El estreno de La reina de España, la última película de Fernando Trueba -y secuela de uno de sus mayores éxitos, La niña de tus ojos- estuvo rodeado de polémica. Por redes sociales y mensajes de whatsapp se empezó a promover un boicot en contra del filme debido a las declaraciones del director al recoger el Premio Nacional de Cinematografía en septiembre del año pasado. “Nunca me he sentido español, ni cinco minutos de mi vida”, aseguró Trueba en aquel discurso sin prever lo que se le venía encima. La gente se indignó y se formó un circo alrededor de un premio que suele pasar desapercibido.
El director matizó después sus palabras, pero ya era demasiado tarde. La gente pidió que devolviera el premio y el dinero, e incluso meses después, cuando fue homenajeado con una Espiga de Honor en la SEMINCI, se recogieron firmas para que no se le entregara. Ha pasado más de un año desde entonces, pero parece que el boicot al director ha dado resultado. La reina de España se ha estrellado en la taquilla. Era el estreno más importante de la semana y llegaba a más cines que la competencia, 340. Según los primeros datos publicados por ComsCore ha recaudado 0,4 millones y no ha podido superar el quinto lugar del top ten. Esa cifra tan escasa supone un promedio de 1.176 euros por cine.
Para comparar sólo hay que ver el comportamiento de otro estreno, el de Aliados, la película protagonizada por Marion Cotillard y Brad Pitt. Se estrenó en cinco cines menos, 335, y sin embargo ha llegado hasta los 1,1 millones de euros. Esto significa 3.283 euros de media, casi el triple que la película española. Aun así el filme de Robert Zemeckis no llega al primer puesto de la taquilla, que sigue en poder de Animales fantásticos y donde encontrarlos con 2,2 millones de euros.
El boicot al director español se hizo viral gracias a una imagen compartida por la gente en la que se incluían fotografías de Trueba y el cartel de la película. “Boicoteemos esta película… No vayas a verla al cine...Sólo quiere a España por las subvenciones… ¡Pásalo!”, decía. La campaña de desprestigio ha cumplido su propósito, ya que pocas personas han pasado por taquilla para ver el filme, que difícilmente superará el millón y medio de euros para un presupuesto de 11 millones de euros, según publicó El blog del cine español.
Era el estreno más importante de la semana y llegaba al mayor número de cines de toda la competencia, 340. Según los primeros datos sólo ha recaudado 0,4 millones de euros
Alergia a la polémica
Es la segunda ocasión este año en la que una película española ve afectada su taquilla por una polémica. En marzo llegaba a las salas Julieta, la película número 20 de Pedro Almodóvar. El director es un seguro de vida en los cines, y hasta sus títulos menores, como Los amantes pasajeros fueron capaces de amasar 1,9 millones de euros en su primer fin de semana y más de cinco al finalizar su carrera.
Julieta venía precedida por unas críticas inmejorables. Toda la prensa española coincidía en que el manchego regresaba en plena forma, pero una semana antes salió a la luz el nombre del director y de su hermano Agustín en los Papeles de Panamá. Ambos habían tenido una sociedad offshore a principios de los años 90. La gente comenzó a moverse por redes sociales pidiendo que nadie fuera a ver la película y el resultado se hizo notar: 600.000 euros en 183 cines, y una media de 3.500 euros. El peor dato de los últimos títulos de Almodóvar, pero un promedio tres veces mejor que el de La reina de España. Hasta su total fue superior.
El fracaso de la película de Trueba es más significativo, ya que su estreno venía de la mano de Atresmedia, que había hecho una gran campaña promocional, una premiere importante y sus actores se habían paseado por los programas de la cadena. Entre todos no han podido evitar uno de los mayores batacazos del año.