Manolo disfrazó el asesinato de su mujer como si fuera un accidente de tráfico y se suicidó
Los hechos sucedieron en Motril el pasado mayo, ahora se ha descubierto que lo que parecía un accidente se trataba en realidad de un asesinato.
24 agosto, 2023 16:58A principios del pasado mayo, la localidad granadina de Motril sufrió un duro golpe. Dos de sus vecinos habían fallecido con apenas 12 horas de diferencia. Eran pareja. Sus nombres: Encarni y Manolo, muy conocidos en la localidad. Dejaban a dos hijas huérfanas. Ella murió en un accidente de tráfico; él, que era guardia civil, se suicidó pocas horas después, se decía que por la culpa.
Manolo, de 41 años, conducía el vehículo cuando un obstáculo se interpuso en su camino y tuvo que dar un volantazo. El coche se salió de la vía y cayó por un desnivel de unos tres metros. Encarni, de 39 años, que iba de copiloto, sufrió un golpe letal y falleció sin que su marido ni los equipos de emergencias pudieran hacer nada por salvarla.
El conductor, que logró salir ileso del golpe, se desplazó hasta Motril, donde la pareja residía junto a sus dos hijas, de 12 y 15 años. Una vez allí, comentó a sus familiares su intención de acudir a su casa a recoger ropa para las niñas. Pocas horas después, a primera hora de la mañana, cuando todavía se ultimaban los detalles del entierro de Encarni, Manolo tomó una drástica decisión.
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Movido por la culpa y la desesperación de la pérdida de la que había sido su compañera durante 20 largos años, decidió quitarse la vida. Subió a la zona del tejado de su casa en Playa Granada con su pistola reglamentaria en la mano. Se pegó un tiro en la cabeza y cayó al vacío del patio. Murió por amor, como Romeo y Julieta. Todo falso.
Todo era mentira
Tres meses después del trágico desenlace se ha destapado la verdad. Motril ha pasado de la desolación al asombro, de la pena a la rabia, de la certeza a las dudas. El Debate ha podido confirmar que no fue un accidente. No había tal obstáculo en la carretera, Encarni no murió por el golpe, Manolo no se suicidó por amor.
El hombre fingió el accidente. Estaba todo planeado, como si de una novela se tratase. Añadió a la historia drama, pasión y muertes, se convirtió en un ilusionista. Cuando aquel fatídico día los servicios de emergencias llegaron al lugar del siniestro, encontraron a la mujer en el asiento del copiloto.
Iba sin cinturón. Uno de los médicos notó que el cuerpo estaba demasiado frío para un accidente tan reciente, creía que ya estaba muerta. Se lo dijo a los guardias civiles de tráfico y estos se lo transmitieron al juzgado.
La investigación
Efectivamente, Manuel había estrangulado a Encarni poco antes del accidente. Como las informaciones no cuadraban se abrió una investigación oficial. Al frente de ella se encontraba el grupo de homicidios. Ya se investigaba como crimen. Los agentes localizaron a un testigo, que contó cómo vio salir a Manolo del vehículo y empezar a golpearlo con una barra para simular que el impacto había sido más grave.
El forense lo confirmó, Encarni no murió en el accidente. Se trataba, por tanto, de un nuevo caso de Violencia de Género, ya son más de 35 en lo que va de año. Sin embargo, los hechos han sorprendido a la familia de Encarni, que asegura que se llevaban bien, se querían mucho y no habían detectado problemas destacables en la pareja.
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Del otro lado se encuentra la familia de Manolo, que ha reconocido que no se llevaban bien y que él estaba decidido a dejarla porque no la aguantaba. Finalmente lo hizo, acabó con la vida de su esposa y después con la suya. Fue el crimen perfecto, hasta que ahora se ha descubierto la verdad. Manolo mató a Encarni y después acabó cobardemente con su vida. Dejó huérfanas a sus hijas, destrozó dos familias y Motril quedó consternado.