Francia quedó sacudida hace unos días por un terrible suceso: la desaparición del pequeño Émile. Se trata de un niño de tan solo 2 años del que no se ha conocido su rastro desde que se le vio por última vez en la aldea gala de Le Vernet, una pequeña comuna de 25 habitantes en la región de los Alpes conocida como Alta Provenza.
Desde aquel momento, todo el país se encuentra pendiente de esta historia que muchos han calificado como un nuevo 'caso Madeleine McCann' en referencia a la pequeña niña británica que desapareció en el 2007 en la zona del Algarve cuando solo tenía 3 años. Las últimas noticias que se tuvieron sobre Émile llegaron el pasado 8 de julio.
Hasta ahora, se han realizado pocos avances en referencia al paradero del pequeño, ya que el caso de su desaparición ha estado rodeado de un gran halo de misterio. El punto más importante y que ha centrado buena parte de las investigaciones han sido los cambios que ha habido en las versiones ofrecidas por la familia, ya que tal y como reflejan los informes policiales, se han producido varias contradicciones importantes.
¿Cómo se produjo la desaparición del pequeño Émile?
Desde el primer momento en el que se notificó la desaparición de Émile, el niño de 2 años de la región de Alta Provenza en los Alpes franceses, se han realizado muchas preguntas alrededor del caso. En primer lugar, en torno al momento de su desaparición, el cual se produjo en circunstancias un tanto extrañas.
El pequeño se encontraba disfrutando de sus vacaciones de verano. De hecho, era su primer día. Mientras estaba jugando en el jardín de la casa de sus abuelos, desapareció sin dejar rastro. La familia ha informado de que el pequeño llevaba un top amarillo y unos pantalones cortos blancos. Además calzaba unas botas de montaña.
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Hasta ahora, el fiscal no ha descartado ninguna de las hipótesis que se han puesto sobre la mesa. La familia, por su parte, ha revelado que cree que se ha tratado de un secuestro y que esperan realmente que así haya sido, ya que si el tiempo sigue avanzando sería la única forma de que el pequeño siga vivo.
Sin embargo, los últimos avances en el caso se han producido en relación al testimonio de un agricultor de la zona que ha explicado cómo se podría haber producido la supuesta desaparición del niño. Este hombre, en declaraciones que recoge el medio británico Mirror, ha asegurado que no sería extraño que el pequeño hubiera terminado bajo una de las grandes cosechadoras que trabajan en la zona, lo que lógicamente habría producido su muerte.
¿Puede una cosechadora estar detrás de la desaparición de Émile?
Es la pregunta que se hacen ahora las autoridades después del testimonio que ha revelado este agricultor de la zona los Alpes de la Alta Provenza. "No es tan raro. A veces encontramos ciervos". Así lo explica este trabajador del campo, quien asegura que es frecuente encontrar animales que no consiguen escapar de estas máquinas.
"El pequeño pudo haber terminado en la hierba alta y haber sido golpeado por la máquina agrícola. Eso sería terrible". Efectivamente, este agricultor ha abierto una nueva vía de investigación y es que se podría haber producido la muerte del pequeño al haber quedado tendido en el suelo en una zona de constantes cosechas.
En estos momentos, se han superado ya los 10 días de desaparición del pequeño Émile, a quien se vio por última vez con vida el día 8 de julio mientras se encontraba en casa de sus abuelos. Desde aquel momento se puso en marcha un gran operativo de búsqueda en el que han colaborado voluntarios, militares, civiles y gendarmes.
Hasta el momento, no se ha obtenido ni una sola pista fiable sobre su paradero. Por ahora, la primera tanda de batidas ya ha terminado, pero el fiscal del caso ha asegurado que las labores de búsqueda del niño continuarán. Los investigadores tienen orden de analizar todas las posibles pruebas que puedan ofrecer una mínima pista sobre el rastro de Émile.
El pequeño municipio de Le Vernet sigue movilizado y es que las autoridades francesas han cerrado el flujo de entrada y salida de personas del pueblo e incluso han llevado a cabo registros de todas las casas y vehículos y han interrogado a todos los vecinos. Toda ayuda parece poca para intentar encontrar al pequeño Émile mientras su familia sigue padeciendo el dolor de su desaparición.