Se llamaba Nayra, era ceutí y falleció con 40 años, en octubre de 2022. Un cáncer de mama se la llevó por delante, pero su impronta ha sido tal que la formación de Podemos en la Ciudad Autónoma le acaba de otorgar a título póstumo el premio 'Vivencias', con carácter anual, en su quinta edición. La particularidad viene porque Nayra Solero Domínguez era dama legionaria y estaba destinada el Tercio Duque de Alba 2º de la Legión Española.
El premio 'Vivencias' que cada año conceden los morados ceutíes a mujeres coincidiendo con el 8 de marzo se otorga por vez primera in memoriam a la 'guerrera del chapiri rosa', como se la conocía. A Nayra el primer diagnóstico le llegó en 2015. Tenía 32 años. Tras una operación, y tras dos años de tratamiento superó la enfermedad y escribió un libro: 'Mujer valiente, mi princesa guerrera, con su chapiri teñido de rosa'.
Entonces ella misma reseñó que "conseguí expulsarlo (el cáncer) gracias a mi estado de ánimo, la ayuda de muchas personas y mis jefes, compañeros y amigos del Tercio Duque de Alba 2° de la Legión, intentando servir de ayuda contando mis buenos y malos momentos vividos, para poder ayudar a las personas que por desgracia tengan que pasar por lo mismo que yo".
"Y como no podía faltar, recitaré un espíritu legionario, el espíritu de unión y socorro: A la voz de "A mí La legión", sea donde sea, acudirán todos y, con razón o sin ella, defenderán al legionario que pida auxilio. Con esto quiero decir que es muy importante la ayuda que te presten, venga de donde venga, y nunca venirse abajo".
Durante la pandemia, recayó. Se pasó varios años limpia, hasta que el confinamiento dilató las pruebas que se debía hacerse cada tres meses. Sus últimos marcadores tumorales arrojaron un resultado de 74. Cuando se los pudo volver a hacer, "pasaban de tres mil y pico", explica su marido, Fernando Lázaro, quien también es legionario y ahora se encuentra en comisión de servicios en la Delegación del Gobierno. "Tenía ya metástasis. Se cogió tarde", suspira. Comenzó así una nueva fase de la enfermedad con sesiones de quimioterapia y cambios de tratamientos.
Ramón Rodríguez, líder de En Ceuta Podemos, cuenta a EL ESPAÑOL que "a todos nos sensibilizó su trayectoria en todos los años en los que luchó. Hasta en los momentos malos era capaz de sacar un punto divertido para sobreponerse y ayudar a los demás". Era muy activa en redes sociales, donde narraba sus sesiones, sus recaídas y cómo era el día a día con la enfermedad.
Además, puntualiza Rodríguez, "este año se cumplen los 35 años de la presencia de la mujer en el ejército. Y ella, en su vertiente militar, también logró un hito. Que haya mujeres en cuerpos de élite, y muy apreciada por sus mandos, pues también hay que ponerlo en valor".
-Quizá sea porque Ceuta es especial, pero no es común que Podemos distinga a una legionaria...
-Nosotros somos transversales. No entendemos de etiquetas políticas. No es un premio con una etiqueta, es un reconocimiento a la mujer con mayúsculas. En Ceuta tenemos perfiles diversos y plurales.
-Pues es como un puñetazo sobre la mesa...
-Es una apuesta arriesgada, sí. Yo apuesto por dejar de señalarnos por nuestras diferencias y que vayamos a lo que nos une.
Ramón fue quien propuso el nombre de Nayra. Explica que en 2019, cuando se hizo con las riendas del partido, quiso que Podemos estuviera "en contacto real con la comunidad". El acto de entrega a la familia de Nayra tendrá lugar el 7 de marzo.
Sus palabras y publicaciones "siempre estuvieron dirigidas especialmente a las mujeres, y este premio que se le otorga nace en el año 2019 con la intención de dar un paso más hacia la igualdad, haciendo un especial llamamiento a la concienciación de las personas y a la sororidad", explicó la formación cuando hizo público el premio.
No pasaron por alto que Nayra pertenecía al cuerpo militar de élite fundado por Millán Astray. "No queremos dejar sin señalar su faceta profesional que desempeñó en todo momento con gran diligencia y dignidad".
Su marido Fernando cuenta a este periódico que recibir la noticia "fue una pasada y no me lo esperaba". Cuando Nayra falleció "solicité que se le pusiera una calle o se le hiciera un homenaje con carácter anual". Sigue pendiente la respuesta del Gobierno de Ceuta, cuenta su marido, a quien le consta que la Consejera de Asuntos Sociales, Dunia Mohamed, le ha prometido que "lo iba a mover".
En la Legión no la han olvidado. Su entierro fue con honores y multitudinario. Y unas semanas después, al presentarse la VII edición de la Carrera Cívico-Militar ‘Cuna de La Legión’, el cuerpo de élite anunció que dedicaría la mitad de lo recaudado con las inscripciones a la lucha contra el cáncer en su memoria. La carrera, con 4.000 dorsales, está convocada para el próximo 11 de marzo.
"Yo no quiero que se olvide lo que hizo", apostilla Fernando. Lo que hizo Nayra, además de escribir un libro, fue raparse el pelo en directo en su segunda recaída antes de perderlo con la quimio, y contar con una sonrisa que, como era verano, estaría más fresquita, mientras su marido tenía un nudo en el estómago.
También contestó mensajes que le escribían enfermos de toda España, a los que animaba. "Yo le decía, deja el móvil. Y ella me respondía que no podía, que la gente se iba a pensar que estaba mal -y lo estaba- y que tenía que hacerlo para que la gente se sintiera mejor".
De todo esto se dio cuenta Fernando cuando Nayra ya se había marchado. "Yo no soy de Facebook, y cuando pude me puse un poquito a mirar sus redes sociales... cuando se ha ido he visto la cantidad de gente que le escribía y la enormidad de lo que hizo".
En sus mensajes reivindicó en incontables ocasiones la necesidad de que el INGESA, el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria del Ministerio de Sanidad -único competente en el caso de Ceuta y Melilla- instalase una máquina de radioterapia en el Hospital de Ceuta. Esa reivindicación la continúa Fernando, quien recuerda los días de tratamiento alejados de la niña de Nayra.
"Nos pasábamos 26 días en Málaga, quedándonos en una residencia militar, sin podernos mover de allí porque las sesiones eran de 15 minutos diarios. Y esa lucha la voy a peleando por ella". Por ello, destaca también la importancia de la atención temprana en casos de cáncer. "No puede ser que den una cita para hacerse pruebas a los dos meses. En esta enfermedad, una hora tarde es una hora que se ha perdido".
En todo esto coincide Ramón, el líder de Podemos en Ceuta. "No hay Unidad de Radioterapia, ni quimio, ni nada. Las personas no sabemos qué supone eso en Ceuta hasta que te toca: cogerte un barco, con el miedo, fuera de tu casa...".