Erika Reyes murió tras un golpe en la cabeza de su marido en Utrera: tenía 22 años y se iba a divorciar

La Guardia Civil detuvo ayer a su marido, con 43 años y de origen ecuatoriano, como presunto autor de su muerte por un fuerte golpe en la cabeza. Estaban casados, pero en trámites de separación y "este no lo terminó de aceptar", según aseguran a EL ESPAÑOL fuentes cercanas a la víctima.

Erika abandonó su país alentada por su hermana mayor, Ana Maryuri Reyes Álvarez, quien llegó a España unos años antes. Ella fue acogida en una casa de las que dispone la asociación nicaragüense Sevilla-España para refugiados que tuvieron que salir huyendo del país con motivo de la situación social y política en 2018.

La hermana de la víctima, acompañada por agentes de la guardia civil. EP

Cuando Ana Maryuri encontró trabajo y más estabilidad, animó a su hermana para que también abandonara Nicaragua, sin saber que iba a correr tan mala suerte.

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Llevaban poco tiempo casados, no tenían hijos y el matrimonio convivía con esta hermana y una pareja más en la casa ubicada en la avenida Cristo de los Aflijidos. Es la misma vivienda donde Ana Maryuri descubrió su cadáver sobre las 6,00 horas.

No obstante, su marido no lo hacía de manera constante, ya que trabajaba en Italia y vivía a caballo entre ambos países.

Unas horas después de que su hermana diera la voz de alarma a la Guardia Civil, los agentes lo detuvieron en la misma localidad, donde permanecía "escondido" desde que se produjeron los hechos.

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Por el momento, barajan todas las hipótesis, aunque tras su detención cobra más fuerza de que se trate de un caso de violencia de género. Todo ello tras registrar la casa de la víctima en busca de pruebas.

No obstante, Erika Vanessa no había solicitado ayuda a los servicios sociales del Ayuntamiento de Utrera en relación con presuntos malos tratos. Tampoco constan denuncias suyas en el sistema VioGén.

Concentración en Sevilla

Por su parte, la comunidad nicaragüense en Sevilla ha hecho un llamamiento a los migrantes de este país y de toda América Latina, así como a los vecinos para que acudan este martes a una concentración a las 21,00 horas frente al Ayuntamiento de Utrera. Este ha decretado un día de luto oficial por los hechos.

En conversación con este periódico, José Daniel Rodríguez Madrigal, portavoz de la asociación nicaragüense Sevilla-España, ha asegurado que es "una pena ocurran estas cosas".

"Ella estaba llena de vitalidad porque detrás de la inmigración hay muchos sueños", señala Rodríguez, quien conoce más a su hermana por la necesidad que tuvo de una casa de acogida cuando llegó a España.

Un agente de la Guardia Civil sale del domicilio de Utrera donde vivía la víctima. Europa Press

No obstante, asegura que desconocía que hubiera violencia entre la pareja o que hubiera conflictos familiares entre ellos. "Nos ha cogido por sorpresa", asegura el portavoz de la citada asociación.

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Desde la comunidad se va a llevar a cabo también una colecta para que su cuerpo sea repatriado a su país una vez que finalice la autopsia en el Instituto de Medicina Legal y Forense de Sevilla, que se le está realizando este martes.

"Nos gustaría poder hacerlo este mismo fin de semana", asegura José Daniel. Normalmente, con el permiso de las familias, suelen ser incinerados y llevados a su país natal a través de algún compatriota que vaya de visita. No obstante, esta vez, el objetivo es repatriar su cuerpo por las circunstancias que rodean al caso.

A la espera de que la Guardia Civil confirme que se trata de un caso de violencia de género, en los últimos diez días habrían fallecido dos mujeres en Andalucía por esta causa.

El pasado 21 de julio perdió la vida Carmen, con 54 años, y vecina de la localidad malagueña de Humilladero. Era madre de tres hijos y trabajaba de forma eventual en el campo. En septiembre de 2020, denunció a su pareja por violencia de género, pero no le impusieron medidas judiciales. Tres años después, este terminó asesinándola.

A nivel nacional, las cifras van en aumento. En lo que va de año, superan la treintena las mujeres asesinadas por violencia machista tras confirmarse el caso de Barcelona. Se trataba de una joven de 29 años asesinada presuntamente por su pareja este mismo domingo, unas horas antes que la propia Erika en la otra punta de España.

Erika Vanessa Reyes Álvarez sería la trigésimo segunda víctima de violencia machista en España en lo que va de año. En 2023, también han sido asesinadas Vanessa Serén, de 44 años, Natalia Mosquera, de 46 años; Beatriz Lijó, de 46 años; y Lourdes del Hoyo, de 50 años. La serie 'La vida de las víctimas' contabilizó 53 mujeres asesinadas en 2017, 47 en 2018, 55 en 2019, 43 en 2020 y 41 víctimas en 2021 y 49 víctimas en 2022.