Con la amenaza de los Caminantes Blancos esfumada, Daenerys Targaryen, Jon Nieve y todos los que tomaron parte en la batalla de Invernalia se reunieron en los salones del castillo para brindar por la victoria. Fue una noche de vino, exabruptos y mucho amor —aunque algunos personajes, como la Madre de Dragones, se diesen de bruces con una realidad inesperada— después de quemar los cuerpos de aquellos que entregaron su vida para que la larga noche no invadiese los Siete Reinos.

La celebración sirvió para consumar algún que otro affaire —"Nunca había compartido cama con otro caballero", le dice Jaime Lannister a Brienne, a lo que esta le responde: "Yo nunca me había acostado con un hombre"— y romper varios corazones, como el de Tormund Matagigantes, que regresa con su pueblo nómada al otro lado del muro; o el de Gendry Baratheon, flamante señor de Bastión de Tormentas, roto por una Arya que vuelve a compartir aventuras con El Perro —¡cuántos momentos de goce nos ha dado esta relación!—.

La única persona que parece no estar disfrutando de la noche de fiesta en Invernalia es Daenerys, quien tiene que asistir resignada a cómo todo el mundo, liderado por el discurso de un ebrio de y su cuerno que vierte más vino por fuera que en su garganta, alaba a Jon, su sobrino y novio, el hombre que tiene más derecho que ella a sentarse en el Trono de Hierro.

Es precisamente en esa escena cuando se ha registrado una de las situaciones más surrealistas que se han visto en Juego de Tronos: delante de Khaleesi, en la mesa, se observa un vaso desechable de café para llevar; y el logo, aunque no se puede ver nítidamente, parece ser de Starbucks. El product placement por descuido no ha pasado inadvertido para los espectadores de la serie, y rápidamente lo han comentado en las redes sociales.

Mientras que algunos usuarios señalaron el tremendo fallo de producción y posproducción, muchos han aprovechado este extremo para hacer bromas al respecto. Uno de los más ingeniosos ha señalado las dificultades que tendría un empleado de la cafetera estadounidense para escribir el nombre completo de Daenerys Targaryen en el recipiente de cartón.