Septiembre representa el fin de las vacaciones y el inicio del año escolar. El dilema recurrente es el horario que los estudiantes deben permanecer en clase. El informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) propone una jornada partida.
Desde los años noventa en los institutos españoles la jornada es continua o intensiva, por lo que, la OCDE recomienda eliminar el horario intensivo como una fórmula efectiva para reducir el abandono escolar. Serían clases por la mañana y tarde con una pausa para comer.
Actualmente comunidades como Andalucía o Cataluña desarrollan el horario lectivo en jornada partida, similar a países como Portugal y Dinamarca. Una de las principales razones de la propuesta es que afecta al desarrollo personal como económico de los alumnos que deciden dejar de estudiar prematuramente.
Los colegios podrían cambiar de horario el curso que viene si el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deporte tiene en cuenta los datos recogidos por la OCDE. Afectaría tanto a los estudiantes de educación Primaria como a los alumnos de la ESO en los IES (Institutos de Enseñanza Secundaria).
Esta recomendación de la OCDE ha avivado el debate en España. Entre los argumentos del informe está que generaría un entorno más rico para el aprendizaje del alumnado, principalmente para los que proceden de situaciones socioeconómicas desfavorecidas.
También podría suponer un alivio para muchas economías familiares, debido a que el 47% de hogares contratan clases extraescolares para sus hijos, que ya no serían necesarias con este sistema flexible.
El informe recoge que el elevado abandono escolar temprano también se refleja en un rendimiento académico deficiente. España se sitúa en el 13,6%, un porcentaje significativamente alto si lo comparamos con otros países de la Unión Europea con un 9,5%.
Los padres prefieren la jornada partida con servicio para comer porque de esa manera tienen más margen para recoger a los niños después del trabajo, aunque en muchos colegios ya está instaurada la contínua, sin clases por las tardes.
El aprendizaje y la alimentación
La OCDE se apoya en la evidencia de la investigación en las buenas prácticas nacionales e internacionales. Los datos demuestran que pasar más tiempo en el centro educativo ayuda a elevar las tasas de graduación, mejorar el aprendizaje, así como otros indicadores sociales y conductuales.
Una profesora enseña a sus alumnos.
Los pedagogos y expertos en nutrición han alertado sobre los riesgos del horario escolar continuo para la salud. El comer tarde les afecta negativamente y merma su rendimiento académico.
El horario promedio de desayuno de los estudiantes es muy temprano. Suelen comer rápido y poco, sin los nutrientes adecuados y proporcionales a su edad. Después, ingieren demasiado y muy tarde, lo que que también no es saludable.
El metabolismo de los estudiantes se ven seriamente afectados porque salen de esa rutina los fines de semana y en el periodo vacacional, lo que podría ocasionar futuros problemas de salud.
La financiación
Una decisión como esta no es barata. Se requiere de un acompañamiento de financiación suficiente, así como de recursos para las mejoras en la prestación de comedores escolares, en la dotación para actividades extraescolares o en la provisión de profesorado de apoyo.
La OCDE propone invertir en ayudas, remunerar adecuadamente al personal de los centros e incrementar las ayudas a alumnos en riesgo de exclusión.
Sugiere también revisar los salarios y las oportunidades de desarrollo profesional para los directores. Plantea la elaboración de un 'indice de vulnerabilidad escolar' común a todos los CCAA para asignar más recursos a los centros más vulnerables.
En el caso de la Comunidad de Madrid, son 56 colegios que están abiertos desde el dos de septiembre en 41 municipios para ayudar a la conciliación de las familias, pero ninguno en la capital.
La Comunidad realiza esta medida dentro del programa de ayudas para financiar la apertura de centros educativos en días no lectivos con la organización de actividades extraescolares que el Gobierno regional estrena en este curso 2024/2025.