Un geólogo holandés, Frank Hoogerbeets, ha cosechado decenas de miles de seguidores en la última semana a raíz de una inquietante predicción publicada en su cuenta de Twitter: el pasado 30 de agosto, una semana antes del azote del devastador terremoto de 6,8 grados que afectó a Marruecos, el investigador alertó de la posibilidad de que un fuerte seísmo afectase a la región causando severos daños materiales y humanos. Y lo hizo mediante un polémico método llamado geometría planetaria que algunos geólogos tachan de 'pseudociencia'.
"Hemos publicado un gráfico de fluctuaciones que señala [como potencial zona afectada por seísmos] la región oeste de Portugal, aunque España e Italia también deben estar en alerta máxima", escribió Hoogerbeets el 6 de septiembre, compartiendo un gráfico elaborado el 30 de agosto en el que aparecía, en sombreado morado, el sur de la Península Ibérica y el norte de Marruecos como zonas de actividad sísmica grave.
"Según la geometría planetaria de los últimos dos días, la actividad sísmica podría alcanzar fácilmente una magnitud de 7-8, pero no todas las regiones geológicamente activas producen este tipo de temblores", señaló Hoogerberts, quien añadió que los días 4 a 7 de septiembre serían los más críticos. Acertó por unas horas de diferencia: la noche del 8 de septiembre, un terremoto de 6,8 grados en la escala de Richter sacudió la provincia marroquí de Haouz, causando más de 2.900 muertos y 5.000 heridos.
Aunque este tipo de predicciones "siempre son aproximaciones, porque nuestro equipamiento no es el adecuado para ser preciso", tal y como señala el holandés, el gráfico publicado por su centro de investigación, SSGEOS, no deja lugar a dudas. "Lo señalamos hace 9 días, el 30 de agosto. Había una fluctuación atmosférica evidente. Destaqué la región en el último pronóstico y también en un tuit. Los planetas y nuestra atmósfera son un indicador importante".
El holandés ya acertó con sus predicciones sobre los terremotos de Turquía y de Siria. Tras el seísmo de Marruecos, Hoogerbeets añadió: "Quizás no pase mucho tiempo hasta que comience la actividad sísmica en el Mediterráneo, en España o Portugal".
La polémica 'geometría planetaria'
El dudoso sistema de análisis de Hogeerbeets estudia la geometría y alineación de los cuerpos celestes del Sistema Solar –es decir, los planetas y nuestro satélite, la Luna– y su relación con la actividad sísmica de la Tierra.
Como ejemplo, el instituto de investigación de Hoogerbeets, el SSGEOS, asegura que "prueba de ello se encontró el 23 de junio de 2014, cuando ocurrieron tres terremotos magnitud 6 en el Pacífico Sur, seguidos de tres más en el Pacífico Norte [...] Fue un aumento sísmico en un mes tranquilo [...] inexplicable en sismología. Utilizando un software de simulación del Sistema Solar, parece que en esa fecha seis cuerpos celestes estaban involucrados en conjunciones planetarias".
Su campo de estudio, asegura el SSGEOS, revela que algunos terremotos tienen conjunciones planetarias asociadas y que, "en todos los casos, estuvieron involucrados Mercurio, Venus, Marte y uno o más planetas exteriores". Investigaciones posteriores, aduce Hoogerberts, aseguran que la posición de la Luna es igualmente importante y, a menudo, decisiva, una teoría que se demostró acertada con el terremoto de Chichi de 1999, en Taiwán, donde la influencia de las mareas disparó una falla.
"Después de nueve meses de investigación, desde junio de 2014 hasta abril de 2015, se publicó el primer pronóstico público en Facebook con una advertencia de que del 22 al 27 de abril podría ser crítico. El 25 de abril se produjo un terremoto de magnitud 7,8 en Nepal. El siguiente pronóstico se centró en los días 28 y 29 de mayo de 2015 y en un posible evento sísmico de hasta magnitud 9. El 29 de mayo se produjo un terremoto de magnitud 6,8 en Alaska, seguido un día después por un terremoto de magnitud 7,8 en las islas Bonin, Japón, con una magnitud inicial estimaciones de magnitud 8,5".
"Este tío tuvo suerte. Dio unas fechas y hubo un terremoto del copón, pero ha pillado a 1.000 y pico kilómetros de donde él decía. Ha sido una casualidad. Una carambola. Nadie en sismología puede atreverse a usar una bola de cristal", aseguran varios geólogos consultados por EL ESPAÑOL. "Es imposible predecir un terremoto. Aunque la línea de investigación que siga este señor sea plausible, porque todo debe investigarse, no es admisible que alguien diga que puede predecir un terremoto. No se puede".
Los geólogos explican que aunque aún queda mucho trabajo e investigación sobre el terreno y por satélite, lo más probable es que la principal responsable del terremoto de Marruecos no haya sido la alineación planetaria del científico holandés, sino los movimientos tectónicos, concretamente a una falla en el Atlas norte.