Aunque está claro que la secuela de Joker tiene un protagonista claro, la verdadera sorpresa del largometraje fue un actor que permaneció escondido a plena luz y que fue quien asestó el impactante golpe final al personaje de Arthur Fleck.

Joker: Folie à Deux ha sido comentada por muchas razones diferentes, pero una de las que más ha logrado poner de acuerdo al público ha sido su final, tan desconcertante como decepcionante. Será mejor no seguir leyendo si aún no has visto la película porque a partir de aquí hay spoilers del final.

Connor Storrie, el actor que interpreta al recluso del Asilo Arkham que apuñala a Arthur Fleck (Joaquin Phoenix) al final de la película ha querido comentar el efecto causado por la película. En una entrevista con TMZ, Corrie dijo que no le ha sorprendido que el giro final haya indignado a los fans, especialmente el desenlace, que da a entender que el personaje de Storrie es el verdadero Joker y que se inspiró en Arthur, tallándose una sonrisa en la cara después de apuñalarle.

El intérprete contaba que pasó dos años manteniendo este detalle en secreto. “Estaba muy claro que esta era la película de Joaquín. Se centraba en Arthur. Y yo vi cuál era mi lugar en ella”, expresó Storrie sobre el papel y sobre si seguirá interpretando al Joker en un futuro. “No es algo como, 'Oye, aquí es adonde voy. Esto es lo que soy'. Es parte de la historia de Arthur más que cualquier otra cosa. Estaba claro desde el principio".

Storrie también habló de lo emocionado que estaba de participar en la película y que no pensó que el giro final podría ser importante para su futuro como el villano de Batman.

"Ni siquiera me planteé qué podría significar eso o hacia dónde podría llegar. Obviamente, el Joker tiene un gran número de seguidores. Diría que incluso es una especie de secta. No podía creer que estuviera allí y lo que estaba haciendo. Era tan secreto... No sabía nada más sobre la película excepto esa parte. Se lo tomaron muy en serio. No dije nada a nadie durante dos años".

Después, Storrie comentó que el impacto negativo de la película era algo que ya se podía ver incluso antes de su estreno. "La situación estaba muy polarizada incluso antes de que saliera la película, que creo que es algo bueno", opinaba el actor. “Cuando se anunció que era un musical, la gente desde el principio se preguntó: '¿Qué?' Yo mismo también reaccioné así. Especialmente porque la primera parte era muy cruda y sucia. Esa reacción tiene sentido. Y no puedo hablar por Todd, pero ellos también sabían que sería así. No haces un cambio tan grande como ese sin saber que le estás dando a la gente la oportunidad de no apoyar tus decisiones".

Storrie argumentó que “preferiría que las cosas estuvieran polarizadas a que fueran aburridas” y elogió al director y coguionista Todd Phillips "por tener las agallas de hacer un giro tan audaz, especialmente sabiendo que hay tantos fans del personaje y teniendo en cuenta los elogios que recibió la primera película".