Manuel Vallejo, el líder de Jaén Merece Más que ha obligado al PP a firmar sus propuestas ante notario
Vallejo será teniente de alcalde tras pactar con los 'populares' y rechazar al socialismo. "El PSOE nos daba la alcaldía para que no gobernaran ellos".
26 junio, 2023 03:00Manuel Carlos Vallejo ha asumido la tenencia de alcaldía por parte de Jaén Merece Más en el gobierno que el partido ha decidido formar con el PP tras llegar a un acuerdo de 101 medidas registrado, eso sí, ante notario. Como una hipoteca. Como un enlace conyugal. Es decir, con el compromiso legal de cumplirlo.
Todas las miradas andaluzas, y muchas del resto de España, estaban puestas en ellos. Jaén Merece Más, una formación relativamente reciente, porque podían darle la alcaldía de la capital jienense al PSOE o al PP.
Hay varias curiosidades alrededor de esta marca nacida en 2017. La primera data de su envite inicial, en los comicios andaluces de 2022. Recaudaron 4.000 euros de donaciones vecinales y tenían su sede en una tienda de golosinas. La segunda: se comprometieron a "apartar a un lado las diferencias ideológicas" y poner Jaén Por Delante.
Sin embargo, claro, cuando las urnas han salido revueltas, repartiendo concejales entre todas las formaciones sin una mayoría clara, han tenido que decantarse. Pero ellos aseguran que, a pesar de las críticas que ya están recibiendo desde los diferentes bandos, en su decisión no ha pesado un gramo la ideología, sino el mejor bien para su tierra.
Desde que este acuerdo se hiciera público durante esta semana, el teniente de alcalde, que no ha dejado su puesto de profesor en la Universidad de Jaén, está profundamente desbordado, "durmiendo tres horas" puesto que su partido "no tiene el aparato de un gran partido nacional". Además, está un poco mosqueado: "Hemos planteado una nueva forma de hacer política, y se nos pide más. No lo entiendo, estamos sometidos a un tercer grado constante, cuando lo único que se está tratando de conseguir es cosas para Jaén. Más bondadosos, o más, tontos, vamos a decirlo así, ya no podemos ser".
Pregunta.– Antes de entrar en eso, lo primero que quiero preguntarle es si es más de Jaén que un olivo, como dicen en su tierra.
Respuesta.– Soy más de Jaén que un olivo a nivel provincial, y lagarto de pura cepa a nivel de la ciudad, porque los jienenses de la ciudad somos lagartos según la leyenda.
Esa leyenda es patrimonio de la ciudad de Jaén, tanto o más que la propia Catedral, y se remite al siglo XVII, cuando según esta tradición oral todo aquel que osara acercarse a por agua a la fuente de la Magdalena corría el peligro de desaparecer, presa de un enorme lagarto que dormía en el interior de una cueva junto a dicha fuente. El peligro de Jaén hoy en día es otro: seguir durmiendo en el olvido y a la zaga del resto de provincias españolas: "Cuando miras indicadores socioeconómicos, Jaén está a la cola siempre en renta, en paro, en envejecimiento de población, en despoblación… Es una provincia, vamos a decirlo así, dejada de la mano de Dios. Ninguneada y olvidada", protesta Vallejo.
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El origen del partido
Con la intención de luchar contra ese olvido, nació en 2017 la plataforma ciudadana Jaén Merece Más, que aglutinaba en un primer momento al movimiento vecinal y asociativo y no admitía personas físicas. La gran decepción que sufrió la provincia a cuenta del denominado plan COLCE (Plan de Concentración de los Órganos Logísticos Centrales del Ejército) fue "la gota que colmó el vaso", en palabras del teniente de alcalde. El proyecto, para el que Jaén se había preparado concienzudamente eliminando en la disputa a otras candidaturas y postulándose como la gran favorita, iba a llevar empleo y prosperidad a la provincia.
