Los cinco consejos para que tu profesor no detecte que has hecho un trabajo para clase con ChatGPT

Las inteligencia artificial está provocando una tremenda revolución en cómo utilizamos la tecnología. Desde la forma en la que trabajamos a cómo consumimos contenidos, fruto de la IA. Todos los sectores están experimentando su integración y transformación, entre ellos, no podía faltar la educación.

Los estudiantes ya no copian, ahora utilizan ChatGPT. Tanto profesores como estudiantes están revaluando el propósito de la educación ante la llegada de estas enormes implicaciones. El debate sobre el uso moral de estas tecnologías dependerá del que les proporcione cada uno.

Está claro que en el futuro del sistema educativo la inteligencia artificial van a formar parte del mismo. Las oportunidades que proporcionan son evidentes, la educación variada, instantánea e independiente está garantizada; aunque el mínimo esfuerzo, la falta de originalidad y los materiales educativos inexactos, también. De todos modos, si eres un estudiante que utiliza la IA para tu formación y tus profesores se muestran recelosos, aquí te dejamos unos consejos para que tus trabajos parezcan tuyos. Por muchos medios que haya para que no salte el antiplagio de ChatGPT, más sabe la audacia humana por vieja que por sabia.

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1) Tildes en modo random: si normalmente no ponéis bien las tildes, es extraño que, de repente, hayáis recibido una iluminación del cielo. Pedid a ChatGPT que meta faltas. Ej: Se me da mal poner tildes en las palabras llanas. Sed creativos...

2) Perífrasis y subordinadas modo admin: si no os expresáis en vuestro día a día como Góngora, Cervantes o Quevedo, no debéis encabalgar frases con excesiva genialidad. Pedid a ChatGPT que haga afirmaciones cortitas, de no más de 7-8 palabras entre punto y punto.

3) Las Comas, el musical: esta es buena. Resulta que os saltáis a piola la coma del vocativo desde siempre... Pero ahora las ponéis todas bien. ¡No hagáis eso! Decid a ChatGPT que sois de tirar las comas con una pala normalmente.

4) Códigos nivel yoda: esto pasa mucho en clases de programación. Resulta que has llegado en SQL a ver lo básico. Te piden en un ejercicio que hagas la consulta X y tú se lo encargas a ChatGPT. Ella (la máquina) no entiende de barcos... Si puede hacerlo mejor metiendo INNER JOINs y cosas así, lo hará. Ídem si hacéis cosas en Java, C#, Javascript... Decid a ChatGPT el nivel que tenéis en un lenguaje antes de que os dé una solución.

5) Mates buggeadas: a ChatGPT no se le dan especialmente bien las matemáticas. Si no quieres empeorar tus notas, repasa bien los resultados que te ofrece la máquina.
Las derivadas, integrales y demás, no son su fuerte. No arrastres a ChatGPT a tu suspenso.

La máquina hace el trabajo, pero el trabajo tiene que ser vuestro. Es importante que se revise cualquier elemento que se ha generado por inteligencias artificiales. No podemos brillar académicamente de la noche a la mañana, y menos, tomar por ingenuos a los profesores. Quizás, el mejor consejo es que se lo enseñes a tus padres, ellos te conocen mejor que nadie y sabrán decirte si lo has sacado de tu cabeza o de un ordenador. Más vale pecar de prevenidos, y no volver con una expulsión o un suspenso a tu casa.