El día de Navidad, James Gunn, el nuevo director creativo de DC Studios, cumplirá dos meses en el cargo. Su misión principal es poner en marcha un plan de diez años para, en palabras de David Saslav, CEO de Warner Bros. Discovery, "emular la estrategia de Marvel". Tiene mucho trabajo por delante, pero a ritmo de polémica diaria en Twitter, ya parece haber cumplido un objetivo muy importate: que su nombre se asocie al de las películas de DC, tal como el de Kevin Feige está vinculado a las de Marvel.
James Gunn y Peter Saffran, el primero como director creativo y el segundo como director financiero, fueron elegidos para liderar el ambicioso proyecto que aspira a replicar el éxito del universo cinematográfico de Marvel con los superhéroes de DC, y en las últimas semanas se han empezado a notar los primeros efectos de lo que parece será un borrón y cuenta nueva con todos los personajes de la franquicia.
Por el camino ya han caído la que sería la tercera película de Wonder Woman y Patty Jenkins. La directora compartió un comunicado oficial en su cuenta de Twitter para dar su versión sobre la polémica, según la cual, había abandonado el proyecto cuando se rechazó la historia que tenía planeada para esta tercera entrega y se le pidió presentar una nueva propuesta.
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"El clickbait de que fui yo quien mató el proyecto era atractivo, pero no es cierto, estaba abierta a considerar cualquier cosa que se me pidiera. Entendí que no podía hacer nada para avanzar en este momento, porque DC está centrada en los cambios que tienen que hacer y comprendo que estas decisiones son difíciles en este momento", aclaró Jenkins.
El estado del contrato de Gal Gadot, la actriz que interpreta al personaje, aún sigue siendo fuente de rumores y su continuidad en la nueva etapa de la compañía no ha sido confirmada con claridad por Gunn. Quien ya se sabe con seguridad que no entra en los planes de DC Studios es Henry Cavill.
Dos meses después de que el propio actor anunciara en sus redes sociales que seguiría interpretando a Superman, el inglés ha confirmado que el regreso que había adelantado la escena postcréditos de Black Adam se quedará en escena eliminada.
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“Acabo de mantener una reunión con James Gunn y Peter Safran y tengo malas noticias. Finalmente, no regresaré como Superman”, explicaba el actor en un comunicado después de reunirse con los nuevos responsables DC Comics. “El cambio de guardia ocurre a veces. Lo respeto. James y Peter tienen un universo que construir, les deseo a ellos y a todos los involucrados en el nuevo universo la mejor de las suertes y la mayor de las suertes”, matizó el actor.
En su anuncio también aprovechó para aclarar que Warner Bros. Discovery le había dado luz verde en octubre para que anunciara su regreso a DC Comics. Sin embargo, los planes cambiaron con la nueva directiva, ya que Gunn está interesado personalmente en dirigir una nueva película de Superman, pero con una versión más joven del personaje, en el que ya no encaja Cavill.
La última polémica la ha protagonizado con Ray Fisher. El actor que interpretó a Cyborg en La Liga de la Justicia de Zack Snyder, acusó en 2021 a Joss Whedon (director de la primera versión de la película) de haber creado un ambiente tóxico y abusivo en el rodaje, asunto por el que intercambió en enero de este año algunos tuits con James Gunn, al que ahora acusa de haberles borrado de su perfil.
"La forma en la que James Gunn utiliza la falsa cortesía en Twitter es realmente divertida. Que salga en defensa de Joss Whedon, se pseudodisculpe por ello y luego lo borre antes de aceptar su nuevo trabajo en DC no lo es. Negarse a disculparse por un comportamiento tóxico parece ser un requisito laboral para WB/DC", dijo el actor en su cuenta adjuntando capturas de los tuits eliminados.
Gunn le respondió en Twitter afirmando que todos sus tuits "se eliminan automáticamente cada cierto tiempo" y que no hay ninguna razón oculta o premeditación tras su borrado. El nuevo director de DC Studios es muy activo en la red social y la aprovecha como altavoz para emitir sus comunicados oficiales, ya sea respondiendo tuits directamente o haciendo alusión a publicaciones concretas en los medios.
"Sabemos que no vamos a hacer felices a todas las personas en cada paso del camino, pero podemos prometer que todo lo que hacemos está al servicio de la HISTORIA y de los PERSONAJES de DC que sabemos que aprecias y que hemos apreciado toda nuestra vida".
Por ahora, y a pesar de que aún tiene pendiente de estreno el tercer volumen de Guardianes de la Galaxia de Marvel en 2023, Gunn ha hecho un buen trabajo de asociación de su nombre a DC Studios, y se ha convertido automáticamente en la figura responsable de la marca que es reconocible para el público.
No es un logro menor, aunque haya en Reddit una divertida corriente conspiranoica que afirma que es un enviado infiltrado de Kevin Feige para destruir el universo cinematográfico de DC desde dentro.