Pero el globo se pinchó de golpe cuando fue concedido por sorpresa a Córdoba -que apenas entraba en la quiniela-, y en ese momento los integrantes de la plataforma decidieron constituirse en partido político. A ellos se sumó entonces Vallejo, aunque ya asistía con regularidad a algunas de sus reuniones, con voz pero sin voto.
"Yo nunca me había dedicado a la política, siempre he sido un enamorado de mi tierra, siempre he estado trabajando por Jaén desde donde tenía que hacerlo, formando estudiantes, pero llega un momento en que te das cuenta de que los formamos y se van, porque aquí no trabajan, no tienen salidas profesionales", se lamenta el profesor del departamento de Organización de Empresas, Márketing y Sociología de la Universidad de Jaén, un puesto que pretende seguir compaginando con la política activa.
P.– ¿Qué le dicen sus estudiantes, ahora que está en todos los medios?
R.– Los alumnos sí que empujan. Me dicen que hace falta cambiar Jaén, porque muchos no se quieren ir de su tierra, lejos de su familia, y les gustaría desarrollar su carrera y su vida personal aquí. Pero los trabajos son muy escasos y muchas veces no requieren la cualificación profesional que ellos tienen. Muchos me dicen ‘te hemos votado’, y no sólo a los que les doy ahora, sino también exalumnos, porque yo ya llevo en la universidad 27 años, así que por mis manos ha pasado medio Jaén.
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Los problemas de la provincia
Pero ¿por qué Jaén ha tenido siempre esta condición de patito feo? En opinión del ahora teniente de alcalde, el primer problema viene de la mano de la falta de infraestructuras: "Si la comparas con otras provincias deja mucho que desear en términos de autovías y carreteras. Y no te digo nada del aislamiento por ferrocarril. Las dos cobras del AVE, para qué contar". Con las cobras se refiere al trazado del AVE entre Granada y Madrid, que discurre por Córdoba y Málaga eludiendo pasar por la provincia jienense. "Si no tienes infraestructuras buenas, no vienen empresas. Y si no vienen empresas, no se genera empleo ni renta, y la gente se va y no hay consumo", añade el también docente.
La otra gran protesta es que Jaén, dice, forma parte "del desierto eléctrico de Andalucía Oriental" y carece de la suficiente potencia eléctrica: "Aquí viene una empresa grande, gorda, que quiera instalar una gran planta y no puede hacerlo porque no hay electricidad para que se pueda abastecer".
A todo lo anterior se suma una condición sociológica. Jaén siempre ha mostrado, en cierto modo, el comportamiento de un buen chico. Un buen zagal, que dirían allí. Aquel que no protesta y cuyos logros no destacan en clase porque no tira de fanfarria. Tampoco se le premia. Pasa en las clases y en las familias. Y en las provincias también. Al menos eso creen desde Jaén Merece Más, que culpan por igual a los dos partidos mayoritarios de haberse aprovechado de esa condición del jienense como "persona poco beligerante" y que "no quiere problemas": "El Partido Popular y el Partido Socialista son los que han gobernado España y la Comunidad Autónoma, y Jaén siempre está castigada por ambos. Yo creo, y esto son planteamientos míos, que a veces parece que hay que tener provincias subdesarrolladas para seguir recibiendo fondos de Europa. Es inexplicable lo que se le viene haciendo a Jaén en los últimos 50 años, es un abandono sistemático de todo".
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La alcaldía en sus manos
A pesar de su neutralidad manifiesta, a Jaén Merece Más le ha tocado decantarse tras las últimas elecciones. El PSOE fue la lista más votada y obtuvo 11 concejales. El PP, otros 11. Y ellos, tres nada desdeñables concejales. Aseguran que negociaron con unos y con otros, pero finalmente han formado gobierno con el PP. Preguntamos por qué. La respuesta es concisa: "Somos un partido sin ideología, la ideología que tenemos son las cuatro letras de nuestra tierra. Y en este caso se le ha dado al Partido Popular porque la mejor propuesta para Jaén y los jienenses ha venido de su mano".
