En las afueras de Shanghai, nació el segundo hombre más rico de China en el seno de una familia de obreros. A sus 43 años Colin Huang cuenta con un patrimonio de 48.000 millones de dólares, según la revista Forbes. Ha amasado esta gran fortuna a través del conglomerado tecnológico PDD Holdings. Fue con la plataforma de comercio electrónico, Pinduoduo, hace casi una década que se empezó a gestar este imperio, y desde entonces no ha parado hasta convertirse en uno de las figuras más importantes de este sector.

Esta fortuna la ha conseguido gracias a una producción low cost, sin tener que pagar impuestos en Europa hasta el año 2021, además de estar exento de derechos de aduanas y de aranceles para envíos con un valor inferior a los 150 euros. Todo esto ha provocado que empresas como Shein o Temu (propiedad de Colin Huang) destruyan los negocios locales, ya que hacen competencia desleal al no cumplir los estándares exigidos por la Unión Europea, además de contar con unos coste significativamente inferiores.

Sin embargo, la Comisión Europea ha propuesto acabar con estas ventajas de las que gozan los gigantes asiáticos. Según ha avanzado el Financial Times, este verano va a proponer que los productos de menos de 150 euros de estas plataformas (que hasta ahora no pagaban impuestos) tengan que pagar la tasa correspondiente. 

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La creación del imperio

Huang se crió en la ciudad de Hangzhou, a 170 kilómetros de Shanghai, mientras sus padres trabajaban en una fábrica. Comenzó a estudiar Informática en la universidad de Zhejiang, en su ciudad natal, y durante su primer año ganó una beca para estudiar en la Universidad de Wisconsin. Consiguió hacer prácticas en Microsoft y en Google, donde acabó trabajando en 2004.

Dos años después decidió regresar a China para intentar introdudir Google en su país, sin embargo, la censura frenó sus intenciones, ya que el Gran Cortafuegos impedía operar al buscador más famoso del mundo. Tras esto dejó Google y decidió montar una empresa online para vender productos electrónicos. También abrió una agencia que facilitaba a marcas extranjeras la venta de sus productos en plataformas de comercio electrónico chinas. Y por si fuera poco, fundó la famosa empresa de juegos online Xunmeng.

Pero su gran éxito llegó con Pinduoduo, competencia directa del gigante Alibaba. Se fundó en 2015 y Huang lo definió en un blog como una mezcla entre los supermercados Costco y Disneyland. La idea era crear un mercado online en el que cualquier comerciante pudiese vender sus productos, sin importar lo grande o pequeño que fuera.

Colin Huang, dueño de Temu en Shanghai.

La plataforma en un inicio vendía alimentos frescos y baratos a través de un contacto directo entre compradores y agricultores, y con el tiempo empezó a vender cualquier tipo de productos. En 2018 cotizó en Nueva York y tres años después decidió renunciar como director ejecutivo, y su socio Chen Lei le tomó el relevo. A pesar de su dimisión, continúa poseyendo el 28% de las acciones de la empresa.

En un artículo de Financial Times explican que el empresario utiliza la táctica empresarial china del guante blanco. De esta manera, estableció una red de plataformas de comercio electrónico y juegos en Shanghai con el apoyo de un grupo de amigos para que apareciesen sus nombres como accionistas, lo que reduce su riesgo personal y a su vez protegerse de una investigación pública, sobre todo después de que el Gobierno chino haya iniciado una batalla antimonopolio contra las empresas tecnológicas del país.

Y lo que le ha convertido en el segundo hombre más rico de China fue la aplicación de compras barata, Temu. Se lanzó en Estados Unidos en 2022, y actualmente hace envíos a más de 50 países por todo el mundo. Produce en China, pero el año pasado cambió su sede internacional de Shanghai a Dublín. Al igual que Pinduoduo, combina el comercio y los juegos online, y captan amigos para ofrecer a cambio créditos para conseguir descuentos o productos gratuitos. También siguen la misma estrategia de marketing, agresiva y con precios insuperables, promocionado por numerosos influencers.

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El secreto del éxito se encuentra en que por primera vez los usuarios disponen de una aplicación que vende cualquier producto a precios regalados y con grandes descuentos. En 2023 comenzó su expansión por Europa, colgó un anuncio en la Super Bowl y durante unos meses se convirtió en la aplicación gratuita más descargada en la App Store y Google Play. Pero esto no ha evitado las controversias alrededor de su imperio.

El año pasado, con el desarrollo que estaba viviendo la empresa, un panel del Congreso de Estados Unidos presentó un informe en el que se dudaba de la posibilidad de que, tanto Temu como Shein, hicieran uso de trabajo forzoso. De la misma manera, se ha puesto en duda la falta de transparencia en las pruebas de seguridad y protección de sus datos.