No es de extrañar que la mayoría de nosotros nos peguemos todo el año planeando y organizando las vacaciones del verano. Aunque casi siempre tendemos a hacer malabares para poder disfrutar del máximo tiempo posible con la familia y amigos, la realidad es que muchas veces entran factores que se nos escapan de las manos, como es la disponibilidad y el trabajo.
Y es que, dependiendo de la profesión y condiciones, algunos trabajadores cuentan con solo una semana, 15 días o incluso el sector del turismo que tienen que esperar hasta septiembre o a la temporada baja para tomarse unos días libres. Sin embargo, a pesar de esta desventaja, es cierto que estos últimos gozan del privilegio de sumar más de un mes de vacaciones o de poder juntar días a lo largo del año para tener más tiempo de desconexión.
Las profesiones con más vacaciones tienden a ser aquellas que siguen horarios regulados por temporadas, como la educación y algunas áreas del sector del turismo. Los profesores, por ejemplo, suelen tener períodos de vacaciones más largos, como el verano, Semana Santa, Navidades, más algún puente que hacen los centros educativos a lo largo del año. Sin embargo, como toda profesión, tiene sus partes buenas y sus partes malas. De hecho, esta profesión no goza de un horario establecido de 8 horas ya que además de su jornada laboral durante el horario escolar, estos también deben prepararse las clases y corregir diferentes actividades y exámenes fuera del horario laboral.
Otros trabajadores cuentan con convenios con más días de vacaciones por ser empleos en los que se invierten muchas horas seguidas sin descanso. Este es el caso de las profesiones en la industria del turismo, como guías, hostelería o trabajadores de cruceros. Además, como hemos dicho anteriormente, no todo es positivo, ya que estos profesionales apenas pueden disfrutar de vacaciones durante los meses de verano.
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Asimismo, las profesiones relacionadas con el mundo de la televisión también pueden ser muy buenas aliadas para conciliar trabajo y vacaciones. Este tipo de contratos suelen ser de los más envidiados ya que en la mayoría de convenios suelen dejar un margen amplio de días libres entre la finalización de un programa y el comienzo del siguiente.
De la misma manera, los pilotos de avión son un caso excepcional ya que además de los 30 días naturales de vacaciones, además gozan de, al menos, 14 días libres al año (hasta 14 al mes, en función de la antigüedad), y de los denominados días de recuperación si realizan vuelos transoceánicos.
Los deportistas también suelen gozar de bastantes vacaciones, ya que estos se rigen por las temporadas de torneos. Por ejemplo, la temporada de esquí suele ser de noviembre a abril, similar a la de ciclismo, mientras que la de fútbol es principalmente de agosto a mayo. De esta manera, los deportistas profesionales disponen del resto del año, en primer lugar, para prepararse, pero también para el descanso y la recuperación.