Raquel, la camarera ejemplar asesinada junto a su hijo por su marido

Se llamaba Raquel López Airas, tenía 45 años, era camarera y natural de Guipúzcoa. Vivía en Alcobendas con su marido, Markel Malik Jdid, y su hijo de 11 años. Residían en el 12 de la calle 2 de mayo. Y precisamente hoy, día 2 de mayo, Markel los ha matado a los dos. A ella y al pequeño. Esta mañana los ha apuñalado después de una discusión. Luego ha avisado por teléfono a un familiar de lo que había hecho y ha huido. Aún no lo han capturado. 

Raquel López es la víctima número 25 de la violencia machista en España en lo que llevamos de año. Un vecino dio la voz de alarma en torno a las diez y cuarto de la mañana. Llevaba escuchando ruidos, gritos y golpes en el piso de sus vecinos desde las 8 de la mañana. Una pelea fortísima. Después, el silencio. Fue entonces cuando decidió avisar a la policía por precaución. Y es que no hace ni dos meses que, a doscientos metros del escenario del crimen, degollaron a otra mujer.

Sus vecinos de Alcobendas definen a Raquel y Markel Malik como una pareja bien avenida

A las diez y media de la mañana, efectivos de la Policía Nacional tiraban abajo la puerta del piso y encontraban los cuerpos ensangrentados de Raquel y su hijo. Los dos tenían numerosas heridas de arma blanca. Los sanitarios sólo pudieron certificar ambas muertes. Ni rastro de Markel Malik.

A ojos de los vecinos, se trataba de una pareja muy bien avenida. Raquel era camarera en un bar de San Sebastián de los Reyes. Markel Malik era marroquí, pero tenía la nacionalidad española. Él residía en Francia temporalmente por cuestiones laborales. Era carpintero y periódicamente le llamaban para trabajar en el país vecino. Había vuelto a Madrid hacía poco más de una semana, según cuentan conocidos de la víctima.

VIVIR PARA TRABAJAR

Llevaban juntos casi 12 años. Antes vivían en San Sebastián de los Reyes, pero hace 4 decidieron mudarse a Alcobendas. El piso estaba alquilado a nombre de ella, que era la que tenía una situación laboral más estable. Cuentan los que la conocieron que era una mujer que vivía por y para trabajar. “Estaba muy delgada de lo mucho que trabajaba. Se pasaba el día en el bar. Siempre decía que lo primero era pagar deudas, y que si sobraba dinero ya nos tomaríamos algo”, cuenta un conocido del barrio. Su trato, según confirman en el barrio, era siempre correcto y cordial. “No era una persona conflictiva, pero el marido tampoco y mira...”, confiesa una vecina que ha podido salir de la zona acordonada por la policía. De él cuenta poco “porque pasaba mucho tiempo fuera”.

Fruto de esa relación había nacido, hace 11 años, el único hijo en común de la pareja. El niño se quedaba viviendo con su madre en Alcobendas cuando su padre partía hacia Francia. Pasaban por una familia perfecta. No había denuncias ni órdenes de alejamiento interpuestas. En redes sociales hacían gala de su buena relación y en casi todas las fotos que ambos colgaban aparecían los 3. Según la delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, el hombre, al que espera que "detengan cuanto antes para acabar con esta lacra", tiene "antecedentes penales graves". 

La familia al completo de vacaciones. No había denuncias previas por malos tratos ni órdenes de alejamiento

Hoy, Raquel (o Rakel, como a ella le gustaba escribirlo) tenía el día libre. Pero a primera hora de la mañana se desencadenó una violenta discusión sin que se conozcan los motivos. Al parecer, Markel Malik cogió un cuchillo de grandes dimensiones y los apuñaló a los dos. Posteriormente llamó a un familiar suyo para confesarle el doble crimen. Tras colgar, se esfumó.

LA ANTERIOR ASESINADA, A 200 METROS

La calle ha estado acordonada y con el tráfico restringido durante toda la mañana. Efectivos de la Policía Nacional y de la Local de Alcobendas hacían guardia ante la puerta para evitar que decenas de vecinos, periodistas y curiosos accediesen al inmueble. Mientras, los residentes del mismo edificio miraban la escena desde sus balcones.

El hijo de la pareja, de 11 años de edad, también ha sido asesinado, presuntamente por su padre

Raquel López es la vigesimoquinta mujer asesinada por la violencia machista en lo que llevamos de 2017. Los vecinos de la zona no dan crédito. Alcobendas es un municipio de 113.000 habitantes, y en lo que llevamos de año se han registrado dos asesinatos machistas en un tramo de 200 metros. El primero tuvo lugar hace exactamente 2 meses. Fue el 2 de marzo, cuando la policía encontró el cuerpo de una mujer degollada en su domicilio de la avenida de España. El edificio donde la asesinaron hace esquina con la calle en la que hoy han matado a Raquel. Aquella mujer tenía 45 años, como Raquel. Vivía con un perro de raza yorkshire al que el asesino dejó con vida. Hoy, el hijo de Raquel y Markel Malik no ha tenido tanta suerte y su propio padre le ha quitado la vida.

Raquel López Airas, de 45 años, es la vigésimo cuarta mujer asesinada por un hombre desde que comenzó el año. Se suma a la lista de víctimas mortales de la violencia machista en España en 2017 en la que también están Matilde de Castro, de 44 años; una mujer de 25 años cuyo nombre se desconoce; Blanca Esther Marqués, de 48; Toñi García Abad, de 33 años; María de los Ángeles, de 77 años; Virginia Ferradás, de 55 años; Cristina Martín Tesorero, de 38 años; Ana Belén y Ana, madre e hija de 46 y 18 años; Carmen González Ropero, de 79 años; J.D.L.M., de 40 años (solo se conocen las iniciales); Laura Nieto Navajas, de 26 años; María José Mateo García, de 51 años; Leidy Yuliana Díaz Alvarado, de 34 años; Margaret Stenning, de 79; una mujer de 91 años cuyo nombre se desconoce; Mariló Correa Pérez, de 47 años; Gloria Amparo Vásquez, de 48 años; Erika Lorena Bonilla Almendárez, de 32 años; Yurena López Henríquez, de 23 años; María Victoria Zanardi Maffiotte, de 44;  Ana María Rosado, de 42 años, así como Andra Violeta Nitu, de 24 años.

En total, la serie 'La vida de las víctimas' contabiliza 24 mujeres asesinadas. EL ESPAÑOL está relatando la vida de cada una de estas víctimas de un problema sistémico que entre 2003 y 2016 ya cuenta con 872 asesinadas por sus parejas o exparejas.