Un día en Spannabis, la feria donde hasta las palomitas y el sexo llevan marihuana

El día es soleado y el patio de entrada a la feria no está cubierto, pero en el ambiente se percibe una espesa neblina. Es humo de porro, que todo lo impregna. Casi todo el mundo está fumando. Es lo normal en Spannabis, la feria del sector del cáñamo más grande del mundo, que se está celebrando este fin de semana en Cornellà (Barcelona). El olor a hierba y hachís se mezcla con el de los puestos de comida rápida, abarrotados, porque fumar marihuana da mucha hambre. Hay gente de todas las nacionalidades, escenarios con actuaciones, conferencias, performances… y todo en perfecta armonía. Ni un altercado, ni un conato de pelea. Todo fluye en Spannabis. “¿Te imaginas la Feria del Cubata? Todos a hostias” bromea uno de los visitantes.

Un rastafari en uno de los conciertos programados en Spannabis David L. Frías

Spannabis es la capital mundial de la marihuana este fin de semana. “Y eso significa que es el lugar del mundo en el que más porros se están fumando a la vez”, aventura uno de los visitantes. El año pasado llegó a los 30.000 visitantes y este año se espera batir un nuevo récord. Pero en esta feria no sólo se fuma. Podemos, desde degustar un café, un vino o unas palomitas con cannabis, hasta asistir a conferencias de médicos reivindicando la legalización con fines terapéuticos

EL ZOCO

Spannabis es un totum revolutum de 17.000 metros cuadrados en el que confluyen vendedores de semillas de marihuana, fabricantes de ropa de cáñamo, investigadores que dan conferencias médicas o empresarios de los comestibles. Dentro de las curiosidades comerciales en este ámbito podemos encontrar:

Una bebida energética (tipo Redbull) sin taurina, pero con cannabis y extracto de hoja de coca.

La primera bebida energética con extracto de semillas de cáñamo y hojas de coca David L. Frías

Chocolate que ayuda a dormir porque incluye el relajante CBD (contenido en las semillas de cáñamo) y semillas de amapola.

Las tabletas de chocolate con cannabis y semillas de amapola pueden ayudar a dormir David L. Frías

Golosinas, palomitas de maíz, magdalenas que imitan cogollos de marihuana y otros dulces con un máximo de un 0,02 de THC, que es lo que permite la ley.

Palomitas de maíz, piruletas, magdalenas o bizcochos, en la parada de dulces cannábicos David L. Frías

Vinos del Alt Empordà, hechos con las uvas típicas de la región (garnacha y cariñena) bajo la supervisión de un enólogo, pero aromatizados con extracto de Cannabis Sátiva L. y enriquecido con CBD.

El vino cannábico contiene extracto de Cannabis Sátiva L. David L. Frías

Café, aceite para cocinar, licor o pasta, elaborado todo en Italia, y enriquecido con cannabis.

Pasta italiana, cerveza, café o licor, todo con semillas de cáñamo David L. Frías

Analgésicos a base de semilla de cáñamo

Algunas paradas comercializaban analgésicos y cosméticos cannábicos David L. Frías

O aplicaciones para móvil, a las que sólo se puede acceder por invitación, que nos asesoran sobre nuestra cosecha o nos informan acerca de la actualidad de los clubes cannábicos, variedades a encontrar y similares.

EL CBD, ESE GRAN DESCONOCIDO

Pero Spannabis también es ciencia y medicina. Y es que algo está cambiando en España respecto al cannabis, la droga ilegal (la planta y sus derivados) más consumida en nuestro país. Algo está cambiando cuando, por ejemplo, lo que más interesa a los consumidores ya no sólo es obtener la planta que más coloque o la que tenga mejor sabor, sino su vertiente medicinal. Estas ferias se han convertido en foros desde los que se está tratando de hacer pedagogía sobre el cannabis.

Haciendo un resumen muy esquemático, los principales componentes que encontramos en una planta de marihuana son el THC (Tetrahidrocannabinol) y el CBD (Cannabidiol). El primero coloca; el segundo no, pero relaja y tiene propiedades terapéuticas. Y aunque en los circuitos cannábicos se ha trabajado mucho con el CBD, para el gran público aún es un gran desconocido.

