Los secretos de la tertulia donde Ramón Tamames reúne a intelectuales: "Ni el 40% comparte con Vox"
El ecologismo y la emergencia climática, abordados por Tamames en su libro 'El grito de la Tierra', es uno de los temas de debate recurrentes.
27 febrero, 2023 01:58El siglo acababa de echar a andar y Ramón Tamames (Madrid, 1933) buscaba un sitio para comer con un grupo de amigos. El barrio de Chamberí siempre ha rezumado la juventud de la que bebe el candidato de Vox en la moción de censura, rodeado a menudo de gente más joven. Que Tamames es un hombre de tertulia de hombres, el debate de ideas con reminiscencias decimonónicas en la mejor de sus connotaciones, es conocido. La comitiva de economistas, profesores universitarios y curiosos con Tamames como tótem paró a la altura del número 51 de la calle Galileo y alumbraron la Sociedad de Pensamiento Lúdico.
Un cuadro con muchos de sus integrantes preside desde junio de 2017 el comedor del restaurante El Imperio, la humilde taberna leonesa que acoge la tertulia. Puntualidad y tolerancia son las únicas máximas. Algunos de quienes acompañaron a Tamames el pasado miércoles hasta Bambú 12 son miembros de esta sociedad sin estatutos, el think tank personal del viejo profesor. Un coloquio gastronómico en el que reina la "perplejidad" desde que su líder recogiera el guante de Santiago Abascal y Fernando Sánchez Dragó, ideológicamente alejada de las posiciones a menudo radicales, duras, intransigentes de Vox.
Muchos de sus camaradas insisten, por ello, en que poco tiene que ver Tamames con el partido de Abascal. "No comparte ni el 40% del ideario de Vox", calcula uno de sus integrantes, muy cercano al autor de Estructura Económica de España, en conversación con EL ESPAÑOL. "No va a ir a cuchillo contra nadie porque Ramón es un hombre sabio, dialogante, que siempre apela al talante de la Transición. Tengo interés en ver cómo contestará Sánchez", cuenta. "Hará una radiografía de España que, por el lugar, puede ser inédita. No sé si le gustará a Vox".
[Quién es quién en la moción de Ramón Tamames y Vox]
"Se trata de rememorar el viejo espíritu de las tertulias del siglo XIX y XX", describe otro tertuliano. ¿Y de qué pie cojea? "Hay gente de todo tipo de cultura, religión, ideología y creencia. Hasta gente muy cercana a Podemos, como Vicente Dalda, que también lo acompañó el miércoles. En lo económico, en general, puede que tenga unas tendencias liberales. Pero somos gente que compartimos una preocupación intensa por las cuestiones climáticas, impulsores todos del ecologismo. S omos socialmente plurales, muy abiertos al internacionalismo", describe.
No se trata de una tertulia política, de tirarse los trastos a la cabeza y hacer de meros comentaristas de la actualidad, sino que interesa mucho más "lo técnico que lo político". Los grandes temas descontextualizados de la coyuntura. Hecho que explica que por El Imperio hayan pasado más científicos que políticos. La última, celebrada en este mismo mes de febrero, fue con el prestigioso médico Manuel de la Peña.
"Hay veces que se ponen temas preestablecidos. Hemos tenido sesiones con Ucrania, sobre los precios del petróleo, la crisis económica o muchas sesiones sobre la emergencia climática". Tamames, uno de los pioneros del ecologismo en España, publicó en 2010 el "culmen de sus estudios climáticos": El grito de la Tierra (Editorial RBA). El ecologismo parece el principal punto de divergencia de Tamames con Vox.
["Hay que buscar un De Gaulle": Dragó y Abascal se decidieron por Tamames en una marisquería"
Las sesiones están abiertas "a todo el mundo": políticos, funcionarios, empresarios... Y especialmente emotiva fue una celebrada a finales de 2021 o principios de 2022, cuando el entonces cronista de la villa de Madrid, Enrique de Aguinaga, nombrado decano del grupo en algún momento, enunció su propio obituario con una arenga ecologista. Un polvo somos y en polvo nos convertiremos laico. "Ya me queda poco tiempo para devolver mi nombre", dijo. Debido a la pandemia, la tertulia estuvo dos años paralizada. De Aguinaga murió en abril de 2022. También fue miembro de la tertulia Adrián Piera, primer presidente e impulsor de Ifema.
La gran amistad de Tamames con Francesc de Carreras, catedrático de Derecho Constitucional en la Universidad Autónoma de Barcelona, uno de los impulsores intelectuales de Ciudadanos, hizo que muchos miembros del partido naranja fueran invitados a una tertulia tasada, de 14:15 a 16:00 horas. También con muchos miembros de Sociedad Civil Catalana.
[Ramón, no lo hagas, carta de Pedro J. Ramírez]
Los encuentros políticos con figuras relevantes de la política, eso sí, los tiene Tamames individualmente. El que tuvo con Alberto Núñez Feijóo el pasado 15 de febrero, por ejemplo, en su casa, y aunque estuvo presente algún miembro de la Sociedad de Pensamiento Lúdico, fue con distintos académicos, incluido el presidente de la Real Academia de la Lengua, Santiago Muñoz Machado.
Una vez aceptado el excéntrico episodio que protagonizará Tamames en el Congreso, sus acólitos lo apoyan. Si hay algún punto que estiman positivo es la posibilidad de asestar un golpe al edadismo. "Se ha pasado de las gerontocracias soviéticas de la Guerra Fría a, como decía Alfonso Guerra [el hombre junto a Felipe González que quería Abascal como candidato primigenio], las mujeres y los jovencitos primeros", dice un miembro de la tertulia.
¿Y de qué hablará Tamames? Estiman todos que exhibirá una versión renovada del espíritu de concordia de la Transición, de cuya materialización, la Constitución de 1978, fue abajofirmante. "Es algo casi borrado de los libros de Historia. Los temas escabrosos, los que hacen pupa, siempre los trata con cuidado. Hemos hablado muchísimo de Cataluña, pero siempre con educación y respeto". No hace ni 10 años que Tamames publicó ¿A dónde vas Cataluña? Cómo salir del laberinto independentista (Península, 2014), donde aborda en profundidad la problemática catalana.
"Sentar en la mesa a los diferentes", sigue la fuente en términos unamunianos, "no para convencer, sino para comprender: esto no es ninguna maquinilla de propaganda". Todo el arco parlamentario, de izquierda a derecha, pero siempre constitucionalistas.
Porque, asegura un discípulo del candidato de Vox a la Presidencia del Gobierno, que si algo ha aprendido de él es a "tender puentes entre culturas". Algo que puede sonar a multicultural, palabra motivo de infarto en la dirección del partido de derecha radical. ¿Y qué hace encabezando la moción de censura? "Puede pasar que se pase de progre".