P.– El PSOE les daba la alcaldía. ¿No era tentador?
R.– El PSOE nos daba la alcaldía todos los años con tal de que el PP no gobernase, y eso nos indignó: ¿qué antepones, un gobierno u otro ante los intereses de Jaén? Yo dije claramente que no iba a ser alcalde porque Jaén no me dijo que quería que lo fuera, no me dio 12 concejales, sino tres. Así que no voy a entrar en ese tipo de ofertas porque no es el designio que Jaén me ha dado en las urnas.
De momento, lo que han suscrito es un acuerdo titulado así, Acuerdo por Jaén, que reúne 101 medidas a llevar a cabo en diferentes ámbitos y con distinguidos plazos: a corto, medio y largo. Y suscrito ante notario:
P.– ¿Ha sido por la falta de confianza respecto a su socio?
R.– No por ellos concretamente, lo hubiéramos exigido en los dos casos. Es desconfianza hacia el bipartidismo tradicional que tantas veces ha engañado a Jaén, es una manera de intentar amarrar y decir ‘os habéis comprometido ante notario’.
Entre las medidas suscritas llama la atención la que determina "la puesta en marcha inmediata del tranvía", pues éste, en Jaén, es algo así como un animal mitológico. Cuenta otra leyenda que algunos lo han visto circular entre la espesura de la niebla que en ocasiones baja desde Jabalcuz (un monte al sur de la ciudad), pero lo cierto es que sólo sus vías, cosidas a la tierra como venas de hierro, atraviesan la capital desde que en 2011 dejara de llevar pasajeros. Su construcción había costado 120 millones de euros, pero una puja entre administraciones lo dejó varado durante todos estos años.
P.– ¿De verdad va a ponerse en marcha?
R.– Está negociado, te tengo que decir que sí y que confiamos en que sí.
P.– La medida del tranvía está comprendida en el apartado que han titulado Política Anti Tierra Quemada. ¿Qué quiere decir?
P.– Estamos cansados de que llegue un gobierno, se vaya, y el que viene no continúe con nada de lo que había empezado el anterior. Así que nuestra idea es que se comprometan a que lo que está en marcha, presupuestado y ejecutado, se acaba. Gobierne quien gobierne.
Nada de arrasar con la tierra sembrada antes, entonces. Aunque la medida más importante para Vallejo y su formación es esa una que se añade al ciento restante, y que supondrá la creación de un fondo de compensación interterritorial: "Será similar a uno que se creó para Teruel, y estará destinado a que se puedan acometer muchas más cosas, no sólo en la ciudad, sino en la provincia. Una dotación presupuestaria extra para poder acometer muchas más cosas además de todas las demás de la lista".
Por último, le preguntamos al nuevo político qué es lo más duro de entrar en las instituciones:
R.– Acostumbrarme a las presiones, a la dialéctica del enfrentamiento. A esos cruces de declaraciones de 'y tú más', porque no es ni mi estilo ni el de Jaén Merece Más. A nosotros nos gusta más la política propositiva, pero evidentemente la política de los grandes partidos no está en esa onda.
Por eso se ha propuesto no entrar a redes sociales durante al menos esta semana en la que se ha firmado el acuerdo.
P.– ¿Le apoya su familia, al menos?
R.– Mi familia me anima por un lado, pero tienen el miedo del desgaste personal que supone la política. Mi madre me dice eso de ‘tú qué necesidad tenías de esto…’.
Manuel Carlos dice esto último entre risas. No ha perdido (aún) el sentido del humor. Y se siente orgulloso de haber cumplido al menos dos sueños de su vida: ser docente y trabajar por su amada tierra. Pero dice que hay un último que se le va a quedar en el tintero:
R.– Me queda haber podido cantar ópera, pero eso no tiene arreglo porque tengo una oreja enfrente de otra, eso tiene mal arreglo.
P.– Lo dejamos para la siguiente vida.
R.– Eso sí, para la siguiente, si la tengo –cierra con simpatía.