"Hasta hace unos años, lo que más interesaba a los consumidores era saber el porcentaje de THC. Tener la hierba que más suba. Pero de un tiempo a esta parte, se está incrementando el protagonismo el CBD y sus efectos analgésicos y paliativos" cuenta Erik Jurado, del International Cannabis and Cannabinoids Institute. El CBD tiene propiedades sedantes, analgésicas y antiinflamatorias entre otras, según los facultativos que defienden su uso. En el CBD se están centrando la mayor parte de los estudios médicos sobre la planta. Ahora no es raro encontrar empresas que ofrezcan marihuana con una proporción de CBD de 20:1 respecto al THC. Es decir: marihuana que no coloca, pero relaja y puede ser útil para algunas dolencias.

Hay empresas que comercializa marihuana que no coloca, pero tiene propiedades sedantes David L. Frías

Dentro de este enfoque médico, el sábado se celebró una conferencia del Observatorio Español del Cannabis Medicinal; una entidad sin ánimo de lucro que se sustenta de donaciones, y en la que profesionales de la medicina tratan de investigar y demostrar las propiedades medicinales del cannabis. Ellos fueron los que redactaron la propuesta no de ley que Ciudadanos presentó en el Congreso para pedir la legalización de los cultivos con fines medicinales. 

UNA CLÍNICA CANNÁBICA

Entre los ponentes se encontraba Mariano García de Palau, un doctor barcelonés que ha sido médico de urgencias durante 40 años. Ahora ha abandonado los circuitos de medicina convencional para irse a trabaja a Kalapa Clinic, la primera clínica de Europa especializada en terapias con cannabionides. 

Hay quimioterapias que matan al paciente antes que el cáncer

García de Palau reivindicó la utilización de los cannabinoides en medicina "por ejemplo, por su baja toxicidad. Nadie ha muerto por su utilización. Sus efectos secundarios son previsibles y reversibles". Desde el Observatorio quisieron hacer hincapié en esos efectos secundarios de los medicamentos convencionales: "Hay quimioterapias que matan al paciente antes que el cáncer", contó García de Palau. Carola Pérez, la presidenta del observatorio, también resaltó la base científica de todas las investigaciones de la entidad, desmarcándose de "naturópatas e iluminados que van por ahí recetando pinchar aceite de cannabis en los tumores".

MARÍA Y EL SEXO

Dentro de este ciclo de conferencias, una de las que más expectación levantó fue la del viernes, titulada 'Sexo y Cannabis'. A priori, el imaginario popular no considera a la marihuana como la droga más propicia para practicar sexo, frente a otras sustancias más populares como la cocaína o el MDMA. Para romper diversos mitos en torno a este asunto habló Amarna Miller. Nadie mejor que alguien que se define como actriz porno y psiconauta (persona que experimenta con drogas) para aunar ambos temas. La Miller estuvo acompañada de la escritora Marta Trigo y la periodista Virginia Montañés.

En esa charla se habló de que el cannabis, en dosis bajas, puede, entre otros, "incrementar la libido, el placer y el clímax sexual, la sensación táctil y la longitud de los orgasmos", advirtiendo en cambio de que un uso excesivo puede incurrir en una disminución del deseo o incapacidad para consumar el acto". Amarna contó que, aunque la mayor parte de las películas porno americanas se ruedan en California, que es un estado que ha legalizado incluso el uso recreativo de la marihuana, "en los rodajes está prohibido, por contrato, consumir cualquier tipo de sustancias estupefacientes. Ni siquiera alcohol", reveló.

La actriz porno Amarna Miller participó en una charla sobre Sexo y Cannabis, moderada por la periodista Virginia Montañés David L. Frías

Así pues, el cannabis sirve para hacer golosinas, elaborar pasta italiana, fabricar ropa, crear medicamentos y estimular el deseo sexual. Pero... ¿y lo de fumar, qué? Los consumidores de marihuana también reivindican su legalización por uso recreativo. La gente fuma. España fuma. Somos el país de Europa en el que más cannabis se incauta (en plantas de marihuana o en resina, es decir, hachís), una droga menos tóxica y adictiva que, por ejemplo el alcohol, legal y fiscalizado por los gobiernos. "Y mirar para otro lado y sancionar no va a hacer que la cosa cambie", coinciden varios propietarios de clubes cannábicos en Barcelona, que insisten en "la gran cantidad de dinero que podría aportar la industria cannábica a las arcas del Estado". 

Uno de los modelos es Portugal. Nuestros vecinos ya han despenalizado el consumo. O California, donde se ha legalizado el uso médico y recreativo. La actriz Amarna Miller, que reside allí, recuerda que "eso no ha significado un aumento del abuso, pero sí eliminar el estigma social". Contra ese estigma, además de contra la legalidad, pelean miles de españoles: por la libertad de poder fumarse un porro como el que se bebe una cerveza, sin que nadie se escandalice.