Los escasos 50 vecinos que componen las poblaciones de Tajueco y Andaluz, en Soria, están de luto. Manuel Isla es el presunto autor del asesinato y desmembramiento de Jorge Luis Pérez Ochandarena, el exmarido de la mujer de origen cubano, Alicia, la cual apareció un día por las calles de estas pedanías y se "enemaró" de 'El Lobo de Tajueco', como se conoce a este soriano -por ser un tipo solitaro-.
Pero este amor no resultó ser tan intenso. Manuel y Susana, como realmente se llama esta inmigrante,—solo que en el pueblo la conocen como Alicia— estuvieron casados por un tiempo en el pasado, pero despues 'la pasión' se apagó y se dejaron, aunque ahora la Policía Nacional los ha vuelto a unir como posibles compinches de este atroz crimen.
Los orígenes de este trágico suceso se remontan a un año atrás cuando fue denunciada la desaparición de la víctima —un hombre cubano y exesposo de Susana— ante Policía Nacional. Jorge llevaba un año desaparecido, y la última pista que dejó a su primo, el denunciante, fue un mensaje de texto en el que decía que "había conocido a una chica de España y se iba con ella". El WhatsApp de Jorge incluía un dato inquietante y que levantaba sospechas de que se marchaba de Soria de manera forzada: 'Voy a hacer desaparecer este teléfono'.
Los agentes de policía iniciaron la investigación y el 12 de noviembre del año siguiente detuvieron a 'El Lobo' y a su amante como los protagonistas de este homicidio, pues tenían las pruebas suficientes. Gracias a los dispositivos de escuchas que la Policía Nacional había efectuado y a las imágenes que Google Street View, en la que se observa a Manuel metiendo lo que parecía un cuerpo sin vida en el maletero de su coche, los agentes de seguridad pudieron proceder al arresto.
Además, el miércoles 11 de diciembre apareció en el cementerio de Andaluz, el torso desmembrado de una persona, y una semana después la Brigada Judicial de Soria ha comentado en la rueda de prensa que los indicios apuntan a Jorge, el esposo de Alicia, la amante de 'El Lobo de Tajueco'.
A pesar del 'boom' mediático de la fotografía de Manuel moviendo el supuesto cuerpo, tal y como subrayan fuentes policiales a EL ESPAÑOL, "esa imagen no es la piedra angular de la investigación", pues esa imagen data de octubre de 2024 y la desaparición de este ciudadano cubano, de 34 años, se denunció en noviembre de 2023, de modo que hacía días, semanas o meses que su cuerpo estaba desmembrado, en descomposición y enterrado por fascículos: el torso por un lado, la cabeza y las extremidades por otro.
Lo que parecía una historia de amor entre una inmigrante cubana y un pueblerino soriano, se ha convertido en una novela de terror retratada por los ojos de Google y publicada por los agentes de policía. Este diario se ha desplazado hasta las localidades en las que han tenido lugar este fallido romance y el ocultamiento de un asesinato, para comprender si el 'El Lobo' solo aullaba o quería morder.
'Quien calla otorga'
A la entrada de Tajueco la soledad gobierna. El silencio solo se rompe por los cinco vecinos que se han atrevido a salir a la calle después de lo acontecido, y que este diario ha tenido la oportunidad de hablar con ellos. Se muestran reacios a expresarse libremente, son unos 35 habitantes y uno de ellos parece ser el protagonista de un desmembramiento humano, pero el nerviosismo puede con estos sorianos.
"Le conocíamos sí, pero era un hombre bastante solitario, guardaba las distancias e iba y venía cuando él quería. Era un vecino más, un vecino normal", explican los lugareños de Tajueco. Manuel nunca había destacado por un comportamiento fuera de lo normal y su apodo le viene por el tatuaje de un lobo que lleva en su brazo. "Era él mismo el que se llamaba así, todo el mundo le conoce como 'El Lobo' porque él se lo llamaba", añade otro ciudadano.
