La actriz madrileña Susana Canales ha fallecido este 22 de marzo en su ciudad natal por causas naturales a los 87 años. Hija del también actor Ricardo Canales, llevaba años fuera de las pantallas y de las grandes salas.
Susana Canales se exilió junto con su familia en Venezuela al empezar la Guerra Civil española. De allí se trasladarían a Argentina para instalarse en Buenos Aires. A los 9 años debutó en el cine con Concierto de almas, una película en blanco y negro dirigida por Alberto de Zavalía.
Su carrera en España tardaría en llegar. Finalmente, en los cincuenta, regresó a su país natal, donde contrajo matrimonio con el actor Julio Peña en 1953. Actuó en varias obras de teatro como Veinte y cuarenta, de José López Rubio, dirigida por Cayetano Luca de Tena. Sin embargo, sería en el cine donde más destacó la actriz madrileña.
Sangre de Castilla (1950), Cielo negro (1951), Así es Madrid (1953), Manicomio (1954), Reto a la vida (1954), Una aventura de Gil Blas (1956) o La muchacha de la plaza de San Pedro (1958) son algunas de las producciones que llevaron a Canales a lo más alto.
Sin embargo, la actriz terminaría por abandonar el cine para enfocarse en el teatro y la televisión. Trabajó en La bella Dorotea (1963), de Miguel Mihura, Un puente sobre el tiempo (1964), de Adolfo Mendiri o Cuplé (1986), de Ana Diosdado, además de protagonizar la serie Estudio 3 (1964), dirigida por Narciso Ibáñez Serrador.
A partir de la década de los noventa, Susana Canales se alejó de los escenarios y de las pantallas. Su rostro se convirtió en un vago recuerdo para quienes hoy lloran su pérdida.