Ni 24 horas han pasado desde que la capital se tiñera de rojigualda para recibir a los 26 futbolistas que viajaron hasta Alemania y que han hecho de España campeona de Europa. Aún quedan resquicios de la celebración en la plaza de la diosa Cibeles, pero hoy el color rojo se ha tornado blanco en una marea de personas que llegaban hasta el Santiago Bernabéu.
Más de 80.000 aficionados se han dado cita este mediodía en el templo madridista para presenciar uno de los acontecimientos más esperados de los últimos años: ver a Kylian Mbappé vestido de blanco. La expectación ya era máxima desde el momento en el que el Real Madrid anunció su fichaje el pasado 3 de junio y, un mes después, se han sobrepasado todas las previsiones.
Fue el viernes 13 de julio cuando el club puso a disposición del público las entradas gratuitas para acudir a la presentación del jugador francés. Esa primera fecha fue para los socios, que en apenas unas horas agotaron el 85% del aforo. El sábado fue el turno de los madridistas Premium y ayer, domingo, sólo quedaban algunas para el público en general que, por supuesto, se agotaron.
Nadie ha querido perderse la cita, y aficionados con y sin entrada han acudido puntuales a las 12 del mediodía para ver -o al menos, escuchar-, el tan ansiado primer discurso del ex del PSG ya como jugador merengue. Algunos han venido desde el extranjero y otros se han gastado hasta 300 euros por entrada en la reventa sólo para presenciar este momento.
Un viaje desde Dinamarca
El amor a unos colores es capaz de mover montañas, como en el caso de Karen. Ella y su familia viven en Dinamarca, pero no han dudado en recorrerse los 2.500 kilómetros que separan su país del nuestro, única y exclusivamente para acudir a la presentación de Kylian Mbappé.
Llegaron la madrugada del lunes 15, y pasarán menos de 48 horas en Madrid, ya que mañana abandonarán la capital. Pero para Karen, su marido y sus tres hijos la experiencia ha merecido la pena. Son fieles seguidores del club blanco, aunque lo viven a distancia. Consiguieron las entradas en reventa, pero no hacen mención al precio.
Sus caras lo dicen todo, pero no ocultan su felicidad cuando salen de la tienda oficial del Real Madrid ubicada en una de las puertas del nuevo Santiago Bernabéu. Cargan con varias bolsas en las que, por supuesto, no hay otra cosa que no sea la camiseta del Madrid con el dorsal número 9 de Mbappé.
Hay una para cada uno. En total, cinco. "Nos han costado todas algo más de 800 euros", revela Karen. Aunque ya venían preparados. La mayor de los tres hermanos ya portaba la equipación blanca, aunque en este caso, lucía el 5 de Bellingham. "Le prefiero a él", dice tímida. Aún así, no ha querido quedarse sin su recuerdo de la presentación de un fichaje que han seguido desde el país danés con máxima expectación.
300 euros en la reventa
Hugo tiene 11 años, y ha acudido con su padre, Iván, a la presentación del jugador francés. Admite que la ha vivido "con muchísima emoción" y lo describe como "una auténtica locura". No son socios, pero han conseguido entrada "gracias a una amistad".
Han venido desde el sur sólo para esto y, como recuerdo de este viaje, se lleva puesta la camiseta del galáctico. Al preguntar a Iván por el precio de la camiseta de su hijo, que ha adquirido hoy mismo, contesta que han sido unos "ciento y pico", pero Hugo remata la frase: "Cómo tengo carné madridista, teníamos descuento, y han sido 120 euros".
A lo lejos comienza a haber bullicio. Varias decenas se agolpan alrededor de la puerta 61 del estadio para hacerse una foto con el histórico Esteban Granero, exjugador madridista, que acaba de salir. Y, para sorpresa de todos, le sigue el famoso tertuliano del programa 'El Chiringuito', Edu Aguirre.
Entre esas decenas de personas se encuentra David, nombre ficticio para un hombre que no quiere dar la cara, pero que admite haberse gastado 300 euros en una entrada de reventa. "Las vendían al principio por unos 120, pero por esperar me ha tocado pagar más del doble", afirma.
Ha visto la presentación desde lo que llama "el gallinero", que hace referencia al cuarto anfiteatro y parte más alta del estadio. "Pero hoy es un día histórico y había que estar aquí. Mbappé es el mejor del mundo", sentencia.
No es el único que ha caído en la picaresca de la reventa. Varios aficionados comentan en los aledaños del Bernabéu que a través de la página 'milanuncios' han visto ofertas que alcanzaban hasta los 500 euros. "Es una locura", afirma Álvaro, un joven socio afincado en Guadalajara.
El 'efecto Mbappé'
Desde que ha abierto sus puertas a las 9 de la mañana, la tienda oficial del Real Madrid, aposentada en una de las puertas del Santiago Bernabéu, es un hervidero de gente. Una trabajadora confiesa que sólo han tenido un momento de tranquilidad, y ha sido "durante la presentación".
Una vez terminado el acto, casi un centenar de personas hacen cola a las puertas de la tienda con un único objetivo: no marcharse de allí sin la camiseta de Mbappé. Entran por turnos, controlados por el personal de seguridad que se encuentra custodiando la entrada.
Al cabo de unos quince minutos, mientras que otro gran grupo de aficionados abandona la tienda, vuelven a permitir el paso. En el recibidor ya se ven a varios fans incapaces de esperar a abandonar el local para engalanarse con su nueva adquisición.
"¡Camisetas de Mbappé al fondo a la izquierda!", grita uno de los trabajadores, en un intento de guiar a todo el 'mogollón' de personas que se encuentra deambulando por el vestíbulo en busca de un único producto que ya luce en todos los sectores de la tienda.
Con un efecto 'a lo Cristiano', el francés ha arrasado con las existencias, y ya en la web del club anunciaban una demora en los envíos de hasta seis semanas debido a la ingente cantidad de pedidos que se llevan sucediendo desde que el Real Madrid anunciara su fichaje.
Con un precio de 170 euros, no se trata de un producto asequible para todos los bolsillos. Daniel, Manuel y Sergio, tres aficionados de Guadalajara, de momento sólo se han comprado la bufanda, aunque la camiseta "puede que caiga", admiten dos de ellos.
Sergio es el que se muestra más reticente, pero ya no por lo económico. "A Mbappé todavía le tengo un poco en cuarentena", explica. Este es el sentir también de una gran parte de los aficionados merengues, que no perdonan al jugador su decisión de renovar con el PSG en mayo de 2022.
Aún así, el francés parece haberse reconciliado con la afición. "1,2,3... ¡Hala Madrid!", parece haber sido la conjura que ha enamorado a los más de 80.000 aficionados que han acudido a recibirle a un acto en la que a partir de ahora será su casa, y que pone fin a una historia de cortejo que ha durado casi una década y que ha terminado con final feliz.