Publicada
Actualizada
  • 'No hay paz bajo los olivos' (1950)

    Su primer trabajo cinematográfico fue a las órdenes del gran Giuseppe De Santis, pero pronto todo el cine italiano se enamoró de su presencia y de su rostro, del que decían que tenía el mejor primer plano de la historia.

  • 'Cronica de un amor' (1950)

    Antonioni fue otro de los grandes realizadores italianos que le regaló grandes papeles. El primero en sus comienzos con este filme en el que es el centro de un triángulo amoroso y la mujer que hace que el protagonista se vuelva loco de celos y decida espiarla.

  • 'Muerte de un ciclista' (1955)

    Una obra maestra del cine español. Juan Antonio Bardem realiza una radiografía sin contemplaciones de la burguesía en tiempos del franquismo en la que Bosé se comía cada escena.

  • 'Así es la Aurora' (1956)

    Cuando Luis Buñuel volvió a Europa después de su época mexicana también contó con Lucía Bosé para esta adaptación de la novela de Emmanuel Roblés.

  • 'El testamento de Orfeo' (1960)

    No sólo fueron los grandes autores italianos los que querían a Lucía Bosé, el gran Jean Cocteau la fichó para una de sus obras maestras. Esta, además, pasaría a la historia por ser la única vez que Picasso salió en una película interpretando a un personaje.

  • 'Bajo el signo del escorpión' (1969)

    Los grandísimos hermanos Taviani recurrieron a ella para uno de sus filmes más inclasificables, una parábola ambientada en un lugar primitivo sin especificar que servía como metáfora política. Una rareza que contó con su magnética presencia.

  • 'Satiricón' (1969)

    La muestra del magnetismo de Lucía Bosé tiene su mayor exponente en esta película del maestro italiano. Sólo tienen una escena, pero nadie recuerda nada más. Como un agujero negro roba la mirada del espectador para quedarse con su atención.

  • Nathalie Granger (1972)

    La cuarta película que dirigió la poeta y novelista Marguerite Duras es una obra magnética, en la que dos mujeres hablan, viven y comparten. Ellas son Jeanne Moreau y una imponente Lucía Bosé.

  • 'Ceremonia sangrienta' (1973)

    Lucía Bosé se convirtió en una actriz de culto, y el director Jorge Grau consiguió que ella protagonizara una película gore con tintes eróticos que es todo un emblema de la mejor serie B de nuestro país y en la que da vida a una marquesa con una receta sangrienta para la eterna juventud.

  • 'Crónica de una muerte anunciada' (1987)

    Las adaptaciones de las novelas de Gabriel García Márquez nunca han tenido buena suerte, y esta no es una excepción, pero el director italiano Francesco Rosi consiguió un reparto de lujo en el que destacaba Bosé en el papel de Plácida Linero.