asesinada presuntamente por su pareja el pasado 18 de enero. La víctima tenía cinco hijos menores de edad, de 3 y 2 hijos. En este caso no había denuncias previas por parte del presunto agresor.
India, la hija de Paloma, es también la primera menor víctima de la violencia machista en Castilla y León desde que se tienen registros en 2013. Era hija única, iba al Colegio Pinoalbar de la capital y participaba en actividades extraescolares. Sus compañeros, consternados, acudieron a la concentración en repulsa a la violencia de género.