Qué es el porno ético y feminista que busca la igualdad entre los hombres y las mujeres

Como todo, el porno también se ha reinventado. Lo que era una industria dirigida al género masculino, se renueva con el objetivo de convertirse en un negocio capitaneado por mujeres, donde la historia, el guion y el formato se encuentra mucho más cuidado. Es lo que se conoce como porno ético o feminista. Pero, ¿en qué se diferencia este del porno convencional?

La pionera en este movimiento de pornografía feminista es Erika Lust, cineasta, guionista y productora sueca. Desde 2004, lleva reivindicando el papel de la mujer en la sociedad, incluyendo también a esta como protagonista en películas pornográficas. La cineasta expresa que "el porno producido de manera ética se basa en principios de consentimiento, diversidad y representación equitativa". Lust señala que es importante incluir el porno ético y feminista en los mecanismos de verificación, puesto que, de esta manera, "se promueve una industria del porno más responsable". "Pagando por el porno que consumes, haces que haya dinero para que todas las personas involucradas en la producción puedan trabajar de manera favorable y, por lo tanto, ética", concluye. 

En su página web existen proyectos en el cual se abren "debates y conversaciones sobre la pornografía, la sexualidad y las relaciones". Con este proyecto, Lust busca brindar recursos, información y herramientas para que padres y educadores puedan navegar por estas 'charlas' de manera responsable e informada. El proyecto reconoce la prevalencia y accesibilidad de la pornografía en la era digital actual y tiene como objetivo abordar la necesidad de una educación sexual integral y un diálogo sobre el impacto potencial de la pornografía en las personas y las relaciones.

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Paulita Pappel, autora de 'Porno Positivo' y directora de cine, lo definió hace unos años en Vice de la siguiente manera: "La pornografía feminista intenta descentralizar el orgasmo masculino yendo más allá de la penetración y la eyaculación del hombre para crear una representación diversa de cuerpos, sexualidades y modelos de relación".

Tristán Taormino, educadora sexual y directora y actriz de cine pornográfico estadounidense, expuso en su libro 'Porno feminista' que el concepto hace referencia al trato con respeto y en igualdad de condiciones hacia los actores y actrices de la industria. Además, en él señala que este trabajo debe ser valorado y remunerado de forma justa, y que la seguridad, el consentimiento y el bienestar de los actores son puntos clave a la hora de establecer la grabación.