A unos 250 metros de la plaza del pueblo se encuentra la casa del presunto asesino, de ladrillo rojo y con una gran terraza. Frente a ella, la esquina donde el coche de Google Maps le cazó transportando el cadáver, aunque fuentes policiales cercanas a este periódico aseguran que no se trata del cuerpo de Jorge, si no de un saco de piñas que este soriano cargaba en en el maletero de su viejo Rover -color granate-.
"Parece ser que se trata de sacos con piñas secas para quemar la leña. En el registro del garaje de su vivienda, se encontraron 8 o 10 sacos como los de la foto de Google que contenían piñas", afirman los agentes.
A pesar de ser "uno más de Tajueco", no era autóctono de allí. De origen gallego, Manuel fue adoptado "por el secretario del Ayuntamiento" y su esposa, cuando era un niño, junto a sus dos hermanas, pero se criaron en este pueblo. "Estamos hartos de verle, pero nunca hemos sabido muy bien a qué se dedicaba. No estaba siempre en el pueblo, se movía bastante por Soria y otros municipios, pero desde que murieron sus padres sí que se le veía más por aquí", aclara un residente.
La habladuría del pueblo
Un día a 'El Lobo' se le empezó a ver con una mujer de unos 40 años de origen cubano y con dos niños de alrededor de los 12. "Muy poca gente sabía quién era y de dónde venía, el caso es que estaban juntos", comentan los vecinos. Manuel y Alicia comenzaron así una especie de relación que después de casi dos años ha culminado con el asesinato del exmarido de Alicia -es decir, Susana-.
Este cambio de nombre de Susana a Alcia se puede deber a las intenciones de la cubana para regular su situación administrativa en España. Nueva vida, nuevo nombre, nuevo matrimonio, las vivencias del pasado para la inmigrante se quedan en el pasado, o bajo tierra.
"Tanto en Tajueco como en Andaluz y en los pueblos de alrededores se decía que esa mujer estaba con Manuel para conseguir los papeles o por su dinero. Y mira ahora, detenidos los dos y un parte de un cuerpo en un cementerio", resalta una mujer de 75 años que descansa en el rellano de su apacible casa.
Los sucesos han tenido lugar entre Tajueco, lugar donde residía Manuel, y Andaluz, en el que vivía su amante. Entre estas dos localidades hay apenas 14 kilómetros de distancia y miles de hectáreas inhóspitas a la redonda, por lo que muchos de los vecinos se preguntan: "Si han sido ellos, ¿por qué entierran parte del cadáver en el cementerio y no en medio del campo?" Tal decisión puede deberse a cierto sentimiento de culpa o a la presunta intención de hacerlo desaparecer para siempre en el camposanto de un pueblo con solo 19 vecinos.
Por lo que cuentan los lugareños 'El Lobo' no tenía un trabajo fijo e iba "dando patadas de aquí para allá". Aún así, Manuel estuvo al cargo de un bar en Bayubas de Arriba durante un año. "Era una persona muy normal, venía, hacía su trabajo y se iba. Nunca ha hecho nada comprometido. Después del bar empezó a trabajar en la limpieza y mantenimiento del ayuntamiento de aquí, y nunca han puesto pegas de él. Yo no creo que haya sido él quien ha matado a este hombre. Era muy normal", resume un bayubés. "Lo más raro que le he visto hacer es aullar cuando eran las fiestas anuales", añade otro.
Todavía es pronto para saber lo que ha sucedido exactamente, pues la investigación sigue abierta. Sin embargo, entre el triángulo que componen Tajueco, Andaluz y Bayubas de Arribas —que son los pueblos implicados y donde desarrollaban su vida estos protagonistas— los locales creen que se trata de una historia de "amor, rupturas, celos y muerte".
"Una mujer que viene desde cuba con dos hijos a un pueblo de la Soria más profunda, empieza una relación con un hombre de Tajueco, al tiempo lo dejan y un año después aparece el exmarido cubano desmembrado en el pueblo en el que vive ella. Esto huele muy raro", critican los residentes de estos municipios de la España vaciada.
