Estados Unidos se enfrenta a lo que algunos expertos ya consideran la peor tormenta de este siglo: el poderoso huracán Milton, que está azotando la costa oeste de Florida con devastadores efectos sobre la población.
Los economistas advierten que podría convertirse en el desastre natural más costoso de la historia, mientras el presidente Joe Biden urgió a los ciudadanos en riesgo a evacuar, calificando la situación como una cuestión de "vida o muerte". Sin embargo, muchos han tenido que enfrentarse no solo al miedo, sino también a obstáculos como la escasez de alimentos y agua en los supermercados, atascos en las rutas de evacuación y la falta de combustible.
En el capítulo de hoy hablamos con Verónica Vera, una abogada venezolana que ha escapado de su residencia en el sur de Tampa con su marido y sus hijas. “El nivel de estrés es terrible, porque tienes que elegir lo esencial”, explica. Verónica se confiesa afortunada porque ha encontrado un lugar más seguro en Miami en casa de su suegra, pero recuerda a los amigos que se han tenido que quedar por falta de recursos. “Han reforzado su casa esperando lo mejor”. En conversación con el pódcast En la Sabana afirma que "La vida es lo principal, las cosas materiales, como bien sabemos los migrantes, se reponen”. Calcula que sus pérdidas podrían llegar a 250.000 dólares y le preocupa el coche que su marido dejó aparcado en la puerta de su casa. “Que esté cuando lleguemos”, implora.
Francisco Martín, meteorólogo y colaborador de Meteored reconoce que en más de treinta años de profesión nunca había visto nada así. “La alta temperatura del mar es gasolina de primera para los huracanes, habrá cada vez más”, afirma. El cambio climático es un hecho y la temperatura de los océanos ha acalcanzo cifras record, llegando a los 20,96 grados. El director de RAM, la Revista del Aficionado a la Meterología advierte que el huracán Milton solo es un ejemplo del futuro. Apunta al Caribe y el Pacífico occidental como dos de las principales localizaciones aptas para que se repitan fenómenos similares a este.
Considera que informar sobre catástrofes medioambientales no resulta nada fácil pero los meterólogos "tenemos a la ciencia de nuestro lado". Está convencido de que las valoraciones les pertenecen a los políticos. "Hay que ser asépticos", concluye. En ese sentido cree que es un acierto que el presidente Joe Biden haya advertido a los ciudadanos de los peligros potenciales del huracán Milton.