Son 2 minutos y 29 segundos en los que el actor Ángel Garó (Ángel Manuel Paredes Hortelano, La Línea de la Concepción, Cádiz, 1965) ha puesto patas arriba las redes sociales en un video con un discurso antisistema, entendiendo antisistema como transgresor: que por ser homosexual no se tiene una ideología preestablecida. El titular ha sido "soy homosexual y soy de derechas". Ante EL ESPAÑOL continúa criticando el sistema comunista que, denuncia, se ha implantado en España.
Sin embargo, "el vídeo tiene tiempo", cuenta en conversación con este periódico. Lo hace desde el cortijo en el que vive desde hace 3 meses, a las afueras de la capital malagueña. "Fue en un cumpleaños en Almuñécar, con varios amigos míos, matrimonios, muchos guardias civiles... que me hicieron la pregunta y me grabaron. Ya en su momento, cuando salió, fue un escándalo... pero me paraban por Málaga para felicitarme".
Por eso está sorprendido por la enorme repercusión que han tenido ahora unas palabras que no son nuevas. Se reafirma, advirtiendo que "soy de derechas porque lo que hace la izquierda políticamente no me gusta. Si la izquierda lo hiciera mejor, pues a lo mejor diría que soy de izquierdas. Y yo jamás me he señalado públicamente a favor de un partido político, no he cometido ese error. Pero yo no puedo ser de izquierdas cuando veo que hay gente a la que le ocupan la casa y no se hace nada... y desde luego, no me siento representado por el actual colectivo LGTBI".
[El actor Ángel Garó: "Soy homosexual y de derechas. Dejen la mierda comunista"]
- ¿Qué es usted?
-Apolítico no se puede ser. Porque la política forma parte del ser humano. Se puede ser apartidista. Yo soy apartidista.
Denuncia abiertamente "el conductismo de la izquierda". También advierte que jamás ha ido a una fiesta del Orgullo, "pero porque yo he estado en un vestidor: nunca en un armario". Lo que se pregunta el actor es que por qué "hay que decir con quién se acuesta uno y ponerse un cartel en esas cabalgatas grotescas. Porque yo soy homosexual, pero homosexual en mayúsculas, y somos muchos como yo los que no nos sentimos representados".
El actor y cómico tira con bala. Él mismo plantea las preguntas, las respuestas y las repreguntas.
"¿Maricón? Sí. Y por mi condición no voy a echar tierra encima del colectivo. Yo lo que pido es justicia: que no haya insultos, vejaciones, que no haya agresiones salvajes como la que le costó la vida a Ismael... y eso se consigue con educación. Pero que no me vengan con cuentos ahora, que yo soy más moderno que nadie. Yo con mi personaje, Juan de la Cosa, fui el primero en reivindicar en España la causa homosexual en el 'Un, Dos, Tres'".
Porque cuando Ángel Garó saltó a la fama fue interpretando, de manera enfrentada, a dos personajes: Juan de la Cosa, el gay, y Pepe Itarburi, "el machirulo". Lo hizo cuando solo había dos canales y en horario de máxima audiencia.
-Lo recuerdo...
-¿Tú sabes qué significaba el 'uh, uh' cuando me acercaba al micrófono? Simulaba una felación. Yo le hacía una felación al micrófono. Jesús Quintero me preguntó una vez, en una de las muchas entrevistas que me hizo, que cuándo se iba a enterar la gente de lo que yo estaba reivindicando: yo estaba reivindicando el mundo libre.
¿Y la izquierda a la que critica? "La izquierda usa mucho lo de ir en contra de todo lo que no le venga bien. Y yo reivindico mi identidad, pero no de esa forma. Reivindicar la homosexualidad dando saltos en calzoncillos en una carroza trae consecuencias para todos. ¿No compartirlo es fascismo? A mí no me representa una carroza llena de tíos dando saltos en calzoncillos. Y a lo mejor, quizá, yo soy más maricón que ellos".
Garó entra sin miedo ni cortapisas en la batalla cultural. "Yo creo que Pedro Sánchez no es gay. Y ahora yo tengo que creerme que Putin, que es comunista, es hermano de Franco", ironiza, al igual que hizo en el vídeo que lo ha vuelto viral. "Me lo ha dicho mi madre, que está en internet. Yo apenas manejo las redes", explica a este periódico.
Lo que ocurre para tanto escándalo es que, a su juicio, "el control comunista se ha trasladado al mundo gay. Como a lo del maltrato a las mujeres. Claro que hay muchos cabrones que matan. Pero también hay muchas mujeres que matan a sus hijos. Lo que hay son personas malas. Yo no puedo aguantar que se diga que siempre los hombres son los culpables y que un hombre pase una noche en un calabozo sin que antes no se compruebe nada".
Vetado
Este discurso, que lleva años sosteniendo, es uno de los factores por los que considera que en España se le ha vetado en cierto modo.
[Garó se refiere a partir de aquí a la demanda que interpuso a Tele 5 cuando en marzo de 2022 salió a la luz que la dirección de uno de los magacines vespertinos habría impulsado un supuesto espionaje ilegal a más de 140 famosos, entre los que se encontraría él. Presuntamente, para obtener información y rellenar contenido de formatos de La Fábrica de la Tele. Durante más de diez años habrían manejado datos confidenciales que proporcionaba un agente de policía].
"Tele 5 ha tratado de hundirme. Ahora... van a tener que pagar... ya lo dijo Jorge Javier Vázquez: que Tele 5 era una cadena de maricones y comunistas. Y los comunistas son poco democráticos. Los he demandado a todos: a la cadena, a la productora... y tengo una abogada que es un rottwailler".
¿Pruebas de ese veto? "Mira cómo no hablan del Premio Máximo Orgullo Latino que me dieron en Las Vegas, donde tengo una estrella de la fama. No pude ir porque fue en plena pandemia", sostiene. Ni tampoco se hicieron eco "del premio internacional que obtuvo el cortometraje que protagonicé, 'La Valija'". En él, Garó interpreta "a una mujer maltratadora". Otra vuelta de tuerca.
Rodado en plena pandemia en la casa del propio Ángel Garó en Málaga, ha pasado por numerosos festivales internacionales y cosechado varios premios, entre ellos, dos en México, y el de mejor actor en el Festival de Cine de Moscú.
Garó lo resume muy gráficamente. Ser transgresor "tiene su ying y tiene su yang". Lo que no consiente es "que haya un lobby reivindicando cosas dolorosas. Por eso, ahora mismo tengo que ser de derechas. Está comprobado históricamente que la izquierda hace daño. Porque la izquierda, que no lo cuenta, ha masacrado mucho patrimonio cultural. Y te lo digo yo que soy coleccionista de arte. La izquierda lo quemaba todo, y no solo lo religioso. ¿Tu cómo vas a quemar la Piedad de Miguel Ángel porque salga una Virgen?".
El también cómico tiene asumido que "no soy bien aceptado en determinados lugares. Pero sí te digo que no puedo andar por Málaga de lo que me quiere la gente". No es ese el motivo por el que ha alquilado su casa palacio en el centro de la capital malagueña. Tampoco por necesidades económicas. "Es por la turistificación. Málaga está muy bien para visitarla pero no para vivir en el centro. Por eso he alquilado el edificio a un hotel boutique y me he venido a vivir a un cortijo, donde estoy estupendamente".