Hace unas semanas, Pablo Motos se metió en una bañera llena de hielo a cuatro grados de temperatura en 'El Hormiguero' junto al músico internacional Steve Aoki, que suele realizar esa práctica.
No obstante, lo que realmente sorprendió a los espectadores del programa de Antena 3 fue ver al valenciano con el torso al descubierto, mostrando una musculatura poco habitual para una persona cercana a los 60 años (Motos tiene 58).
El resultado de su cuerpo musculoso es gracias a un entrenamiento personalizado que realiza en el gimnasio y que combina con los entrenamientos de boxeo que hace con Jorge Blanco o José Luis Serrano Valero, además de sesiones ocasionales con Ilia Topuria u Omar Montes.
Su entrenador es Ramón Gabaldón, CEO de ABE LIFE (abelife.es), un centro donde acude para estar en forma no solo Motos, sino que también pasan por las manos del jerezano gente tan conocida como Pilar Rubio, Santiago Segura o Maribel Yébenes, entre otros alumnos del gimnasio.
Tras acabar su entrenamiento con Segura y momentos antes de comenzar con Yébenes, EL ESPAÑOL ha podido charlar con Gabaldón para que nos cuente su trayectoria profesional y conocer el motivo por el que gente tan conocida confía en él para estar en forma todo el año gracias a unas minuciosas entrevistas y planes personalizados, ya que el entrenador reconoce que en su centro “no hay nadie que tenga la misma rutina de entrenamiento”.
Llegado desde Jerez
“No me gusta ser el protagonista”, reconoce Ramón Gabaldón nada más comenzar la conversación, pero su trayectoria personal y profesional es fundamental para entender por qué Pablo Motos ha confiado en él para esculpir su cuerpo.
“He realizado un recorrido de mucha lucha, de mucho sacrificio, de mucho estudio y de currármelo mucho”, admite el entrenador que, de pequeño, era un amante de la Ciencia y estudió Ingeniería Industrial, pero la vida le guió hacia el mundo del deporte.
EL jerezano recuerda que con 12 o 13 años estaba “muy gordito”, algo que le causó muchos complejos, por ello comenzó a adelgazar, quedándose demasiado delgado con 16 o 17 años, por lo que se apuntó a un gimnasio: “A raíz de ahí empezó mi andadura en el mundo del deporte. Soy un friki para todo y cuando me meto en algo, quiero ser el mayor conocedor de ese campo a todos los niveles. Pero para mi desarrollo”, recuerda.
Pregunta: ¿Cómo comenzó en el mundo del entrenamiento personal?
Respuesta: Fue que en una oposición para Policía. Yo había dejado toda mi vida por las oposiciones, hasta los estudios de ingeniería, para enfocarme en eso. Pero me echaron para atrás por un leve daltonismo. Confundí tres números y me dijeron que no podía entrar en la última prueba por no superar el reconocimiento médico. A raíz de ahí pensé que no podía estar un año sin hacer nada y tuve que orientarme hacia mi pasión, el deporte, haciendo todos los cursos con certificado de profesionalidad posibles para convertirme en profesional. En Jerez me hice muy conocido como entrenador profesional y me contrataron aquí en Madrid en una empresa, luego pasé a un centro de entrenamiento en el que fui ascendiendo hasta ser director.
P: ¿Ahí fue donde conoció a Pablo Motos?
R: Exactamente. Me dijeron que necesitaban que llevara a Pablo Motos para recuperar su lesión en el hombro. Cuando salí de ese centro seguí entrenando con el presentador por mi cuenta y, por el boca a boca, luego me llamó Pilar (Rubio) o Santiago (Segura), entre otros. Abrí un centro cerca del plató de El Hormiguero, pero se desbordó de clientes, y me trasladé al que estoy ahora por la calle Avenida Doctor Federico Rubio y Gali.
Seis horas de 'entreno'
Todo el mundo destaca que Pablo Motos es una persona muy meticulosa y que da el cien por cien en todo lo que hace, ya sea presentando el programa más visto de la televisión en España, boxeando o entrenando en el gimnasio.
La lista de lesiones del valenciano por su amor al deporte es muy extensa. En mayo de 2023, el presentador apareció en pantalla con el brazo en cabestrillo: "Practicando boxeo me rompí el 90% del tríceps, fue una avería muy seria porque solo quedó un hilito sujetando el brazo y me tuvieron que operar de urgencia", explicó.
