Félix tiene un curso de tres meses con un 100% de empleo: es gratis para parados y ganas 1.800 €

Antonio Sanz e Iván Rodríguez estaban en paro. Vivían en una preocupante situación de desempleo hasta que todo cambió. Los dos decidieron estudiar el curso para ser operador de grúa torre, una profesión con un 100% de empleabilidad debido a la alta demanda que hay de este perfil en el mercado laboral español. Estudiaron los casi tres meses que dura el curso y, después, superaron el pertinente examen para obtener el carnet profesional para manejar grúas torre. Rápidamente encontraron trabajo.

Un trabajo que, por otra parte, “está remunerado, de media, con unos 1.600 - 1.800 euros netos mensuales en la actualidad”, explica a EL ESPAÑOL Félix Caballero (Madrid, 1968), director gerente y administrador del Centro de Empresas para la Innovación y la Formación (CEIF). Éste es un centro educativo en el que se enseña formación técnica en oficios y certificaciones. En él estudiaron Antonio e Iván y ahora tienen trabajo.

Es más, como los dos estaban en situación de desempleo pudieron acceder al curso, que está valorado en unos 2.500 euros, de manera gratuita. “Nosotros, como CEIF, nos presentamos a las convocatorias del SEPE de la Comunidad de Madrid que adjudican a las empresas de formación cursos para desempleados. Y, como somos pocas empresas las que ofrecen cursos como el de operador de grúa torre, nos suelen adjudicar dos o tres al año”, explica Caballero, cuyo centro está ayudando a decenas de personas a acceder al mercado laboral.

En el CEIF, en Fuenlabrada, donde los aspirantes a operador de grúa torre hacen sus clases prácticas. Cedida

Concretamente, el SEPE subvenciona y paga al CEIF grupos de hasta 15 alumnos por curso, lo que se traduce en que unas 45 personas al año pueden acceder de manera gratuita a esta formación que garantiza trabajo. Sin embargo, no sólo la Comunidad de Madrid paga cursos a desempleados, sino también hay convocatorias estatales que subvencionan. “También nos presentamos a las del sector de la construcción, cuyos cursos están destinados prioritariamente a trabajadores de este sector, pero un 30% de los alumnos pueden ser desempleados”, puntualiza Caballero.

La otra vía para acceder a este curso en el CEIF es la privada. En este caso, el curso le sale al alumno a 1.250 euros más 400 euros en tasas. Eso sí, en todos los casos, tras superar el curso de mínimo 200 horas y aprobar el examen para obtener el carnet de operador de grúa torre, se accede fácil al empleo. “Hay empresas que están esperando a que estos profesionales tengan el permiso para contratarlos inmediatamente”, dice Caballero, cuyo curso de operador de grúa torre provoca que aprueben el examen habilitante en torno al 85 % de sus alumnos.

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El operador de grúa torre

En los últimos tiempos, cada vez más personas se interesan por la profesión de operador de grúa torre. O lo que es lo mismo, los gruistas especializados en el manejo de las altas grúas que hay en las obras. “Es el trabajador que maneja este aparato de elevación tan complejo, para el cual se necesita aprobar un carnet profesional”, explica Félix Caballero. Luego, el trabajo de ocho horas diarias está casi asegurado.

Como puntualiza el director del CEIF, sin embargo, “no sólo hay que cursar mínimo 200 horas –entre dos meses y medio y tres–, sino que hay que aprobar el examen para obtener el carnet”. Es decir, hacer el curso no basta para poder conseguir trabajo. Hay que aprobar.

Un grupo de alumnos del CEIF, aprendiendo la parte teórica del curso de operador de grúa torre. Cedida

El curso, de hecho, cuenta con un 30% de teoría donde se explica “cómo operar la grúa torre, los reglamentos a tener en cuenta, la prevención de riesgos laborales, cómo se monta y desmonta… entre otros contenidos”, desarrolla Caballero. El 70% de las horas a cursar sería práctico y en el campus que tiene el CEIF en Fuenlabrada (Madrid) se enseña a manejar el aparato.

“Hay varias pruebas. Por ejemplo, hay una que es contrarreloj con una duración de 15 minutos. En ella, el alumno debe introducir un gancho de elevación en un tubo vertical que tiene un diámetro concreto. Lo tiene que hacer de manera limpia y sin tocar los bordes”, ejemplifica el formador.

Una de las pruebas prácticas que deben superar los alumnos. Cedida

Una vez se completen las horas de formación, que están entre cuatro y cinco diarias –además de sábado, si se quiere–, el alumno deberá aprobar el examen habilitante.

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Las dos vías

Félix Caballero explica a este medio que hasta junio del año pasado la única institución competente para realizar el examen a los aspirantes era la Dirección General de Industria. “Primero hacían un test teórico y luego unas pruebas prácticas que el futuro operador de grúa torre debía superar para obtener el carnet”, desarrolla. El hándicap que tenía para presentarse era que la persona debía tener mínimo la ESO o la EGB.

Alumnos durante las prácticas para ser operado de grúa torre. Cedida

“Lo que pasa es que en la obra no todo el mundo tiene ese nivel educativo, lo cual le dificultaba hacer el curso a muchas personas”, dice. Pero desde junio del año pasado cambió la legislación vía real decreto y ahora también se permite a entidades acreditadoras realizar las pruebas para dar el carnet de operador de grúa torre. La diferencia principal es que el estudiante puede presentarse al examen sin la necesidad de tener los citados títulos educativos.

Esto, evidentemente, “ha hecho que muchas más personas puedan dedicarse a esta profesión”, explica Félix Caballero, director del CEIF. Cada vez hay mayor demanda de gruistas y muchos están aprovechando este tipo de cursos. El siguiente que se imparte en el CEIF, por ejemplo, es privado y comenzará en abril. Para los gratuitos y públicos ya habría que esperar hasta 2025.