Hay películas que han logrado cosas imposibles. Conseguir cifras en taquilla insuperables e impredecibles, popularizarse y convertirse en fenómeno mainstream desde un punto de partida más bien independiente, o reunir a un elenco de actores prácticamente imposible. Esto último lo consiguió Un puente lejano, una película estrenada en el año 1977 que protagonizaron Sean Connery, Michael Caine y Laurence Olivier, entre otras estrellas del cine clásico.

Dirigida por Richard Attenborough, al que conocemos por interpretar a John Hammond en Jurassic Park (1993) y El mundo perdido: Jurassic Park (1997), Un puente lejano viaja hasta el mes de septiembre de 1944, cuando, alentados por el éxito de la invasión de Normandía, los aliados emprendieron con determinación la operación "Market Garden", un arriesgado plan para poner fin lo antes posible a la guerra, invadiendo Alemania y destruyendo la industria bélica de Hitler.

La clave era conquistar varios puentes por los que pasarían las tropas. No obstante, las estrategias en el campo de batalla, combinadas con los errores del servicio de información, la mala suerte y las pésimas condiciones climáticas condujeron la operación a un desenlace inesperado.

La película se desarrolla a finales de ese mismo año, cuando las fuerzas aliadas y, en particular, un grupo de paracaidistas estadounidenses y británicos, parecían ir con ventaja, hasta que se acaban enfrentando a un imprevisto.

Se trata de una epopeya del cine bélico que, a pesar de tener todos los ingredientes para ser un éxito -como estar escrita por el guionista de Dos hombres y un destino-, acabó cosechando críticas mixtas entre la prensa especializada. Sin embargo, sí que fue aplaudida por la audiencia en su paso por cines. 

Un reparto lleno de estrellas

Entre los protagonistas de Un puente lejano encontramos a un elenco de actores irrepetible y emblemático formado por Sean Connery, James Caan, Michael Caine, Laurence Olivier, Gene Hackman, Anthony Hopkins, Robert Redford, Dirk Bogarde, Edward Fox, Elliott Gould, Hardy Krüger, Ryan O'Neal, Maximilian Schell y Liv Ullmann. Una combinación casi demasiado buena para ser real.

El largometraje se estrenó en pleno apogeo de actores como Connery y James Caan, que acababa de estrenar El padrino II y El jugador en 1974. Además, esta sería también uno de los primeros trabajos en pantalla de Anthony Hopkins o Gene Hackman, y una producción que llegaba en medio de trayectorias tan exitosas como las de Redford, que acababa de estrenar Todos los hombres del presidente; o el legendario Michael Caine.

Es cierto que su metraje es demasiado extenso -alcanza las tres horas de duración- y que quizá no alcanzó el éxito esperado, recaudando en taquilla poco menos de 51 millones de dólares en todo el mundo frente a un presupuesto inicial de 27 millones, pero lo cierto es que Un puente lejano no deja de ser un filme bélico que merece la pena. Al menos por el simple hecho de ver en pantalla y trabajando juntos a un reparto histórico.