Vámonos, Bárbara, considerada por muchos como "la primera película feminista del cine español", acaba de aterrizar en el catálogo de FlixOlé. Está dirigida por Cecilia Bartolomé, una de las pioneras de la historia del cine en España y también una de las primeras directoras que apostó por romper con los cánones impuestos a través de la pantalla y durante la época de la Transición.
Cecilia Bartolomé, ganadora del premio Feroz de honor en 2022, pilló la libertad de expresión a deseo y después de tantos años viendo cómo sus películas eran censuradas y metidas en un cajón, se animó a dirigir este largometraje, que ya forma parte de la colección Directoras de FlixOlé.
En esta recopilación se incluyen tanto los primeros largometrajes filmados por nombres femeninos en nuestro país como otras obras de autoras contemporáneas, destacando en especial este título, que simboliza el movimiento hacia la independencia personal y sexual de las mujeres que se desarrolló en España con la llegada de la democracia.
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Planteada como remake
El propio productor de la película Alfredo Matas quiso desde el primer momento que su mujer Amparo Soler Leal destacara como actriz principal en una versión de Alicia ya no vive aquí (1974), dirigida por Martin Scorsese. Su intención era animar a su hija, que por aquel entonces acababa de separarse.
Sin embargo, la idea de Cecilia Bartolomé era más bien diferente y optó por usar esto como excusa para plasmar sus propias inquietudes, como el hecho de que la separación de la hija de Alfredo Matas que no pudiera terminar en divorcio. Y también que las ganas de cambio y progreso que tenía la sociedad no incluyera en la evolución un futuro mejor para las mujeres. El resultado fue un relato en el que las mujeres contaban su propia historia de independencia en todos los niveles.
Las mujeres protagonizan y cuentan sus historias
En Vámonos, Bárbara la gran protagonista es Ana, una mujer de mediana edad que comparte una relación fría y distante con su marido y decide separarse, con todas las consecuencias. Por eso, se atreve a marcharse de vacaciones con su hija Bárbara de 12 años, con el propósito de dejar atrás el pasado y llevar una vida más libre y sin ataduras.
Durante la trama principal de la película, los espectadores verán cómo las mujeres comenzaron a darse cuenta de que el papel que desempeñaban en la sociedad no era el que se merecían, y también cómo intentaron cambiarlo para no tener que depender más de nadie.
Cecilia Bartolomé utiliza la idea de remake para dejar que la heroína de su película se alce contra las convenciones que habían sido impuestas por una sociedad franquista, por un cine académico y por una democracia recién nacida que aún mantenía el rol masculino como el único y principal. De este modo, la directora utiliza a la protagonista para que abandere la lucha por la liberación de la mujer a través de la pantalla.
Una figura clave en la Transición
La primera película que estrenó Cecilia Bartolomé sin tener que esquivar las limitaciones de la censura fue Vámonos, Bárbara y es en ella donde también ejemplifica la cotidiana lucha que tuvieron que llevar a cabo las mujeres dentro de la propia ruptura que ya se estaba llevando a cabo en la Transición desde la calle y desde dentro de las instituciones.
Cosas tan simples como hace apenas unos años y cuando por fin la ley les concedió esta libertad, tuvo que hacerlo modificando un Código Civil que la última vez que les tuvo en cuenta para un avance fue en 1889.
Esta es la razón principal por la que se necesitaban películas como Vámonos, Bárbara en el cine español de aquella época, para conocer no sólo la perspectiva femenina de la Transición, sino también para tomar este prisma apenas conocido como punto de partida para seguir luchando en favor de que las mujeres no vuelvan a quedar relegadas a un segundo plano.
Es necesario pensar en el pasado para entender el presente y el largo camino que iniciaron mujeres como Cecilia Bartolomé a través de su cine para que se sigan conquistando más derechos y libertades.
Otras películas imprescindibles
Además del estreno de ¡Vámonos, Bárbara!, el especial Directoras de FlixOlé incorpora dos obras cumbre en la filmografía de Isabel Coixet como Mi vida sin mí (2003) y La vida secreta de las palabras (2005). Ambos títulos se suman a otros de Coixet que ya están disponibles en la plataforma: Demasiado viejo para morir joven (1989), Cosas que nunca te dije (1996), A los que aman (1998) y Mi otro yo (2013).
También se incluirán en la lista algunas películas de Icíar Bollaín como Flores de otro mundo (1999), Te doy mis ojos (2003) o También la lluvia (2010), entre otras; de Gracia Querejeta, como Una estación de paso (1992), Héctor (2004), Siete mesas de billar francés (2007); y de otras directoras como María Ripoll, Chus Gutiérrez y Dunia Ayaso.
Completan el especial otras películas realizadas por mujeres, desde el primer largometraje sonoro en cuyos créditos aparecía una directora, El gato montés (1935), de Rosario Pi, así como los firmados por Margarita Alexandre, junto a Rafael Mª Torrecilla, La ciudad perdida y La gata (1955 y 1956); hasta producciones más recientes como El alquimista impaciente (de Patricia Ferreira, 2002), Marsella (de Belén Macías, 2014), Los amores cobardes (de Carmen Blanco, 2017), Matar a Jesús (de Laura Mora, 2017) y Ana de día (de Andrea Jaurrieta, 2018).