Manolo Solo ha conseguido el Goya al Mejor actor de reparto por aparecer en una sola escena de Tarde para la ira, pero qué escena. Uno de esos momentos que paran el corazón y con una interpretación de la que todos hablan. Manolo Solo se lanza al vacío con Raúl Arévalo y por ello la Academia le ha reconocido con este merecido premio.
Era la segunda nominación para el actor tras la conseguida el año pasado por B, la película, y esta vez sí que se ha llevado el gato al agua. La confirmación de uno de los mejores secundarios de nuestro cine, que trabaja con los mejores y siempre deja muestras de su talento.
Habrá que ver si este premio, como el recordó en los Feroz donde también ganó, sirven para que muchos periodistas dejen de llamarle Manolo Soto, en vez de Manolo Solo.