La investigación
En la rueda de prensa que se ha dado este miércoles con las aportaciones del subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, junto al comisario principal, jefe de la Comisaría Provincial de Soria, Francisco Cañús, el inspector jefe de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Soria, Ángel Muñoz, y el inspector, Óscar García, jefe del grupo operativo de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violencia se han ofrecido los detalles de la investigación.
Las pesquisas de este suceso comenzaron hace un año, con la denuncia impuesta por el primo del desaparecido, Maikel, el mismo que afirma haber tenido desde siempre "una relación muy fluida" con Jorge, la posible víctima mortal de este crimen.
"No se ha resuelto la desaparición por la foto de Google Street View, sino por la geolocalización del móvil del desaparecido", según detallan fuentes policiales. El teléfono de Jorge ha jugado un papel importante porque cuando su primo, Maikel, afincado en Zaragoza, denunció que su familiar estaba en paradero desconocido, ya puso énfasis en el terminal por los extraños mensajes que recibió por aquellas fechas.
"El familiar explicó que su primo le envío un WhatsApp donde le decía: 'He conocido a una chica y me voy a ir de Soria. Voy a hacer desaparecer este teléfono'". Pero la cuestión es que la Brigada Policía Judicial comprobó que el terminal lo mismo estaba apagado durante largas rachas de tiempo que estaba encendido, y lo más importante, cuando cuadraron su señal con antenas de telefonía, "lo ubicaban en Tajueco".
Para terminar de rizar el rizo, esa señal a veces aparecía junto a la de los terminales de los dos sospechosos: Manuel, y la cubana Susana, la pareja del desaparecido que contrajo matrimonio con 'El Lobo de Tajueco' para legalizar su situación administrativa en España. "Han triangulado antenas de telefonía y estaban juntas las señales de los tres móviles".
Un amor desmembrado
No solo estaban en la diana policial por los móviles y la información aportada por el denunciante, también porque el cubano Jorge supuestamente fue visto en el bar del Centro Social de Bayubas de Arriba que explotaba Manuel. "El bar lo regentó durante un año, hasta septiembre de 2023, y parece ser que antes, el desaparecido fue visto con 'El Lobo por Tajueco'", según cuenta un concejal de la zona de forma anónima. "Había agentes de paisano por el pueblo que mostraban una imagen de ambos y preguntaban si les habían visto", añade.
Esta inmigrante cubana desde que fue detenida el 12 de noviembre, en estas semanas en la cárcel, según confirman fuentes policiales, "se vino abajo cuando ingresó en prisión y ha comenzado a colaborar con la investigación". De momento, esta reclusa ha confirmado que el torso en descomposición encontrado en el cementerio de Andaluz, pertenece a su pareja: Jorge Luis Pérez Ochandarena.
"Todavía faltan por localizar la cabeza y las extremidades". De hecho, se han buscado esas partes del cuerpo de Jorge en el jardín de la casa de Manuel, y en un monte de Tajueco. "Se han hecho batidas para ver si había zonas que evidenciaran algún movimiento de tierra". Así que la búsqueda continúa. Lo que está claro es que Susana, presa en la prisión de Zuera, podría empezar a tirar de la manta, para buscar una rebaja de cara al proceso penal que está bajo secreto de sumario.
Tal colaboración podría provocar que Manuel, ingresado en la prisión de Soria, también empiece a hablar para inculpar a la cubana Susana —o Alicia como la conocen en el pueblo—, debido a que está muy señalado en la investigación porque en su casa "encontraron una pertenencia personal del desaparecido", según confirman estas fuentes policiales.
Además, Manuel se había separado de esta inmigrante por lo que es evidente que el amor se les acabó y se ha roto la unidad que ambos mostraron cuando fueron puestos a disposición judicial, ya que se acogieron a su derecho a no declarar. Las pesquisas policiales continúan con el análisis de los vehículos particulares de él y de ella, para ver si aparece algún vestigio del ADN de Jorge. "Los dos coches han sido desmontados como en un episodio de CSI para analizarlos por piezas". La investigación continúa abierta para el total esclarecimiento de los hechos investigados.