La difunta Lorena, en una imagen de su etapa en la escuela de azafatas de Murcia, junto a una imagen de su novio, Ismael, investigado  por la Guardia Civil por la inmersión mortal en la Cueva del Agua en Isla Plana.

La difunta Lorena, en una imagen de su etapa en la escuela de azafatas de Murcia, junto a una imagen de su novio, Ismael, investigado por la Guardia Civil por la inmersión mortal en la Cueva del Agua en Isla Plana.

Reportajes

Ismael, investigado ahora por la muerte de su novia Lorena en la Cueva del Agua, dijo a la familia que "ella entró en pánico"

La Guardia Civil debe aclarar si esta docente, de 37 baños, murió por una negligencia de su pareja Ismael, instructor de buceo en cuevas, o fruto de un accidente, debido a que la gruta se enfanga con facilidad.

Más información: Ismael, investigado por homicidio imprudente por la inmersión mortal de su novia Lorena en la Cueva del Agua

Publicada

La pasión por el buceo unió sentimentalmente a Lorena con Ismael y el buceo los separó para siempre, de forma trágica, en la temida Cueva del Agua de Isla Plana. Ahora, la Guardia Civil investiga a Ismael por un homicidio imprudente sobre su novia, Lorena, pero eso no sorprende a los amigos íntimos de la fallecida porque ya lo veían venir desde que coincidieron con este instructor de espeleobuceo en el Tanatorio de Jesús de Espinardo y se podía cortar la tensión con los allegados de la difunta.

"En el tanatorio se le veía preocupado a Ismael. Evitaba mirarte a los ojos y solo daba evasivas cuando se le preguntaba por lo sucedido", según relata uno de los mejores amigos de Lorena García Martín, a la que conocía desde hace más de una década, y que durante el velatorio le preguntó a Ismael D. H., ingeniero de profesión, qué había ocurrido en las entrañas de la Cueva del Agua, durante la inmersión que realizó con su novia, cuando estaba oscureciendo este sábado 18 de enero.

"Ismael no daba un relato coherente". "Me dio la impresión de que no quería ofrecer datos, para no pillarse los dedos", según afirma este amigo. "Solo repetía en bucle una respuesta a familiares y amigos. No paraba de decir la misma muletilla: 'Lorena entró en pánico porque no había visibilidad en la Cueva del Agua'. 'Entró en pánico, entró en pánico, se puso nerviosa, desatendió mis explicaciones y no hizo caso a las medidas de seguridad'. Pero a mí, eso me extraña porque Lorena era una persona muy prudente y siempre respetaba los protocolos de seguridad".

"Ella estaba en un grupo de WhatsApp con buzos expertos, militares y guardias civiles, con los que hacía expediciones muy técnicas. En su Instagram, publicó inmersiones en la Cueva del Agua, algunas de ellas nocturnas", según ejemplifica esta persona del círculo de la fallecida. "Lorena tenía títulos de submarinismo en aguas abiertas, hizo apnea, empezó a formarse en Islas Hormigas y su formación estaba por encima de la media de los aficionados porque dedicaba mucho tiempo y dinero al buceo: si tenía que gastarse 800 euros en un curso o equipos, lo hacía". 

EL ESPAÑOL ha confirmado que esta profesora de Inglés, de 37 años, tutora de Tercero de Educación Primaria en el Colegio El Alba de Roldán, ya conocía esta gruta porque había participado en otra expedición en la Cueva del Agua, antes de la inmersión mortal con su pareja, Ismael, que está en la diana de una investigación del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS).

La explicación que Ismael ofreció en el tanatorio, tanto a familiares como allegados de Lorena, viene a descargar la responsabilidad de esta tragedia en la docente fallecida. Pero el Instituto Armado quiere aclarar al milímetro lo sucedido en aquella inmersión y por eso ya le ha tomado declaración a este ingeniero, de 41 años, tras realizar una minuciosa cronología de lo sucedido el 18 de enero en la Cueva del Agua.

El objetivo de la investigación del GEAS es determinar si se le pueden exigir responsabilidades a Ismael, a nivel penal, debido a que su titulación es superior a la de Lorena, como instructor de espeleobuceo, ya que esta docente se estaba iniciando en las inmersiones en grutas. Este ingeniero era el que dirigía la expedición submarina en Isla Plana que se ha saldado con una fallecida, de ahí que haya contratado los servicios del abogado Manuel Martínez para encargarse de su defensa.

"Si Ismael tiene mucha formación, ahora no puede alegar que tuvo miedo, ni que se bloqueó porque ya había entrado ahí [en la Cueva del Agua]. Él tiene formación en submarinismo y cuando se produce una eventualidad, está entrenado para eso", según reflexiona uno de los mejores amigos de Lorena, tras conocer uno de los datos clave de la investigación de la Guardia Civil: Ismael es instructor de espeleobuceo. "Él asumió ese riesgo y accedió [a la gruta], sabiendo que no puede mover uno de sus brazos".

Ismael había sufrido un accidente de tráfico en moto que le había restado movilidad en uno de sus brazos y este dato cobra especial trascendencia para los allegados de la difunta Lorena, a la vista de que la Guardia Civil investiga a su novio. Todo ello, al considerarle como instructor de buceo, el -supuesto- responsable de la inmersión que le costó la vida a esta antigua azafata de Qatar Airways, a la que todos sus seres queridos recuerdan por su gran sonrisa y su corazón inquieto.

Lorena, tras obtener su Curso de Tripulante de Cabina de Pasajeros (TCP), impartido en la Escuela Universitaria de Turismo de la UMU.

Lorena, tras obtener su Curso de Tripulante de Cabina de Pasajeros (TCP), impartido en la Escuela Universitaria de Turismo de la UMU.

