Es lunes, comienza la semana y la jornada laboral. La rutina de todos los días, pero algo pasa, se nota en el ambiente. Una sensación de ausencia, de que falta algo. Hoy no hay Juego de Tronos. Las redes sociales están aburridas sin comentar el capítulo de turno. Nadie habla de Jon Snow, ni de Cersei, ni llena las conversaciones con spoilers.
Queda poco menos de un año para reencontrarse con ellos. Un tiempo que se hará largo. Sólo quedan 13 capítulos para que la serie más popular de los últimos años termine y todo el mundo sepa quién se sienta en el Trono de Hierro. Mientras tanto, aquí damos unas alternativas para pasar el mono a todos los fanáticos de la serie basada en las novelas de George R.R. Martin.
Vuelve a ver la serie desde el principio
Una de las soluciones favoritas de los fanáticos de Juego de Tronos es empezar de cero. Reencontrarse con personajes que ya están muertos y buscar guiños ocultos, teorías conspiratorias y detalles que se habían pasado por alto en los trece visionados anteriores. Da igual, uno seguirá gritando con la Boda Roja y quedándose con la boca abierta con la Batalla de los Bastardos.
Si ver cinco temporadas es un trabajo demasiado largo siempre se puede acudir a IMDB y seleccionar los diez episodios mejor valorados por los usuarios. Así saldrá una temporada con lo mejor de lo mejor de poniente.
Leer las miles de noticias de la serie
Juego de Tronos es uno de los fenómenos televisivos más importantes de la historia. Sus espectadores son muchos y muy fieles, por lo que siempre están deseando noticias frescas sobre su serie favorita. Los directores que estarán en la séptima temporada, rumores de cásting, teorías de fans y posibles spoilers se dan la mano en los cientos de informaciones que salen cada día.
Acaba de terminar la emisión y ya ha habido hasta declaraciones oficiales de sus creadores poniendo los dientes largos sobre lo que está por venir. Hay que cebar a los yonquis para que no se olviden de Juego de Tronos durante meses.
Leer los libros
Muchos lo habrán olvidado, pero el origen de todo esto está en los libros de George R.R. Martin. El poder de la televisión y HBO han convertido las novelas en algo secundario. A pesar de que el autor parezca atascado y no haya fecha para la nueva entrega de la saga, los fanáticos de la serie que no lo hayan hecho pueden leer los primeros cinco libros. En sus páginas descubrirán giros que no han ocurrido, personajes que deberían haber vuelto y otros que han tomado destinos muy diferentes en cada una de las versiones.
Cuidado. Los fanáticos de los libros son aún más peligrosos que los de la serie, pues luego se revuelven cuando desde la ficción cambian cualquier ínfima cosa ya escrita.
Engancharse a otra serie
No, Juego de Tronos no es la única serie del mundo, si das una patada te salen centenares de nuevas ofertas. Así que este año de ausencia es bueno para recuperar joyas como The Wire, Los soprano o Breaking Bad, otras obras de arte de la pequeña pantalla. Así también se verán los nuevos episodios con otra perspectiva al descubrir otras grandes producciones que revolucionaron el panorama de la ficción. Si lo que se busca es algo completamente adictivo, Perdidos o Battlestar Galactica serán grandes soluciones.
Si tirar de archivo da pereza, la solución pasa por escoger una de las muchas series que vuelven este verano. Ahí está Mr. Robot, el thriller sobre hackers revolucionarios y anticapitalistas que el año pasado reventó el panorama estival. O UnReal, otra de las sorpresas del año pasado.
Ir a la playa o a la piscina
Tampoco pasa nada por desconectar del todo. Dejar las traiciones y los giros sorpresa en la televisión y olvidarse de Poniente por una temporada. Ir a la playa y a la piscina acompañado de buena música (no vale la banda sonora o Las lluvias de Castamere o un buen libro (tampoco valen los de George R.R. Martin) es una buena terapia de desintoxicación, al menos hasta que llegue el primer trailer o la primera imagen oficial.