Los alumnos de todas las Comunidades Autónomas españolas, a excepción de Baleares, ya han terminado la convocatoria ordinaria de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU). Unas pruebas que, junto a la media de Bachillerato, les abrirán las puertas de la universidad. En este sentido, son muchos los alumnos que se decantan por la rama de Ciencias, pero que por no alcanzar la nota de corte establecida, se ven obligados a abandonar su vocación. Por ello, desde EL ESPAÑOL traemos una de las carreras con más salidas laborales de esta rama y con la nota de corte más baja; es decir, tan solo piden un 5.
Una vez conocidas las notas, los estudiantes que quieran cursar un grado universitario deben tener muy en cuenta la nota de corte de la carrera en la que deseen inscribirse. Esta es la calificación, sobre 14 puntos, del estudiante que ha ocupado la última plaza en un determinado grado. Es decir, que el alumno que entre en una carrera con la nota más baja fija la nota de corte de la misma. Por lo tanto, hay que tener en cuenta que es una marca que cambia cada año, y que no es un número prefijado.
Las Ciencias suele ser una rama muy demandada, tanto por los alumnos como por las empresas. Es por ello, que en la mayoría de grados exigen una nota bastante alta, por lo que resulta muy complicado para muchos acceder a esta formación. Sin embargo, hay una carrera que tiene casi un 100 % de empleabilidad y apenas piden un 5 para entrar. En concreto estamos hablando de Ingeniería Química.
Se trata de una disciplina que se encuentra en constante innovación y cuyo desarrollo contribuye a mejorar la calidad de vida de la sociedad. El medioambiente, la sanidad o la alimentación dependen en buena forma de los profesionales químicos. Por ello, es una carrera que cuenta con unas enormes oportunidades de empleo.
A pesar de ofrecer pleno empleo al finalizar los estudios, esta disciplina se enfrenta a una baja demanda. Parece ser que el problema está en que algunos jóvenes asocian erróneamente esta profesión. Esta percepción se debe a una falta de orientación adecuada que no explica las diversas oportunidades que ofrece esta carrera.
Concretamente las funciones de estos profesionales se basan en revisar, investigar, estudiar, analizar y probar los productos químicos existentes y su composición para determinar nuevos usos y avances. Aquellos que cursan este grado pueden trabajar en diversos ámbitos, como en el sector farmacéutico, textil, químico, sanitario, así como en la docencia, investigación o en control y prevención.
Además, mediante este grado también se puede acceder a otros puestos como el de enólogo, perfumista, geoquímico, inspector, especialista en control de dopaje e incluso personal técnico en depuración y tratamiento de aguas.
Asimismo, el sueldo de estos profesionales ronda los 20.000-50.000 euros anuales. No obstante, a medida que se va adquiriendo experiencia y habilidades, se podrá aspirar a salarios más altos. De hecho, según recoge el buscador de empleo Jobted, el salario máximo puede superar los 70.000 euros brutos al año.
En este sentido, en muchas comunidades se puede acceder con un 5 (Universidad de Zaragoza, Universidad de Granada, Universidad de Almería, Universidad de Sevilla, Universidad de Asturias, entre otras).