Los Presupuestos Generales del Estado han llegado con la noticia más esperada en la industria del cine: la bajada del IVA de las entradas del 21% al 10%. El Gobierno cumple con su parte de palabra, ya que prometió el año pasado que por fin bajaría el tipo impositivo a las salas tras haberles castigado con un año más que al resto de sectores culturales con el aumento aprobado en septiembre de 2012. Es la única noticia buena, ya que las ayudas para la producción siguen congeladas, y además es una noticia que beneficia sólo a una parte de los actores fundamentales en la distribución de cine en España.
La bajada del IVA se aplicará sólo a las entradas de cine, mientras que las plataformas online que operan y tributan en España seguirán con el impuesto más elevado de la Unión Europea. Si se aprueban los presupuestos, ver una película en una sala tendrá un 10% de IVA, pero verla en el sofá de tu casa desde un videoclub online legal tendrá un 21%. Este castigo es el mismo que sufre el libro electrónico, que sigue perjudicado y sin tener el mismo impuesto que el formato físico.
Esta situación se debe a la cerrazón de los países europeos de arreglar el problema. Parecía que el caso del libro se iba a solucionar en 2017, pero la oposición de República Checa lastró las negociaciones. En el caso de las plataformas online este debate ni siquiera ha hecho ruido. Ni España ni ningún otro país ha hecho el esfuerzo de promover un acuerdo que permita que todas las películas tengan el mismo IVA independientemente de la plataforma en la que se disfruten.
Uno de los principales defensores del cine online y de lo injusto de este impuesto es Juan Carlos Tous, CEO y fundador de Filmin, que no entiende que ellos sigan penados con el 21%. “Ya nos pasó la otra vez, cuando Filmin empezó en el mundo del cine hace diez años, el IVA del cine era del 10%, pero a nosotros nos obligaron a pagar un 18%, cuando ya entonces pedíamos el mismo que el cine, pero nos dijeron que lo nuestro era comercio electrónico. A quien tiene que grabar el IVA es al contenido, y no al continente. Qué lo mismo da que un libro sea en papel o en formato electrónico, y con el cine pasa lo mismo”, cuenta a EL ESPAÑOL.
Montoro ha dejado claro que la bajada es a las entradas de cine, y Juan Carlos Tous subraya la importancia de la palabra entradas, porque “las facturas del exhibidor seguirán teniendo un 21% de IVA, igual que el productor, y toda la cadena tendrá un 21% menos la entrada”. “¿Y por qué por ver una película en una sala tengo que pagar el 10% pero en mi casa tengo que pagar el 21%?, se tendría que luchar para que la bajada del IVA sea de forma generalizada”, critica. Es consciente que el problema viene de Europa, y sabe que hay esas discusiones, pero mientras tanto ellos siguen penalizados con el impuesto y tributando en España, mientras que sus principales competidores como Netflix continúan con su sede en Holanda y beneficiándose de sus políticas fiscales.
¿Por qué por ver una película en una sala tengo que pagar el 10% pero en mi casa tengo que pagar el 21%?, se tendría que luchar para que la bajada del IVA sea generalizada
Tous sabe que hasta que no cambie la directiva europea no hay nada que hacer, pero él no deja de intentarlo y para ello “lo denuncio en todos los foros que puedo, en cualquier estamento y ante cualquier político que me escuche”.
Para Tous el 21% de las plataformas online es la muestra de que hay mucho por hacer. De momento Netflix y compañía no sólo no tributan aquí, sino que “no tienen obligación de invertir en cine europeo”. La Ley Audiovisual obliga a cualquier operador (antes sólo eran las cadenas de televisión) a dedicar un 5% de su facturación en la producción de cine español y europeo y series. Filmin ya lo hace al ser considerada como operador, pero su competencia no se rige por las mismas leyes. “Nosotros, que somos pequeñitos, cuando empezamos a sacar la cabeza, nos cae la obligación del 5%, con la que estoy muy a favor, pero creo que primero se tendrían que haber dado las herramientas para que todo el mundo lo hiciese, y no sólo UTECA y las españolas de Video on Demand, sino todas.
Nada va a cambiar respecto a nosotros, se nos sigue considerando comercio electrónico y se le baja el IVA a las entradas de cine, pero no al cine. Nosotros seguimos al 21%
Desde Filmin se muestran pesimistas respecto a un posible cambio, y creen que “nada va a cambiar respecto a nosotros, se nos sigue considerando comercio electrónico y se le baja el IVA a las entradas de cine, pero no al cine, porque nosotros seguimos al 21%, nunca hablan del propio contenido, del cine o del teatro, sólo de las entradas”. Un nuevo campo de pelea en el que se encuentran solos, ya que el resto de videoclubes online se rigen por otras normas que ellos ni siquiera tienen.