Los premios y la crítica la ignoran, pero eso no ha impedido que Yellowstone se convierta en la franquicia más exitosa de la televisión de Estados Unidos. Al menos en un amplio sector, el de los millones de espectadores que con la serie protagonizada por Kevin Costner se sintieron representados por un Hollywood que no habla de ellos.
Estrenada en 2018, esta saga en clave de western contemporáneo creada por Taylor Sheridan, sigue la vida de la poderosa familia Dutton, que controla desde hace seis generaciones el mayor rancho de ganado de Estados Unidos.
En medio de alianzas y lealtades que siempre están cambiando, de asesinatos sin resolver, heridas abiertas y un respeto ganado a base de esfuerzo, el rancho de los Dutton está en constante conflicto con sus fronteras: un pueblo en crecimiento, una reserva indígena y el primer parque nacional del país.
La 'Succession' de la América profunda
A simple vista, la serie de Paramount (que puede verse en España en SkyShowtime) y Succession no podrían ser más diferentes. El drama de HBO está ambientado en el reducido círculo del 1% de la superélite, y sus personajes viajen en jets privados y lujosos yates entre Manhattan y otras grandes capitales cosmopolitas.
Yellowstone, en cambio, se desarrolla en un rancho de Montana y sus protagonistas se mueven a menudo a caballo entre las llanuras del nuevo oeste americano. La serie de la familia Roy acaparó todos los premios mientras estuvo en emisión y es considerada un drama de prestigio. La de los Dutton ha sido ignorada por los Emmy sistemáticamente y es la opción popular de un público con un estilo de vida conservador.
Succession se mueve más en el terreno satírico y es cruel con sus personajes. Yellowstone, por su parte, es un drama de acción más serio y muy violento, que justifica las atrocidades que cometen sus protagonistas porque lo hacen al servicio de los valores americanos de toda la vida.
Sin embargo, y a pesar de sus varias diferencias, también son muy similares.
Además de ser entretenidas, adictivas y llenas de giros, intrigas, traiciones y conspiraciones, ambas tienen un patriarca poderoso que preside un imperio familiar, y se enfrentan a la crisis de su legado y a la mortalidad, mientras sus hijos los rodean como buitres, y al que le gustan que las cosas se hagan a su manera.
También tienen en su centro una familia disfuncional formada por cuatro hijos que buscan desesperadamente la aprobación del padre: tres varones y una única hija.
Otra representación
Laurel Weir, jefa de investigación de Comedy Central, Paramount Network y TV Land, afirma que una de las claves del éxito de Yellowstone es que ofrece a la audiencia "una visión de la vida de los estadounidenses que no suelen ser representados en televisión".
Con una narrativa centrada en un poderoso patriarca ganadero defendiendo su territorio contra el gobierno y las élites urbanas, Sheridan ha apelado con sus series a las audiencias de los "estados rojos", donde el Partido Republicano de Estados Unidos es dominante. Territorios que son ampliamente conocidos por su conservadurismo y que, por tanto, no podrían interesar menos al resto de Hollywood.
Temas como el aburguesamiento del Oeste y su relación con los nativos americanos, la ganadería o la propiedad de la tierra, la familia, las tradiciones y la desconfianza hacia las autoridades encajan con los valores de muchos votantes de Trump, que llevan décadas sintiéndose marginados por la representación mediática dominante.
La serie se sustenta en una ideología que apela a una identidad nacional que se siente amenazada: el hombre blanco conservador al que el que los medios solo recuerdan cuando quieren mofarse o criticar a los votantes de Trump. Apelar a ese nicho olvidado y descuidado por el resto de la ficción es una de las claves de su éxito.
Y aunque Sheridan podría limitarse a glorificar un estilo de vida en decadencia (y lo hace), también aprovecha para hablar de corrupción, de racismo sistémico y de la historia violenta y explotadora de Estados Unidos, mientras pone en su centro personajes femeninos potentes y con agencia. Yellowstone no es propaganda populista y quienes estén interesados en analizar las tendencias en la ficción no deberían ignorarla.
La temporada 5B de 'Yellowstone' se estrena el 14 de noviembre en SkyShowtime.