Han pasado 30 días y aún cuesta creer que Matthew Perry nos haya dicho adiós. Durante estas cuatro semanas, el actor ha sido recordado con cariño y profunda tristeza por sus amigos de Friends, por los fans y por todos aquellos que tuvieron la suerte de compartir escenario, conocerle y ser testigos de primera mano de su generosidad y su buen corazón.
Conmovedores recuerdos como el de Hank Azaria, que compartió emocionado que Perry fue quien le llevó por primera vez a alcohólicos anónimos, y que gracias a él hoy puede decir que lleva años sobrio; o el de Sarah Paulson que reveló que le ayudó a practicar su escena para el casting de Studio 60 en el aparcamiento, son solo una muestra de la gran huella que dejó su forma de ser y tratar a los demás.
También con su talento. Martha Kauffman y David Crane, creadores de Friends, han explicado que el proceso de casting para el personaje de Chandler Bing fue complicado porque los diálogos "eran literalmente chistes, pero ninguno de los actores que pasaban por las pruebas conseguía ser gracioso. Matthew leyó el diálogo y Chandler cobró vida inmediatamente. Supimos que era el único que podría interpretarlo".
Como espectadores fuimos testigos de esa capacidad durante 236 episodios. Tenía un dominio del tiempo y el ritmo únicos para sacarnos una carcajada siempre. "Podías tener una línea recta de diálogo y cambiarle la forma como quisieras", dijo David Schwimmer en su despedida personal.
Hacer reír era un talento y una necesidad para él. "Como él mismo decía, si no oía "reír" pensaba que iba a morir. Su vida dependía literalmente de ello. Y vaya si lo consiguió. Nos hizo reír a todos. Y reír mucho", dijo emocionada Jennifer Aniston, que compartió en su adiós un mensaje que le había enviado Perry, en el que le decía que haberla hecho reír le había alegrado el día.
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"Gracias por hacerme reír tanto con lo que decías, que me dolían los músculos y se me saltaban las lágrimas todos los días", dijo Lisa Kudrow en su cariñosa publicación en Instagram.
Además de divertido era generoso y le regalaba líneas ingeniosas a sus compañeros, como este momento que compartió Courteney Cox de detrás de cámaras de uno de los momentos más icónicos de Monica y Chandler, uno que cambió la serie para siempre y la hizo aún mejor.
De todas las palabras que hemos leído durante estas semanas, las que escribieron sus cinco amigos en la serie han sido las que más han tocado el corazón de los fans, porque sabemos que vivieron juntos los mejores y también algunos de los peores momentos de la vida de Matthew Perry, cuya lucha con la adicción a las drogas fue un libro abierto.
"Siempre sonreiré cuando piense en ti y nunca te olvidaré. Nunca. Extiende tus alas y vuela, hermano, que por fin eres libre", le dijo Matt LeBlanc. "Sé que ahora estás completamente en paz y libre de cualquier dolor", escribió Aniston. Pero de entre todas las menciones a su lucha, la más emocionante fue la de Kudrow, que entre su lista de cosas por la que le daba gracias a su amigo ausente dijo: "Gracias por aparecer en el trabajo cuando no estabas bien y ser completamente brillante".
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Al margen de los bruscos cambios de peso que el espectador veía en Perry, y que él describe en sus memorias como "Puedes rastrear la trayectoria de mi adicción si mides mi peso de una temporada a otra", al verle interpretando a su personaje ninguno de nosotros podía imaginar la lucha que estaba manteniendo en la vida real porque siempre fue igual de rápido, ingenioso, vulnerable y divertido.
Ya se han hecho incontables listas de los mejores momentos de Chandler Bing, en solitario con cada personaje o sus mejores episodios, pero hoy para rendirle homenaje hemos recuperado este vídeo en el que puede redescubrirse su enorme talento para la comedia, su profesionalidad, su generosidad y su carisma.
Un vídeo que al estar sin editar tiene algo de mágico. Es material crudo de 30 minutos en el que junto a Matt LeBlanc, Perry graba decenas de líneas que les van diciendo al momento para montar futuras promos de Friends en NBC.
Un vídeo que despertará en vosotros sentimientos combinados de nostalgia, tristeza y melancolía, que rápidamente, y sin que os deis cuenta se transformarán en risas. Porque a Matthew Perry le gustaba hacer reír. "Y vaya si lo consiguió", como dijo Aniston. Siempre será eterno en la memoria de todos los fans de Friends.