El mundo de la noche es un universo en el que no es fácil moverse. Requiere de muchas horas de malas artes y de muchas vivencias turbias sobrepasando los límites de la ilegalidad. Sin embargo, si la noche gira en torno a la provincia de Gerona, lo cierto es que nada se mueve sin que José Moreno Gómez lo sepa.
O al menos, así era hasta ahora, cuando se ha producido su muerte, de la cual no se conocen aún muchos detalles. Tal y como adelantó el Diari de Girona, José Moreno Gómez, dueño del prostíbulo más grande de España, el mítico Paradise, ha fallecido a la edad de 72 años.
Sin embargo, su muerte ha llegado en una situación bastante complicada, entregando un capítulo final bastante convulso a su historial delictivo. José Moreno, el 'rey' del Paradise, se encontraba acusado de fraude y pendiente de juicio en la Audiencia Nacional como parte de la conocida Operación Pompeya por la cual se enfrentaba a 52 años de cárcel, además de al pago de multas millonarias por continuadas irregularidades.
Así era la vida de José Moreno, el dueño del Paradise
José Moreno Gómez es historia. El dueño del Paradise, el club más grande de España, ha muerto y su vida pasa a ser leyenda oscura de la noche de Girona y de nuestro país en general. Un historial delictivo casi inabarcable que tuvo su culmen en la Operación Pompeya.
El juez de la Audiencia Nacional, José Luis Calama, abrió en su momento juicio oral a más de 30 personas en las que se encontraba el propio José. En su caso, estaba acusado de varios delitos fiscales derivados de la creación de un entramado societario puesto en marcha presuntamente para ocultar a Hacienda los beneficios obtenidos a través de la explotación de múltiples prostíbulos repartidos por todo el país.
Estos delitos se tradujeron en el pago de unas fianzas cuya suma supera los 2.000 millones de euros. Además, se enfrentaba a peticiones de hasta 52 años de cárcel por parte de la Abogacía del Estado y a otros 10 por parte de la Fiscalía.
Esta investigación fue concluida por el juez instructor en febrero de 2022 y atribuyó a los implicados un total de 119 delitos fiscales supuestamente cometidos a través de seis tramas diferentes. Cinco de ellas explotaban los clubes de alterne y otra se dedicaba a la ocultación de ingresos.
Los cálculos realizados estimaban el fraude en 111 millones de euros en concepto de cuotas tributarias no ingresadas referentes a pagos de IVA, Impuesto de Sociedades e IRPF. Entre las personas citadas también se encontraba Simón Moruny, hombre de confianza de José Moreno. Entre ambos, dejaron de pagar más de 21 millones de euros eludidos al fisco.
Además, del Paradise, conocido en todo el país por ser el club de alterne más potente de toda España, en la investigación también se incluían el nombre del Riviera, en Casteldefells. Este también llegó a ser uno de los prostíbulos más grandes de España, aunque actualmente se encuentra derribado.
Sin embargo, las fronteras del imperio nocturno de José Moreno iban mucho más allá del Paradise, uno de los clubes más potentes de Europa. Llegó a poseer otros dos, El Eclipse, en Mont-ras, y El Edén, en Pla de L'Estany. El magnate de la noche fue juzgado por haber formado parte de una red de proxenetas que llevaban chicas desde Brasil. Tras llegar a Cataluña, las obligaban a prostituirse en estos dos burdeles. Sin embargo, escapó sin condena.
Pero la gran joya de la corona, el Paradise, se convirtió en la gran fuente de su riqueza desde su localización en La Jonquera. Abierto desde el año 2010, contaba con 2.700 metros cuadrados y con hasta 80 habitaciones. Durante toda la década, su fortuna y sus peligrosas relaciones fueron objeto de deseo de muchos rivales, pero también de investigación y persecución por parte de las autoridades.
A finales del año 2012, apareció junto a su gran local un coche cargado de TNT y de varias bombonas de butano. Y días antes, varios individuos le lanzaron desde una motocicleta explosivos. Sin embargo, José Moreno consiguió escapar indemne de ambas emboscadas. Ahora, a sus 72 años, su controvertida vida ha llegado a su fin mientras se encontraba en Granada.