La Guardia Civil trabaja a destajo para localizar al propietario -o propietarios- de una narcolancha, de 10 metros de longitud, equipada con dos motores de 300 caballos, y que se iba a utilizar para un alijo en La Manga, pero de camino a la playa se soltó el remolque en el que transportaban la embarcación. Tal percance causó una colisión múltiple, con siete vehículos implicados en los que viajaban trece personas inocentes, de las que dos perdieron la vida y tres se encuentran en estado grave.
"Parece ser que se estaban incorporando a la vía rápida de La Manga con una narcolancha en un remolque, por lo que podrían proceder de Los Nietos, una población próxima que tiene playa, o de alguna diputación de Cartagena", según explican fuentes próximas a la investigación abierta por la Guardia Civil. "Irían a echarla al mar en algún punto de La Manga porque allí hay movimiento de alijos".
Esta -aparente- operación de narcotráfico se terminó convirtiendo en un terrible siniestro vial. "El remolque se desenganchó cuando se incorporaron a la vía rápida de La Manga y un Seat León que iba por detrás chocó contra la narcolancha porque estaba mal amarrada".
Una narcolancha provoca un accidente múltiple con fallecidos, este sábado por la noche, en dirección a La Manga.
El siniestro vial se produjo sobre las 21.30 horas de este sábado, en la carretera RM-12, a la altura de El Algar, en el término municipal de Cartagena, cuando la embarcación semirrígida acabó sobre el asfalto tras soltarse del remolque que la transportaba. "En el Seat León viajaban tres ciudadanos británicos, dos de ellos murieron y el tercero ingresó en estado grave en el Hospital Virgen de la Arrixaca".
Esta fuente de la Guardia Civil detalla que los fallecidos son P. D., de 49 años, y J. W., de 57 años, mientras que el tercer ciudadano inglés que permanece ingresado en estado grave en La Arrixaca responde a las iniciales: I. P., de 54 años. "Podría tratarse de tres turistas de Reino Unido porque todo ellos viajaban con un pasaporte y no llevaban un NIE encima". Además, el Seat León iba cargado con palos de golf.
De momento, el Instituto Armado está haciendo gestiones con la embajada británica para averiguar si se trataba de turistas que se dirigían a La Manga o de ciudadanos ingleses que residían en la Región de Murcia. Lo único que está claro es que se llevaron la peor parte de este siniestro vial. Así lo resume un miembro del amplio dispositivo de emergencias desplegado este sábado en la carretera RM-12:
"La zódiac era una narcolancha porque no llevaba matrícula, la transportaban en un remolque y la amarraron mal, con la mala suerte de que se soltó, y al coche que llevaban por detrás, le cayó encima la lancha a 100 o 120 kilómetros por hora. El conductor del coche trató de esquivarla, pero no pudo y acabó completamente deformado. Dos de sus ocupantes murieron en el acto. Los decapitó".
El siniestro vial movilizó, este sábado por la noche, a decenas de efectivos de emergencias, sanitarios, bomberos y Guardia Civil
Los narcos a la fuga
Una fuente de la Guardia Civil explica a EL ESPAÑOL que "se sospecha que al menos iban dos personas en el vehículo que remolcaba la narcolancha, porque es una embarcación de diez metros de eslora y necesitas ayuda para echarla al mar. Irían a alijar a La Manga". Tras la colisión, los narcos se dieron a la fuga y en estos momentos se está poniendo patas arriba el Campo de Cartagena para darles caza.
"Hay un testigo que ha aportado información de interés, acerca del vehículo en el que se dieron a la fuga y que era el que remolcaba la lancha". La Policía Judicial asume la investigación de este siniestro vial, provocado por una embarcación que por sus características puede estar relacionada con el narcotráfico: tiene una proa alargada, con capacidad para transportar decenas de fardos de hachís o de otras sustancias, así como cuatro asientos en línea para que la tripulación gestione la logística de un alijo.
El choque contra la embarcación del Seat León en el que viajaban los tres ciudadanos británicos, desencadenó una colisión múltiple en la RM-12 en la que se vieron implicados otros seis vehículos. Cinco de sus ocupantes presentaban heridas leves, pero otros dos sufrieron lesiones de gravedad. "Uno de los heridos graves es un hombre, de nacionalidad española, de 39 años, que viajaba en un Peugeot 2008, y la otra lesionada de entidad, es una adolescente, de 18 años, que iba en un Toyota Yaris".