Seguro que nuestros antepasados, para amenizar sus horas sin televisor, ni móviles ni siquiera radios, pasaban el rato contándose chistes. El humor es más antiguo que muchas de las cosas que conocemos hoy en día. Y es que, sin duda, las personas necesitamos reírnos para aumentar las endorfinas que se liberan en el cerebro. En este sentido, se ha descubierto cuál es el chiste redactado más antiguo que se encuentra tallado en unas tablillas del periodo babilónico antiguo fechadas en el año 1900 a.C.

El canal de la televisión británica Dave encargó a la Universidad de Wolverhampton, en Birmingham (Reino Unido) que recogiese la lista de las diez bromas más antiguas de la Historia de Humanidad. Después de escudriñar durante dos meses multitud de registros históricos, el equipo dirigido por Paul McDonald, por fin llegó a una conclusión.

El chiste conocido más antiguo de la Historia se remonta al año 1.900 antes de Cristo, a Sumeria (considerada la primera civilización del mundo. Habitó en lo que hoy es el sur de Irak) y dice así: "Algo que nunca ha ocurrido desde tiempos inmemoriales: una mujer joven no se ha tirado un pedo en el regazo de su esposo".

Gárgola de la Catedral de Colonia.

El chiste hace referencia a las flatulencias de una persona ante su pareja. Aunque haya perdido la gracia, la frase sigue vigente de algún modo. Cuando un joven está enamorado, evita producir flatulencias delante de su pareja. Es el primer chiste del que se tiene constancia y mezcla dos temas que siguen siendo pilares fundamentales del humor: las relaciones sentimentales y la escatología.

Otros chistes muy primitivos

A partir de aquí, los investigadores fueron encontrando otras referencias que les proporcionaron "una visión única y convincente de cómo han evolucionado las bromas a lo largo de los años", señalaban.

- Antiguo Egipto, 1600 a.C. "¿Cómo entretienes a un faraón aburrido? Navegas por el Nilo con una barca llena de mujeres jóvenes vestidas solo con redes de pesca y le dices al faraón que vaya a pescar".

- Antigua Grecia, 800 a.C. "Odiseo le dice al Cíclope que su verdadero nombre es 'nadie'. Cuando Odiseo ordena a sus hombres que ataquen al Cíclope, el Cíclope grita: -¡Ayuda, nadie me está atacando! Nadie acude en su ayuda".

- Antigua Grecia, 429 a.C. "Pregunta: ¿Qué animal camina a cuatro patas por la mañana, a dos al mediodía y a tres por la tarde? Respuesta: el hombre. A cuatro patas como bebé, a dos como hombre y usa bastón en la vejez".

- Antigua Roma, 63 a 14 a.C. "El emperador Augusto estaba de gira por el Imperio cuando vio a un hombre en la multitud que tenía un parecido sorprendente consigo mismo. Intrigado, preguntó: -¿Tu madre estuvo alguna vez en el servicio de Palacio?. -No, alteza, respondió. - Pero mi padre sí".