La noche del pasado lunes la familia de Kirstie Alley informaba de la muerte de la protagonista de Mira quién habla y Cheers a los 71 años. Con la noticia del fallecimiento de la comediante se iba un pedazo de la historia de la televisión estadounidense. La actriz siempre será recordada por su interpretación como Rebecca Howe en la legendaria sitcom de la NBC, pero su paso por la pequeña pantalla va mucho más allá de Cheers.
Este año se cumplían 40 años de la primera gran oportunidad profesional de la actriz nacida en Wichita (Kansas) el 12 de enero de 1951: la Teniente Saavik de Star Trek II: La ira de Khan. En 1983 legó su primer papel protagonista en televisión con Mascarada, una serie de espías que nació con la intención de quedarse a medio camino de dos fenómenos de la televisión como Misión imposible y Vacaciones en el mar. Alley interpretaba a una agente secreto. La producción de ABC fue cancelada después de la emisión de su primera temporada.
En 1985 y 1986 se estrenó en el terreno de las miniseries con todo un clásico como Norte y Sur, la historia de dos amigos (uno pertenece a una acomodada familia del Norte y el otro a una familia de terratenientes sureños con esclavos a su servicio) cuyos caminos se separan cuando la Guerra de Secesión se desata en Estados Unidos. Alley interpretó a Virgilia Hazard, la hermana del personaje que interpretaba James Read en la adaptación de la trilogía homónima de John Jakes.
La carrera de la actriz cambió para siempre cuando NBC tomó la decisión de sustituir en Cheers el hueco dejado por Shelley Long, la actriz que decidió abandonar la famosa sitcom en su mayor momento de popularidad. Alley interpretó a Rebecca Howe, una gerente de un bar que aspira a casarse con un hombre millonario de Boston, desde 1987 a 1993. En 1991 la intérprete vivió su gran momento de gloria cuando recibió en el mismo año el Emmy y el Globo de Oro, los dos premios más importantes de la industria de la televisión. Durante sus años en Cheers la actriz protagonizó la primera de las tres películas de Mira quién habla, el mayor éxito de su carrera en la gran pantalla.
No pasó demasiado tiempo desde el final de la comedia hasta que Alley decidió volver a la televisión, aunque lo hizo con un personaje muy diferente. En Un cariño muy especial interpretó a Sally, una madre soltera que ha estado criando sola a su hijo autista, David, desde que su marido les abandonó. La vida de los dos queda en el aire cuando un trabajador social descubre que Sally ha sido esquiva con las autoridades para que no se lleven a su hijo una institución. La actriz recibió el segundo Emmy de su carrera gracias a un cambio de registro radical y una de las pocas oportunidades que Hollywood dio a Alley de lucirse en historias más dramáticas.
A pesar de que Friends era una de las series más populares de los 90, sus creadores David Crane y Marta Kauffman decidieron diversificar sus proyectos y crear en 1997 una sitcom alrededor de la figura de Ronnie Chase, fundadora de una importante empresa de lencería y editora de libros sobre la felicidad sentimental que lo tiene todo en su vida: dinero, éxito, atractivo... y un marido infiel al que no puede aguantar durante más tiempo. NBC emitió El secreto de Verónica hasta el año 2000, cuando la producción fue cancelada después de 67 episodios y cuatro temporadas. Alley fue nominada al Emmy y el Globo de Oro por la primera entrega de la serie, en las que fueron las últimas candidaturas importantes de su carrera.
Antes incluso de que Lisa Kudrow y HBO estrenaran la metacomedia The Comeback, Alley fue una adelantada a su tiempo con el estreno de Fat Actress, un falso reality escrito por ella misma inspirado en su propia experiencia como actriz que no cumplía los estándares de delgadez de Hollywood. El reclamo de la actriz hizo que John Travolta, Mayim Bialik, Larry King, Carmen Electra y Leah Remini, entre otras, participaran en la serie interpretándose a sí mismos, pero Showtime canceló el proyecto experimental después de emitir su primera temporada.
En 2013 TVLand estrenó Kirstie, otra comedia en la que Alley interpretaba a otra versión de sí misma. En esta ocasión era Maddie Banks, una estrella de Broadway que tenía mejor suerte en los escenarios que en su vida personal. La serie fue cancelada al final de la emisión de su primera temporada.
El último papel importante para la comediante llegaría en Scream Queens (disponible en Disney+), la sátira de Ryan Murphy en la que interpretó a la enfermera Ingrid Hoffel. Alley compartió muchas escenas en la serie de Fox con otra leyenda como Jamie Lee Curtis. “Acabo de escuchar la triste noticia de que Kirstie Alley ha muerto. Fue un gran alivio cómico en Scream Queens y una hermosa mamá oso en la vida real (...) No estábamos de acuerdo sobre algunas cosas, pero teníamos un respeto mutuo y una conexión. Tristes noticias”. Descanse en paz.