Si por algo es conocida Castilla-La Mancha en todo el mundo es por su gastronomía. La combinación entre sus productos y su cultura logran exquisitos y contundentes platos, que combinan la tradición y el buen gusto. Las recetas manchegas se caracterizan por estar hechos con productos de la tierra que requerieren un tiempo de cocción lento y una elaboración cuidada. Algunos de sus platos más populares son las atascaburras, las berenjenas de almagro, las carcamusas toledanas, el cordero manchego, duelos y quebrantos, las gachas, el gazpacho manchego, el pisto y uno de los favoritos de Carlos Herrera, las migas de pastor.
Acostumbrado a compartir con sus seguidores de Instagram sus experiencias como viajes, momentos familiares, salidas con amigos, experiencias laborales o los restaurantes que más ha disfrutado. El gran asador de Rábade, los mejores boquerones de Málaga, el vino que le dejó fascinado en Huelva. Así como el festival del atún en Cádiz o el ejemplar bogavante a la ibicenca de Barcelona. Y en esta ocasión la provincia de Toledo ha conquistado el paladar del almeriense.
El locutor almeriense ha querido compartir a través de sus redes sociales un establecimiento de Toledo. "Consuegra, la mancha toledana. Delicioso almuerzo con migas, tiznao, gachas y una descomunal caldereta preparada por Pedro, alma mater de EL RETORNO".
El Retorno es el restaurante elegido por Carlos Herrera para degustar la cocina castellano-manchega más tradicional. Se encuentra ubicado en Consuegra, una de las localidades más bonitas y con más historia de toda España. En el establecimiento tienen pasión por la cocina y respeto por el producto donde la materia prima es de primera calidad y de temporada, gracias a su propio huerto.
Tras los fogones se encuentra el chef Pedro Rodríguez que se encarga de crear una cocina vanguardista con toques de cocina tradicional pero en evolución y fusionada con otras culturas gastronómicas.
El restaurante cuenta con un amplio abanico de platos desde los más tradicionales pero con un toque modernista, hasta platos de otras culturas y regiones. Lo platos más destacados son los duelos, quebrantos y trompetas de la muerte, panceta crujiente, el ciervo en salsa y los dos platos elegidos por Herrera, la caldereta de cordero lechal y las migas de pan de candeal con huevo poché. El precio por persona ronda entre los 70 y 80 euros.