En diciembre de 2018, Motos presentó El Hormiguero casi cojo, ya que se había roto la fascia plantar, lo que le obligó a ir con muletas durante tres semanas. También ha pasado la covid en dos ocasiones, por lo que no pudo acudir al plató del programa y fue Nuria Roca la que le sustituyó al frente del espacio de Antena 3.
Después de tantas lesiones, su socio en 7yacción, Jorge Salvador, le gastó una broma durante el programa, donde resumió todas las lesiones que había tenido Motos. "Te tengo que felicitar porque eres un superhombre. En una semana has pasado de estar vendado a estar sin nada. Con lo que te hicieron, yo estaría un mes en la cama", comentó Salvador.
"Algunos pensaban que no era verdad que te habías lesionado porque la recuperación que has tenido del brazo ha sido espectacular. Pero es que la lista de incidentes es larga", señaló el catalán. Y enumeró todo lo que le había sucedido al conductor del programa de Antena 3 los últimos años: "Te has roto el bíceps, el tríceps, dos sóleos, la nariz, dos operaciones de menisco, una de hombro, una de orzuelo, seis costillas rotas, una lesión en el talón de Aquiles, dos covid... Por honor, has entrado en el Club Platino Pupas", concluyó entre risas el socio de Motos.
Aun así, el conductor del programa de Antena 3 cuenta con una forma física envidiable, sobre todo para alguien que está cerca de los 60 años, y parte de la culpa la tiene Ramón Gabaldón, su entrenador en ABER LIFE, que le lleva preparando desde hace tres años una rutina personalizada (adecuada exclusivamente a Pablo Motos por sus características ya que cada persona necesita unos ejercicios diferentes dependiendo del objetivo que quiera) para que el valenciano luzca como lo hizo el día que Steve Aoki acudió a El Hormiguero.
P: ¿Cuál es la rutina personalizada de Pablo Motos?
R: Creo si no fuera por esa constancia que tiene Pablo, por ese perfeccionismo, por querer siempre mejorar, de buscar esa perfección y de mejorar en sí mismo, no funcionaría la rutina que tiene. Es que ha ganado ocho kilos de masa muscular desde que entrena conmigo en unos tres años. Comenzamos a entrenar dos días a la semana, pero cuando vio todo lo que podía conseguir me pidió hacerlo más días hasta llegar a cuatro veces a la semana. Pablo lo quiere todo: ganar más fuerza máxima, generar hipertrofia, velocidad de reacción para mejorar en boxeo... Busca la perfección en todo lo que hace.
También gestionamos el nivel de estrés que tiene, porque no es el mismo en unas personas que realizan unos trabajos que en otros, como es su caso, uno de los presentadores más conocidos de la televisión, por lo que tiene el nivel de cortisol muy alto.
P: ¿Cómo dividen esos días de entrenamiento?
R: Algunos son enfocados a fuerza máxima, otros son a la hipertrofia y otros, a la velocidad para la mejora de las aptitudes físicas necesarias para el boxeo. El primer día, que es cuando más fresco está, es cuando trabajamos lo primero, y aquí hacemos ejercicios como peso muerto con barra hexagonal, unas cinco u ocho repeticiones, dominadas lastradas, y luego pasamos a curl femoral y bíceps.
El segundo día hacemos ejercicios como un pres militar para hombro, extensión de tríceps y flexiones. Hacemos esa mejora en habilidades para boxeo trabajando la velocidad de reacción, agilidad, potencia y coordinación con gomas elásticas, escaleras, conos, etc…
El tercer día tocan sentadilla, remo, trabajo de core… y el último día, zancada multi power, elevaciones laterales a repeticiones más altas buscando un trabajo más metabólico.
P: ¿Cuánto tiempo pueden llegar a entrenar a la semana?
R: Las sesiones de entre semana suelen durar una hora y media, pero los fines de semana podemos estar dos horas entrenando.
P: ¿Se ha lesionado alguna vez con usted?
R: Por suerte no se ha lesionado nunca. Yo lo que hago es recuperarle de las lesiones porque también hago labor de readaptador.
P: ¿Cómo es Pablo Motos como alumno?
R: Es perfecto, atiende y sigue los ejercicios según se los indico para mejorar cada día.