"En el momento en el que él asumió que era el binomio de otra persona en una inmersión, sin tener movilidad en un brazo, y aceptó dar seguridad cuando no podía atender sus propias necesidades personales, la imprudencia es de libro", según reflexiona este buen amigo de Lorena, aún marcado por el duro entierro de esta docente en el cementerio de Alcantarilla. "Había una imprudencia porque era su pareja de buceo y si se producía una eventualidad en la Cueva del Agua, habría que ver sus tiempos de reacción". "Cuando Ismael asumió el riesgo de entrar a la cueva los dos solos, [como instructor] estaba asumiendo que en caso de darse alguna eventualidad, Lorena podría ayudarle, pero Ismael no podría auxiliarla a ella por esa discapacidad".

Este ingeniero, de 41 años, se tuvo que machacar tras sufrir un accidente en moto, acudiendo a rehabilitación y al gimnasio hasta ocho horas diarias, para recuperarse físicamente. De hecho, Ismael se enorgullecía de ello en sus redes sociales, advirtiendo de que no aceptaba "las limitaciones impuestas" porque era un "luchador incansable", con un lema: 'Lo voy a conseguir'. Por desgracia, el sábado 18 de enero no consiguió llevar a buen puerto aquella inmersión con su novia, en la conocida como la Ruta del Terror donde ya habían muerto cuatro personas.

Aquel sábado, iban los dos solos, equipados con un par de bombonas de oxígeno cada uno, antes de adentrarse a última hora de la tarde en esta gruta de Isla Plana: una de las mayores y más desconocidas de Europa, ya que cuenta con una extensión de 7.000 metros, pero solo están explorados unos 3.925. "Lorena confiaba en Ismael por su titulación [de instructor de buceo en cuevas]", subraya una amiga de la docente fallecida, con la que mantenía una larga y bonita amistad desde la adolescencia. "Ella quería tener la formación para bucear en cuevas".

Por desgracia, Lorena ya no podrá convertirse en espeleobuceadora porque encontró la muerte en una expedición con el chico con el que llevaba saliendo "unos tres meses" aproximadamente. "Ellos se conocieron en octubre a través de TinderLo que le llamó la atención a Lorena para quedar con Ismael fue su afición por el submarinismo. Al final, la relación cuajó por eso", según insiste esta amiga. "Los dos habían quedado otras veces, con unos amigos de Ismael, para salir a bucear en pareja".

Esta amiga de la fallecida también asegura que esta docente, de 37 años, especializada en la asignatura de Inglés, se conocía el interior de la gruta de Isla Plana debido a que había realizado otras inmersiones previas a la que le costó la vida el sábado 18 de enero. "Lorena fue a bucear a la Cueva del Agua en otras ocasiones, acompañada de más gente, y lo publicó en Instagram. No sé si antes ya había ido con su novio, Ismael".

La entrada a la Cueva del Agua en Isla Plana (Cartagena).

La entrada a la Cueva del Agua en Isla Plana (Cartagena). Google

Un equipo del GEAS del Cuartel de Valdemorocon la especialidad de espeleobuceo, se ha desplazado hasta Cartagena para reconstruir cronológicamente lo sucedido en la Cueva del Agua de Isla Plana, entre las ocho de la tarde y las once de la noche del sábado 18 de enero. A esa hora, Ismael alertó al 112 de que había perdido de vista a Lorena. Las pesquisas incluyen un minucioso chequeo técnico del equipo de buceo que llevaba la víctima mortal y un análisis de la información de su reloj.

"El reloj de un buzo es como la caja negra de un avión: se puede saber la hora exacta a la que se realizó la inmersión; la profundidad a la que llegó la víctima mortal; los movimientos que hizo por la cueva; si bajaba o subía rápido; la presión que soportó; el tiempo que estuvo bajo el agua...", tal y como explica una fuente del Instituto Armado. "Este gráfico de la inmersión puede aclarar la causa de la muerte".

Los buzos del GEAS quieren determinar si Lorena perdió la vida por una presunta negligencia de Ismael: un instructor de buceo en cuevas e ingeniero de profesión, de 41 años, con el que acababa de iniciar una relación sentimental. O si por el contrario, esta treintañera murió por un accidente, debido a que las aguas cristalinas de la Cueva del Agua, se enfangan con una facilidad pasmosa, convirtiéndose en un laberinto mortal, a causa de que el aleteo y las burbujas de oxígeno provocan el desprendimiento de sedimentos del techo, las paredes y el fondo marino.

Tanatorio de Jesús en Espinardo donde se celebró el velatorio de Lorena.

Tanatorio de Jesús en Espinardo donde se celebró el velatorio de Lorena. Badía

De momento, esta amiga de la infancia de Lorena tiene claro que no le gustó lo que escuchó en el Tanatorio de Jesús en Espinardo, durante el velatorio de esta docente, cuya muerte ha conmocionado a sus familiares, amigos y a toda la comunidad educativa por la excelente huella que dejó en los colegios Luis Costa, Narciso Yepes y María Maroto de Murcia, así como El Alba de Roldán.

"La situación en el tanatorio estuvo tensa con Ismael", recalca su amiga. "No daba una explicación clara a la familia de lo que había sucedido. Todos los que hablamos con él en el tanatorio, tuvimos la misma sensación. Él me dijo: 'Lorena entró en pánico, se asustó y se marchó'. Pero no me supo decir por qué tuvo miedo y a dónde fue. No sé si en una cueva te puedes ir a algún sitio". "Yo le pregunté: '¿Qué ha pasado Ismael?' Y él me contestó: 'No lo sé. Ella se asustó y se fue'. "Ismael debería haber tenido temple y los recursos para hacer frente a algún tipo de contratiempo".